T1 | Capítulo 3

821 75 14
                                    


Cuando escuché la palabra "asistente personal" Lo primero que pensé era que sería demasiado sencillo hacerlo y que no tendría complicaciones... Pero ahora que solo había pasado una semana desde que había empezado a trabajar, realmente mis pensamientos anteriores estuvieron completamente equivocados. ¡Era mucho más difícil! Si por un momento pensé que crear y hacer un diseño de un proyecto era difícil, esto era peor, sobre todo porque él no hacía nada fácil mi trabajo y esto comenzaba a hacerme sentir frustrada.

Min Yoon Gi solo pasaba tiempo en su estudio, no podía escuchar nada ni saber que estaba haciendo ahí dentro, ¡Era desesperante! Realmente lo admiraba, dudaba que eso cambiara pero comenzaba a molestarme su actitud hacia mí. Él solo salía de su estudio cuando debían ensayar en la agencia, de resto... Los chicos tenían razón: comía, dormía y prácticamente vivía en ese lugar. Nunca me dirigía la palabra ni para darme los buenos días. ¡Min Yoon Gi, te arrepentirás!

Esa mañana, los chicos no debían ir a la agencia por lo que supuse que todos se quedarían en casa. Era muy temprano cuando llegue. Ya había memorizado la clave de acceso del apartamento, tenía la libertad de salir y entrar como quisiera.

— ¡Buenos días! —Dije desde la entrada pero nadie respondió, era de suponerse que todos debían estar dormidos, aún era demasiado temprano.

Me quité los zapatos en la entrada y busque entre los armarios las pantuflas que usaba, no sabía exactamente de quienes eran, pero ninguno de los chicos se había molestado en quitármelas. Ese día la entrada era un desastre, mil pares de zapatos estaban arrojados en el suelo. ¡Estos chicos!

Comencé a recogerlos para guardarlos en los armarios, haciendo una que otra mueca de disgusto, no sabía cuál pero algunos de los zapatos estaban apestosos, incluso comencé a toser. Busqué en los armarios de la cocina un ambientador de spray. Comencé a esparcirlo por toda la sala como una loca, tenía que deshacerme de ese apestoso olor... De pronto me giré y terminé presionando el spray en el rostro de Yoon Gi.

— ¡Ya! —Gruño molesto al tiempo que se frotaba sus ojos. Yo abracé contra mi pecho el spray, mi rostro mostraba lo escandalizada que estaba. — ¿Qué crees que haces? Me duele...

— Lo siento, lo siento... Apareciste de pronto y apestaba... El spray, no es mi culpa... —Entonces me percaté de cómo estaba luciendo, me atreví a recorrerlo con la mirada y mis ojos se abrieron mucho más de lo que se habían abierto antes. — ¡Yoon Gi! —Él abrió los ojos de golpe para mirarme. Entonces yo señalé su torso desnudo y la toalla enrollada alrededor de su cintura cubriendo la parte de su cuerpo donde el sol no llegaba. Tenía gotas de agua por el torso lo que significaba que acababa de tomar una ducha... y sobre todo, su piel era demasiado blanca y bueno... Debo admitir que se veía bastante bien, yo no podía dejar de mirarlo.

— ¡Ya, ya, ya! —Él también estaba escandalizado ya que cubrió su pecho con sus manos. — ¡Deja de mirarme! ¡Pervertida! —Entonces prácticamente se abalanzó sobre mí para cubrir mis ojos. Pude sentir su pecho pegado a mi espalda, sentí humedad del agua y un extraño cosquilleo en la piel. — ¡Wow! Me consiguieron una asistente que es una pervertida.

— ¡Suéltame! No es mi culpa, tú te apareciste así...—Me excusé, aunque estaba apenada, me causaba gracia notarlo tan avergonzado, era la primera vez que no tenía esa actitud de ogro conmigo, él estaba en desventaja.

— ¿Por qué te paseas sin ropa? —Agregué.

— Porque puedo, es mi casa... —Se defendió aun sin soltarme. Él tenía razón.

— Aun así, eres un ermitaño que solo usa ropa negra con mangas largas y que odia el sol. —Me quejé cruzándome de brazos, y por primera vez pude escuchar una pequeña risa de parte de él. — ¡Oye, Yoon Gi! ¿No piensas soltarme?

Somos una mentira | Min Yoon GiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora