Capitulo 49. ¡¡¡No conozco a nadie con ese nombre!!!

Start from the beginning
                                    

—Soy Byph, hija de Bapho, el guerrero inmortal.

—Jajaja —se río la araña—. ¿Como un guerrero inmortal, envía a su hija a morir?

—¡¡¡No!!! —dijo enojada la chica orco—. Vine por mi propia voluntad, he venido a mostrar mi valor. Soy Byph, la sombra calamidad, esposa de John Wells, el Conquistador y el guerrero más poderosos de la alianza humanos y orcos.

—¡¡¡¿Qué?!!! —grité sin querer, es imposible, si John solo tiene 10 años, y el idiota ya se casó.

La chica Orco me miró con firmeza a los ojos.

—La esposa de John Wells —repitió la Arachne—. Él, ¿dónde está ahora?

—Eso... ya que he reconocido su poder, sé que no será fácil esconderle algo, así que hablaré. —respondió la chica—. Él fue encontrado hace unos días por nuestros lobos, está en la frontera, cerca de la ciudad de los elfos. Ahora mismo se dirige hacia aquí.

—La ciudad de los elfos.

—¿Qué hace tan lejos? —le pregunté.

—Está a 3 meses caminando de aquí. —respondió.

— ¿Qué paso en este lugar? —dije mirando hacia los muros del antiguo reino destruido.

—Sería una muy larga historia —dijo Byph—. No entiendo que quieren con mi esposo, pero si tratan de dañarlo, luchare con todas mis fuerzas.

—¿Interesante, y piensas que puedes hacer algo conmigo? —le pregunto mi amiga Arachne.

—¡¡¡Esto, esto sí que es una sorpresa!!! —dijo una chica extraña, una mujer humana de hermosa apariencia, caminaba lentamente detrás de la chica orco.

Era una bella mujer de cabello castaño, piel blanca y hermosa sonrisa, además de su cuerpo de modelo.

Jamás había visto a un humano tan perfecto, era tan deslumbrante, pero era extraño, la chica orco trató de detenerla.

—Diosa de la cosecha. —le dijo queriendo evitar que se enfrentaran.

—Esto es en realidad una sorpresa —dijo la Arachne—. Así que la Diosa de la Siega está aquí.

—La antigua y poderosa Diosa de la Guerra —respondió la modeló, su sonrisa me dio escalofríos.

Su poder entonces se desbordo, al instante caí de rodillas, no podía respirar, me dolía la cabeza.

Intenté bloquearlo, quería bloquear ese poder, me cubrí con una capa de cristal, pero se resquebrajo al momento.

Las mire, ambas se acercaron lentamente, su poder se materializo, ambas mujeres se miraron sin decir nada más.

—Fuiste tu quien mató a Aritssa.

—¿Esto? ¿tal vez hablas de mi predecesora? —preguntó la mujer riendo, su risa ilumino el ambiente, pero su poder era demasiado para los presentes.

A duras penas podía mantener la conciencia, y la mayoría de los orcos estaban en la misma condición.

—¿Cuál es tu nombre, jovencita? —preguntó la Arachne.

—¿Mi nombre?, discúlpeme Diosa de la Guerra, pero tengo ordenes de no revelar ciertos datos.

—Supongo que solo él, podría ordenarte eso —dijo la Arachne.

—Digamos que sí —respondió.

—[Redop] —dijo la Arachne, y todo exploto, la realidad parecía distorsionarse de alguna manera muy rara, el maná se agito y salió disparado en todas las direcciones.

John Wells. Reencarnación.Where stories live. Discover now