El principio del fin | Nellis/Gay ©

Capítulo 5

Logramos llegar a la tienda de armas. ¡Nunca había visto tantas! Solamente en películas.

Siempre quise un rifle M-16, pero el rifle de caza era muy tentador, podría parecer francotirador igual que en las películas.

—¡Oigan todos!— Quien avisaba era Nick—. Encontré muchas cosas de utilidad. Miras láser, linternas, munición explosiva y... bombas caseras.

Me acerqué a Nick para pedirle ayuda con lo de las armas. Si debía pedirle ayuda a alguien con ese tema, debía ser Nick.

—Una pistola Magnum... ¡Qué delicia!— Dijo Nick.

—Nick... Amm... Yo...— Hablé lo más bajo que pude. No quería que los demás se enterasen que soy un amateur con las armas, dañaría mi imagen—. ¿Podrías ayudarme a elegir un arma?

—Sin problemas.

Le dije que no me decidía por el francotirador o el rifle. Él me hizo probar ambas armas, dijo "Es simple, Ellis, sólo escoge una con la que te sientas cómodo."

—¡Me quedo el francotirador! Podré mirar a esos hijos de puta de Hunter sin que se den cuenta.

—Buena elección, As.— Hace un momento, a Nick le agarró la manía de nombrarme "As", y eso me hacía muy feliz. Significa que estoy haciendo bien las cosas.

—¡Andando!— Gritó Rochelle.

Debíamos salir por la puerta trasera para poder seguir nuestro camino al Centro Comercial, pero estaba cerrada. En eso, una voz por alto parlante comenzó a hablar.

—Me parece un poco descortés entrar sin avisar y llevarse cosas sin pedirlas— Parecía ser la voz del dueño de la tienda. Había sobrevivido—. Soy Withtaker, el dueño. Pueden hablarme con el botón del micrófono que está junto a la puerta.

—Escucha, With. No tenemos mucho tiempo— Quien hablaba era Nick—. Te daremos lo que quieras si nos dejas pasar y nos regalas estas armas... Podemos darte servicios "especiales".

¿Servicios especiales? ¿Se refiere a tratarlo como si se tratase de la realeza o algo así? ¡Pero que tonto! ¿A quién le importaría ser tratado así en medio de un apocalipsis zombie?

—Admito que esos "servicios especiales" me harán falta más adelante, pero ahora lo que me preocupa es otra cosa— No estoy comprendiendo lo de los servicios—. Me he atrincherado en la bodega del segundo piso de la tienda, pero me olvidé de los refrescos en la tienda de en frente.

—Ajá— Respondió Nick con enojo—. ¿Y qué pretendes que hagamos exactamente?

—Si me los traen, les regalaré todo lo robado y abriré el camino hasta el Centro Comercial.

¿Abrir? ¿Eso quiere decir que estaba cerrado?

—¿Y por qué rayos no bajas tú mismo a buscarlos, eh?— Por la actitud de Nick, parece que su paciencia estaba llegando al límite.

—Ni loco bajaría con esas alimañas solo. Al abrir la puerta de la tienda se activará una alarma, y ni en los mejores sueños podría enfrentar semejante horda yo solo.

—De acuerdo, de acuerdo. Entiendo.

Salimos por la puerta trasera, y efectivamente, el paso al Centro Comercial se hallaba cerrado por un camión. Parece que escogimos un mal día para enfrentar la horda.

—Elaboremos una estrategia, eso siempre ayuda— Comenzó a hablar Coach—. ¿Quién de ustedes es el que corre más rápido?

—Creo que yo y Rochelle.— Dije.