Never let me go. FINALIZADA (Tom Hiddleston Fanfic)

25. Sinceridad

Tom:

Hice trampa. Lo sé.

Pero después de que rompí dos pañales y el tercero lo puse al revés, tuve que llamar a mi mamá.

-Hola Mami.-

-Hola, mi vida, ¿cómo estás?-

-Bien, oye, ¿aún estás en casa de Sarah?-

-Si, ¿por qué? ¿Estás bien, Thomas?-

-Solo necesito tu ayuda urgentemente, estoy en casa de una amiga y no tengo idea de cómo poner un pañal sin romperlo y qué diablos le doy de comer por que lo que su mamá le dejó lo tiró al suelo y no sé vestirla, ¿qué tal que la lastimo?-

-Dame la dirección... Está bien. Llegaré en unos minutos.-

Los minutos parecen eternos. Pero mi madre llega y únicamente he ensuciado una mantita por que sin pañal obviamente la bebé se deshizo del exceso de líquidos y sólo en eso pude pensar.

Tengo que avisar que dejen pasar a mi mamá y cuando llega su escrutinio me pone nervioso, y eso, pocas veces pasa.

-Hola Mami, gracias.-

-No me agradezcas aún.- Su mirada es inquisitiva, la conozco y aunque no me ha preguntado, sé que del interrogatorio del MI6, no me voy a salvar. -¿Dónde está?- Deja su bolso y sweter en el recibidor y observa cada detalle del apartamento.

Hice un perímetro de seguridad con los sofás, y la dejé jugando en el medio de la sala.

-Aquí, ven.- Cuando ve a María su gesto se suaviza y de inmediato se acerca, abriendo mi barrera.

-Oh, pequeña, estás fría, ven aquí.- La levanta y me mira con desaprobación. -Es imposible que no puedas poner un pañal...-

-Rompí dos, son muy frágiles, tiré de la cintilla y se partió, eso no es mi culpa.-

Con lujo de experiencia, mi madre no solo baña a María, si no que la cambia, viste y alimenta: en menos de una hora. Mientras tanto ya me ha preguntado por Anna, y le he dicho todo. Bueno, casi.

-¿Y llevas saliendo con ella desde que la conociste?-

-Es mi amiga, la estoy ayudando.-

-Está bien.-

Creo que no me está creyendo mucho.

Yo sé que es mentirle a mi madre, pero si le acabo de decir que la conocí como una fan, en México, que la dejé de ver dos meses y que se mudó apenas a Londres, que es divorciada y tiene dos hijos... La conozco y no es momento para darle ésa noticia. No aún, cuando llevemos más tiempo y estemos mas claros en todo, entonces se lo diré.

Si algo tiene mi madre es que no presiona más, te deja ser y decidir, aunque no me parezca. Da su opinión y puede incluso molestarse, pero no hace drama, aunque su rostro es muy expresivo.

-Bien. Pues ya está. ¿Y a qué hora llega de trabajar... Anna?-

-Dijo que saldría a las cuatro de la tarde. Su trabajo no es muy lejos, yo creo que por mucho 4:30 estará aquí.- Me rasco la cabeza un poco contrariado, de verdad que ahora pienso que debí pasar más tiempo con Sarah y mi sobrina , ni siquiera estuve en el embarazo de Emma, ahora Kevan tiene un año y apenas lo he visto en contadas ocasiones.

De verdad necesito vacaciones.

Mi mamá duerme a María con una nana que nos cantaba a nosotros, la bebé después del baño y la comida cae rendida y me deja con ella en el sofá.