Free!, Haikyuu!! Y KNB One Shots

Akaashi Keiji

Akaashi POV

- Tengo todo el derecho de estar enojado! Así que no vengas a darme excusas que no tienen sentido! - le grité. Jamás le había gritado a alguien, al menos no de esa forma y mucho menos a Sayuri.

- Estoy tratando de explicarte lo que sucedió, por qué no quieres escucharme? - ella preguntó, sus lágrimas caían sin señales de detenerse.

- Cállate! Solo...cállate! Toma tus cosas y sal de mi vista! Te odio... - me costaba respirar y sentía un nudo en la garganta, ella bajó la mirada, lentamente avanzó hacia el sillón de la sala y tomó sus cosas.

Luego caminó hacia la puerta y la abrió, afuera llovía a cantaros, se detuvo y parecía que iba a decir algo pero quité la mirada, solo escuché el sonido de sus zapatos cuando salió corriendo, cuando levanté la vista hacia la puerta ella ya había desaparecido entre la lluvia. Avancé y cerré la puerta lentamente, me detuve antes de cerrarla completamente, comencé a pensar en ella, quería gritar su nombre y estaba comenzando a arrepentirme de haberle dicho que se fuera con ese clima.

Salí corriendo detrás de Sayuri lo más rápido que pude, la ví parada debajo de un árbol no muy lejos de la casa, me vió y quiso salir corriendo, pero la detuve tomándola del brazo. Mi corazón no me lo permitía, simplemente no podía dejarla ir, quería odiarla, quería que se fuera, pero no pude.

- Me dijiste que me fuera, pero por qué... - su voz se quebraba con cada palabra que decía y mi corazón latía demasiado rápido.

- Está lloviendo, podrías tener un accidente. Volvamos a casa, podemos solucionar esto hablando... - la jalé del brazo hasta la casa nuevamente, entramos y cerré la puerta con mi mano libre y luego la arrastré de vuelta hasta la sala. No quería creer que ella fuera capaz de engañarme, de ver a otra persona a mis espaldas después de que llevamos tanto tiempo juntos.

Realmente quería odiarla, pero odiaba más verla llorar, odiaba ver esos preciosos ojos llenos de lágrimas, odiaba ver como su labio inferior temblaba y como contenía su llanto. Odiaba que no me mirara a los ojos, que se encorvara como un cachorro asustado. Estaba sufriendo, su sonrisa se había convertido en una mueca, todo su cuerpo temblaba, como deseaba abrazarla, pero aún no sabía si debía perdonarla.

Mi mano aún seguía aferrada su muñeca, mi cuerpo se negaba a dejarla ir. "Cómo es que llegué a amarte tanto?" me pregunté, ni siquiera era capaz de dejarla ir, aunque la quisiera lejos de mí, no podía.

- Deberías cambiarte de ropa, estás empapado. - ironicamente ella era la que temblaba de frio. La tomé de la mano y fuimos hasta nuestra habitación, comencé a quitarme la ropa mojada, pero ella se quedó inmovil en un rincón, me acerqué a ella. Se veía tan indefensa y asustada.

- Levanta los brazos. - ordené y ella lo hizo lentamente, me sorprendió ver que no llevara nada puesto debajo de su sudadera, chasqueé la lengua. Le quité los pantalones y ambos quedamos en ropa interior. Verla así solo me hacía desearla aún más, sus mejillas estaban coloradas y me preocupó que agarrara un resfriado.

- Que fué lo que me hiciste? -pregunté mientras sacaba una manta del armario. Ella dejó salir un pequeño sollozo, y yo quien estaba aguantando las ganas de llorar, jalé de su brazó y la abracé, no podía ver nada por las lágrimas, nos envolví en la manta y comencé a llorar como un niño. Sentí sus pequeñas manos sobre mi espalda y su pecho chocar contra el mio, su cuerpo estaba frio y estaba tratando de que notara lo mucho que temblaba.

- Lo siento...pérdoname...- dijo finalmente entre llantos. La apreté aún más contra mi cuerpo. "Soy un idiota" me dije a mi mismo, simplemente no podía enojarme con ella.

- Por favor, ya no llores. - me separé lentamente de ella y bajé la mirada hacia su rostro, ella me miraba aún con ojos llorosos- Odio verte llorar, Sayuri. -

- Lo siento...Keiji... - nuestros rostros estaban a unos centimetros entre si, y no pude evitar besarla, sus helados labios chocaron contra los mios que estaban ardiendo, hubiera sido un tonto si no la hubiera besado en ese momento, no podía detenerme, la empujé contra la pared sin dejar de besarla, la levanté hasta mi altura y ella envolvió sus piernas sobre mi cintura.

- Keiji... - dijo mi nombre sobre mis labios, pero no dejé que hablara. Luego de unos minutos, finalmente nos separamos, tuve que forzarme a detenerme o de lo contrario no lo habría hecho hasta el siguiente día.

- Aún me amas? - pregunté, aún estabamos muy cerca, mi nariz rozaba con la de ella y podía escuchar claramente el latido de su corazón.

- Jamás dejé de hacerlo. - ella respondió rápidamente.

Dejé de pensar en ese momento, la llevé hasta la cama y luego lo hicimos durante varias horas, terminamos totalmente agotados, ella se quedó dormida al instante, y yo me quedé otra hora viendola dormir. Se suponía que ibamos a hablar aquella noche, pero lo unicó que dijimos fueron nuestros nombres entre gemidos.

La mañana siguiente al despertarme, ella no estaba en la cama a mi lado, me levanté sobresaltado y salí de la habitación buscándola. Me tropecé con el sillón de la sala y caí al suelo.

- Estás bien!? - ella me miraba con ojos preocupados, me tendió la mano para ayudarme. Me puse de pie y lo primero que hice fue abrazarla.- Keiji, que pasa? -

- Nada...todo está bien ahora. - me devolvió el abrazo y luego caminamos así hasta la cocina. Mientras desayunabamos, recordé lo que había sucedido la noche anterior y no pude evitar preguntarle.- oye...anoche, por que no llevabas el sujetador puesto? -

- Se suponía que anoche debíamos ir a la casa de Bokuto a celebrar su cumpleaños, y cuando entraste a la casa yo estaba cambiándome de ropa, me puse la sudadera para salir a verte...- dijo apenada.

- Bokuto va a matarme. - dije frotándome las sienes. En ese mismo instante, golpearon la puerta y Bokuto gritó desde afuera, pidiendo que le abrieramos.

- Hablando del diablo...- ella dió un suspiro y caminó hasta la puerta. Bokuto entró y detrás de él entró ese tipo con el que Sayuri supuestamente me estaba engañando. Él su puso al lado de Sayuri y luego ella habló.

- Keiji, él es mi hermano mayor, Kotaro. Tenía que haber venido ayer pero no pudo salir del hotel por la lluvia. - jamás me había sentido tan avergonzado en mi vida, no podía creer que estuve apunto de terminar con Sayuri por pensar que me estaba engañando.

Ese día me la pasé disculpandome con Sayuri y su hermano, Bokuto lo sabía y no me había dicho nada, cuando las visitas se fueron por la tarde, Sayuri y yo nos sentamos en el sillon de la sala a hablar. Luego de un rato ella se sentó sobre mí y comenzó a besarme.

- Baka...te amo. - me dijo con una sonrisa. Chocó su frente contra la mía y luego volvimos a besarnos.

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Me salió un poco corto.😅

Pero espero que lo hayan disfrutado.😁

Siento mucho haber demorado tanto en actualizar, estuve ocupada y sin muchas ganas de existir últimamente.😑

Mañana subiré la segunta parte del fic con Ikuya. Ojalá me haya salido tan interesante como creo.😋

Gracias por leer, no se olviden de votar.😊

Bye bye!😘