Capitulo 13: Entrenamiento para puercos.

3.6K 465 204
                                    

Perspectiva: Jim

Cuando Amy termino de comer, me dispuse a ir a comprarle algo de ropa.

Al pasar por el pasillo de la recepción vi una pequeña marrana salir de la oficina de Adai.

Adai me miro y su rostro se ilumino... de inmediato sentí que debía salir corriendo.

Es justo ahora en este momento que necesito una playera con las palabras escritas en grande "Me vale madre"

Porque justo ahora tiene la mirada de alguien a punto de pedir algo...

—Pequeño Jhon —me llamo con la voz más dulce del universo...

— ¿Por qué siento que esto me causar problemas? —le pregunte mientras me acercaba resignado.

—Le presento a la señorita Violet Silvdrag —dijo Adai mostrándome a una niña gorda de 12 años, cabello castaño atado en dos coletas, ojos verdes y pequeños, cachetona y altanera... algo así como la Rubia cuando la conocí.

—Un gusto señorita —la salude y presente—. Mi nombre es John Wells.

—Señorita Adai, para que me presenta a este niño —pregunto la gorda mirándome hacia abajo, a mí y a Amy.

—Señorita, el pequeño John será su maestro —dijo Adai, se paso del otro lado de la barra y se inclino mirándome.

—Qué bonita vista —dije mirando esas enormes colinas...

—Solo mírelo —dijo Adai a la gorda—. Vea estos músculos.

Adai toco mi pecho con su mano.

—Así como lo ve de pequeño, el ha vencido a un montón de Goblins y un Hobgoblin.

A pesar que yo sabía, que Adai me estaba usando para salir de su problema, no dije nada, mirar ese enorme pecho es suficiente pago para mi... pero si pudiera tocar un poco...

Levante mi mano mientras Adai le explicaba un montón de cosas a la gorda... la verdad no se que tanto decía, pero no pude resistirlo más y apreté su pecho...

Espectacular... naturales, es mas aquí no existe el silicón, así que es imposible que no lo sean.

Estaba tan entusiasmado apretándolos que no me di cuenta de la mano que venía a gran velocidad hacia mi cara.

Por instinto me agache, Adai lanzaba golpes a súper velocidad, mismos que esquive por los pelos...

—Señorita Adai, podemos hablar sobre esto... —le dije nervioso tratando de calmarla un poco, no habia mucha gente en el gremio, solo 2 hombres que levantaron el pulgar por mis acciones.

No pude seguirle el ritmo... que rango es esta mujer... cuando por fin logro alcanzarme me dio una cachetada y me dejo la mano marcada en la cara.

—Genial, ahora tengo dos marcas demoniacas —dije sobando mi rostro

Adai se dio la vuelta roja de vergüenza, y se paro detrás de la barra.

—Señorita Adai, ya que usted se dio la libertad de tocar mi cuerpo, yo pensé que era algo natural.

—Como va a ser natural —dijo Adai molesta.

—Tú serás mi maestro —dijo la Gorda señalándome, era la pose típica de Idrits, las piernas abiertas y los brazos cruzados, mirándome como a alguien inferior...

Si te entrenara, te haría sufrir hasta la muerte.

—Lo siento señorita, pero no tengo tiempo para eso —le dije, estaba por irme llevándome a Amy, pero la puerca se puso delante de mí.

John Wells. Reencarnación.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora