Stanley

6.2K 478 230
                                    


–¿por qué son todos tan idiotas en cuanto a nuestra religión, ____? Somos judíos, eso no es nada malo.–soltó Stan molesto mientras sacaba su kipá de la basura y la enjuagaba en un bebedero–. Yo soy bueno con todos ¿por qué la vida es así conmigo?.–

–Esperar que la vida te trate bien porque eres buena persona es como esperar que un tigre no te ataque por ser vegetariano. Ni a la vida ni al tigre les interesa una mierda quién eres a la hora de destruirte.–palmeé su hombro.

–Que buena frase, Dorothy.–soltó Richie con voz burlona apareciendo–. Anotala... oigan ¿quieren venir a casa de Bill esta noche? Jugaremos Monopoly.–

–¿con un tramposo como tú? No, gracias. Prefiero terminar mi viernes evitando golpearte con el tablero.–me colgué mi mochila al hombro y caminé por el pasillo.

–¿te acompaño?–asentí sonriente ante la pregunta de Stan.

°•°

Caminábamos por la acera en completo silencio, admirando las distintas aves que cruzaban por nuestras cabezas.

–¿por qué no fuiste con Richie, Stan? Te gusta mucho jugar Monopoly.–miré al chico.

–Al igual que tú, no soporto cuando hace trampa. Además, tenemos que trabajar en nuestro proyecto.–asenti.

Llegamos a mi casa, preparé unos bocadillos y subimos a mi cuarto.
Empezamos a pintar las esferas para nuestro sistema solar, cuando de la nada, Stan habló.

–¿Es verdad que... Nathan y tú tienen algo?–lo miré.

Stan no me miraba, estaba enfocado pintando su sol.

–Algo así, él de verdad se esfuerza para estar conmigo.–

–Y tú ¿lo quieres?–me encogí de hombros.

–La verdad no, no tiene nada especial para mi.–una especie de suspiro de alivio escapó de los labios del chico–. ¿y eso a qué se debe?–

–Pues... me alegra que no estés enamorada de él.–

–Y eso es porque...–le di el pie para continuar.

–Porque... eso me da una pequeña esperanza.–

Stan me miró de reojo, sumamente sonrojado.
Sin terminar de creerme lo que había dicho, dejé mi planeta tierra sin terminar en la mesa y miré fijamente al chico.

–¿yo te gusto?–el chico asintió.

Una sonrisa se formó en mi rostro.
Me acerqué al Stan y besé dulcemente su mejilla, para luego seguir con mi tarea. Stan sólo siguió sonriendo mientras se acercaba un poco más a mi.
No dijimos nada más, simplemente seguimos pintando y armando nuestro proyecto, disfrutando la cercanía del otro.

No dijimos nada más, simplemente seguimos pintando y armando nuestro proyecto, disfrutando la cercanía del otro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
~° One shots y otras cosas de "IT"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora