El principio del fin | Nellis/Gay ©

Capítulo 42

—¡Ellis!— Grité.

El Tank iba a atacarme. Era como si tuvieran una visión especial que permite ver que tan herido está un ser humano.

Ellis otra vez puso su vida por sobre la mía. Es un idiota...

Disparé entre ceja y ceja de aquella bestia, para luego literalmente arrastrarme hasta Ellis, quien estaba inconsciente contra un pedestal.

—¿Ellis? ¡¿Ellis?!— Gritaba contra su rostro sin recibir respuesta.

No iba a permitir que ese mocoso tonto muriera de manera tan ridícula.

Tomé una inyección de adrenalina que traía en mi bolsillo, y con fuerza, la inyecté en su brazo. De inmediato reaccionó abriendo los ojos de golpe y chocando su cabeza contra la mía.

—¡Auch!— Me quejé—. ¡Ellis, maldita sea, ponte de pie y ayúdame, mocoso estúpido!

—¡Joder, yo también te amo, Nick!— Mencionó con un evidente tono de preocupación.

Crucé mi brazo por sobre su hombro y comenzamos a correr como podíamos junto a los demás del grupo.

—¡¿Todo bien chicos?!— Preguntó Rochelle en voz alta.

Podíamos escuchar explosiones a los lejos. Lo más seguro era que estaban destruyendo el puente más atrás. No podría asegurar si era para proteger nuestra espalda, o simplemente lo destruían para evitar la expansión de la gripe verde con nosotros incluidos. Siendo sincero, ninguna de las opciones me tranquilizaba.

—¡Hay que subir por aquí!— Indicó Coach hasta un camión de carga.

Tenía una escalera que por suerte nos llevaba hasta el otro lado del puente. Podía ver el helicóptero esperándonos, y eso me ponía aún más nervioso.

Si Ellis seguía cargando conmigo, dudo que podamos lograrlo.

—¿Puedes subir?— Preguntó Ellis.

—Si si... Anda, suéltame.— Me liberé de su agarre.

Con una fuerza desconocida, comencé a subir por los barrotes que formaban la escalera. Una vez arriba del camión, ayudé como pude a cubrir el frente. Llegaban infectados de todas partes, pero para nuestra suerte, el infierno ya estaba llegando a su fin. Sólo unos cuantos pasos más, y habríamos logrado salir de allí.

El tramo que nos quedaba, estaba repleto de agujeros. Simplemente debíamos ser cuidadosos y caminar despacio.

—¡Mierda!— Ellis tropezó y quedó colgando a orillas de un agujero.

—¡Ellis!— Rápidamente fui en su ayuda mientras los demás cubrían nuestra espalda—. Dime, Ellis... ¿Dejarás de tropezar y caer algún día?

—Si estás ahí para cogerme, seguiré tropezando.— Sonrió victorioso mientras volvía arriba.

—¿Cogerte?— Alcé una ceja de manera coqueta.

—¡Joder eres un depravado! ¡Su-Suéltame!— Rompí en carcajadas al ver su reacción.

Soltándose de mi mano, caminó junto a los demás disparando a los infectados. Me uní al tiroteo.

Sin saber porqué, el dolor de mi cuerpo se había disipado levemente. Quizás mis ganas desesperadas por huir y acabar con esto de una vez por todas sea la razón.

El puente se dividia en secciones. Al parecer la zona en donde nos encontrábamos era una plataforma, al igual que por donde habíamos ingresado al puente.

—¡La ayuda está cerca, no paren!— Gritaba Coach tomando delantera.

—¡Vamos por ese autobús!— Gritó Zoey apuntando un autobús estrellado contra la plataforma que servía como rampa.