Capítulo 51. Una nueva aliada

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A pesar de estar en un momento tan crucial y serio, no me cabía en la cabeza que una mujer tan guapa, atractiva, con una calidad humana tremenda, inteligente, haya pasado la mayor parte de su vida soltera, yo calculaba que Coet, tenía unos 28 años como máximo. 

Y en este instante tan determinante, me pongo a pensar en esto porque todo mundo la quedaba viendo a ella y me regresaban a ver a mi, y la expresión de sus miradas era como: "qué hace ese muchacho con una mujer tan hermosa como ella, qué envidia".

-Entonces los rumores que corren en la universidad sobre el Dr. Émpore eran ciertos...

-Espere un momento -me entró la duda- ¿cómo sabe de los rumores?

-Por que los profesores lo comentan... Hablan muy ávidamente de ello.

-¿A pesar de que Émpore hace un año que no trabaja más en la institución?

-Debo confesarte que yo los he escuchado hablar cuando voy a la sala de profesores, parece ser uno de sus temas favoritos, nunca he intervenido, pero si los he escuchado, lo lamento.

-Es increíble, el profesor hace tanto tiempo que no trabaja en la universidad y siguen hablando de él, son unos hijos de...

-¡John! -me reprendió.

-Lo siento profe, pero si me da rabia, si tan solo supieran todo el sufrimiento por el que ha pasado Émpore...

-Te entiendo, pero no te rebajes, al contrario no debes hacer caso...

-Está bien profe Coet...

-Y volviendo al tema, también es cierto lo tuyo, pues leí lo que escribiste en aquella carta... Pero lo que todavía me tiene pendiente, es los viajes en el tiempo... ¿En serio ya viajaste en el tiempo John?

-Si profe, es toda la pura verdad, debe creerme...

-Es un poco difícil de creer, pues parece algo que se vería en una película de ciencia ficción...

-Es la verdad, recuerde que he estado trabajando con una de las mentes más brillantes de nuestra era...

-En eso tienes razón, la fama del Dr. Émpore lo precede...

-Entonces, qué me dice profe... ¿Qué es lo que va a hacer?...

-Bueno... siendo sincera, todo lo que has dicho es a la par que conmovedor, increíble. Después de escucharte, he decidido que...

-¿Si?...

-Que tengo que hablar con Émpore para corroborar todo...

-¿¡Qué!?

-Así como lo escuchaste, antes de tomar una decisión firme, tengo que hablar con él...

-Está bien -expresé resignado, pues conociendo como ella es, muy difícilmente iba a cambiar de parecer.

-Llámalo de inmediato -dijo.

-Ahí hay un pequeño problema... Por temas de seguridad no nos comunicamos por celular, de hecho Émpore no tiene uno hace mucho tiempo.

-¿Entonces?

-Entonces yo me acerco a una de las entradas del lugar, él me ve y luego sale a abrirme, así es como lo hacemos...

-Bueno, entonces vamos de vuelta ¿no?

-Mire, déjeme hablar con él primero, para explicarle las cosas, ¿le parece? Por que no la va a dejar entrar de buenas a primeras... Lo que si debo recalcar es que para estar haciendo esto es por que confío mucho en usted... 

-No es necesario que lo digas... Acepto tu propuesta, ve rápidamente yo te voy a estar esperando aquí mismo.

-Está bien, voy de inmediato.

Salí del lugar y me dirigí a una de las entradas, Émpore salió a los tantos minutos.

-¿Qué pasó? -expresó muy apacible, como si ya supiera que la cosa no eran tan grave.

-Hablé con mi profesora, le conté absolutamente todo...

-Entiendo...

-Ella me dijo que no iba a decir nada, pero me puso de condición que quería hablar con usted doc...

-Entiendo...

-¿Ah?... ¿No se va a molestar o no va poner trabas?... Lo veo muy relajado...

-No, porque ya me esperaba algo como esto, se ve que esa mujer es de muy buen corazón al preocuparse por ti... Me recordó a alguien... Así que puedo confiar en ella... 

-¿De verdad? -un aire de nostalgia surgía del profesor.

-Sí, tráela, pero ya sabes, debes cambiar de entrada para no levantar sospechas.

-Si doc, como diga, no se preocupe, voy y vengo lo más rápido.

Salí a reencontrarme con la profesora Coet, y de nuevo volvimos a la casa de Émpore.

Parados en uno de los ingresos, él salió a recibirnos.

-Mucho gusto -expresó animado y extendió su mano- soy el Dr. Ello Émpore, ¿usted es?

-Soy la Dra. Bellora Coet, -le devolvió el salud- es un gusto para mi también.

-Así que Dra. Coet, pase por favor, está en su casa.

Todos seguimos al interior del laboratorio, Coet se la veía nerviosa pero muy ansiosa. Al fin llegamos a la puerta de ingreso del laboratorio luego de pasar por el túnel de ingreso.

Cuando Émpore abrió la puerta, la profesora Coet quedó anonadada, no era para menos, cualquier persona se quedaría así, era un lugar impresionante.

-Pasen por favor -todos nos dirigimos al interior.

-Qué lugar tan increíble, no imagino cómo lo lograron construirlo -dijo mientras veía por todos lados.

-Bueno Dra., es un trabajo de años, un trabajo en conjunto con mi padre. Él se lleva el mayor crédito creo yo... Pero basta de rodeos, usted quería conversar conmigo no es así? -dijo contundente, la profesora lo regresó a ver y se puso sería- Venga por aquí para poder conversar. Los dos ingresaron a la habitación del tiempo.

 Otra conversación en la que yo no intervenía. Esta situación me hizo recordar a cuando el profesor y su padre se encerraron en la habitación del tiempo a conversar, y hasta la fecha no sé qué dijo Chron.

Pasaron veinte minutos y ellos salieron.

-Es hora de que me vaya, tengo mucho trabajo que hacer en la universidad, pero mañana vengo -me regresó a ver.

-¿Mañana? -cuestioné confuso.

-Si John, le voy a enseñar a tu profesora cómo funciona la máquina del tiempo, todo lo que ha sucedido hasta tu segundo viaje, y todas las teorías que manejamos.

-¿Es en serio?, pero se supone que todo esto es un secreto de nosotros dos profesor -reclamé- ¿Usted no dijo que era riesgoso y peligroso que alguien más supiera todo?

-Sí, y lo sigue siendo, pero podemos confiar plenamente en la Dra. Coet -la regresó a ver con una mirada de complicidad. 

-Bueno me voy -volvió a repetir.

-Si, vamos te acompaño -los dos salieron del laboratorio.

Dos cosas pudieron suceder, la una que era verdad que el profesor confiaba plenamente en la Dra. Coet, porque pudo ver su corazón, o la segunda es que quedó tan prendado de su belleza que no estaba pensando con claridad...

(Continúa en el siguiente capítulo)

La Paradoja de los Viajes en el Tiempo (Completa)Where stories live. Discover now