John Wells. Reencarnación.

capitulo 4 Idrits Batross Griffblue

Perspectiva: Jim

—Jim, hoy tardaste bastante, ¿a dónde fuiste?

—Hola abuelita, ya conseguí un buen trabajo —le dije feliz.

— ¿De verdad, donde? ¿En la granja? —pregunto la anciana.

—No, hoy fui al gremio de aventureros, fui aceptado —le dije, ella dejo caer su cuchara...

— ¿Te aceptaron? —Me pregunto muy sorprendida.

—Sí, y comenzare mi primera misión.

Ena estaba comiendo, y al escucharme, vi que se molesto, me miraba enojada.

No le di importancia, cuando termine de comer fui directo al bosque, ahora podría hacer algo interesante y ganar dinero.

Así que ha buscar raíces Treíntan, el bosque es bastante extenso, hay partes a las que no debo acercarme porque hay una mayor cantidad de maná, entre más me adentre en el bosque, mayor es el peligro.

30 raíces, esto tomara un tiempo, ahora que tengo un trabajo creo que debería hablar con mi madre, pienso que me permitirá hacer ejercicio.

Aunque estuve buscando muy arduamente, solo logre conseguir 2 raíces, eso es porque la planta en si es bastante escasa.

Y solo nace en el bosque... además, tendría que pasar todo el rato buscando.

Regrese a la casa antes que cerraran las puertas.

— ¿¡Jim, es cierto!? —Grito mi madre—. ¿Te aceptaron en el gremio de aventureros?

—Sí —dije mostrándoles mi placa.

—Es cierto —dijo mi madre muy feliz, la sostuvo como si fuera una pieza de oro —. Reúnanse todos —dijo y nos hizo sentarnos frente a la mesa.

—Este es un día maravilloso para nosotros —A mi madre mientras le brillaban los ojos—. Hoy un integrante de nuestra pequeña familia logro convertirse en aventurero.

—Madre —le dije levantando la mano, recordando que tuve que negar mi nombre—. Tengo algo que decir.

— ¿Qué es Jim? —pregunto llena de expectativas.

—Hoy en el gremio, di un nombre falso

—un nombre falso —dijeron todas a la vez.

Mi madre miro la palca, pero como lo supuse, ella no logro entender nada, es natural, si algunos de los aventureros tampoco saben leer o escribir, menos una aldeana.

—Les dije que me llamo John Wells

—Así que diste otro nombre —dijo mi madre... —. ¿Y eso qué?

—Creí que te molestarías por haberlo hecho.

Mi madre miro la tarjeta, mis hermanas no dijeron nada, mi abuela solo me miraba encantada.

—John Wells —repitió mi madre—. Así que ahora tenemos apellido.

La cara de mi madre se ilumino

—Esto es fantástico —respondió—. Desde hoy, somos la familia Wells.

Yui escupió el agua que estaba tomando.

— ¿Qué dices mamá? —la que grito fue Ena.

—Es fácil, si Jim se ha convertido en un aventurero, es natural que nosotros usemos su apellido, además esta es la prueba que nuestra familia ha sido aceptada por el gremio.

Madre se está aprovechando de esto...

—Pero madre, nosotros solo somos costureras, además el —dijo señalándome con el dedo—. Negó su propio nombre.