Capítulo 37.Conversación sincera

241 34 9
                                    

-Así que cuéntame, qué tal la pasaron en la universidad en mi ausencia -Regina y yo nos sentamos en una de las mesas del lugar, ella estaba muy bien arreglada.

-Pues... Primero cuéntame porqué decidiste armar toda esa gran mentira ¿no?

-¿Qué mentira? -me hice el desentendido, en primer lugar no se porqué acepté reunirme con ella, ya sabía que querría hablar de mi supuesto viaje, el tema era que, no me pude negar a su petición...

-No te hagas John, yo estoy muy informada con respecto a los intercambios que hace la universidad, y sé que solos los dan a los que cursan niveles superiores, no a nosotros...

-Pues yo soy la excepción -respondí seguro- hice una petición para que me lo dieran.

-Ya que te empeñas en no decirme, yo te contaré algo... Fui al departamento de intercambios a hablar de ti, y me dijeron que tu no estás en el programa y que obviamente era imposible que estés, porque cursabas el tercer semestre y los intercambios se dan a partir del sexto, así que, dime de una vez porqué mentiste así... -me dejó frío, la verdad nunca se me pasó por la cabeza que ella iría a preguntar en la universidad, pero era ella, nunca se le escapaba nada...

-No te lo puedo decir, es un secreto Reg... Mejor me voy... -me levanté en acto de irme, no podía contarle la verdad. Mi única opción era irme de una vez.

-John, no pienses dejarme así, si no me cuentas le diré a tus padres que todo fue una gran mentira tuya... -ella también se levantó.

-No te atreverías, tu no eres ese tipo de persona, tu no eres chismosa... Tú nunca lo harías, te conozco demasiado...

-Puede que tengas razón -dijo cambiando su expresión, ella se sentó y yo también- pero quiero saber porqué hiciste todo esto... ¿Acaso yo tengo algo que ver? -se sinceró.

-No -dije contundente- ¿Por qué tendrías tu algo que ver? -claro que ella tenía algo que ver, parte de la decisión que tomé fue por ella.

-Dímelo tu... Creo que te enojaste demasiado conmigo por haberme ido de tu casa esa vez que íbamos a salir -se sonrojó un poco- Tal vez, solo decidiste irte, para no verme...

-No -alargué ese no- como crees, no me enojé Reg, si fue mi culpa por haber llegado tarde a mi casa, tú no tuviste la culpa, sino yo...

-¿Estás seguro? -volvió a insitir.

-SI Reg, ni que tu y yo fuéramos algo para que me afecte tanto...

-Pero yo te gustaba ¿cierto? -Me cogió desprevenido con tal pregunta, se volvió a sonrojar y yo con ella.

-Reg, ¿eres tú? -expresé en tono irónico, se me hacía muy extraño que ella pregunte eso, nunca en mi vida me hubiera imaginado que ella se atrevería a decir algo así, definitivamente tenía que descubrir qué le sucedió para que cambiase tanto en estos últimos meses.

-Claro que soy yo tonto, y no me cambies el tema -tenía sus ojos clavados en los míos- reponde la pregunta.

-Esa clase de preguntas no se hace -respondí un tanto nervioso, no sabía si decirle que si me gustaba o no...

-Si eres hombre, responde de una vez -un frío largo recorrío mi cuerpo, Regina estaba determinada a saberlo y como me acabó de retar, tenía que responderle.

-Visto lo visto, sí, sí me gustabas... -expresé con propiedad.

Hubo un silencio incómodo por unos momentos, yo volví a hablar.

-Pero, ten en cuenta que dije, me gustabas, en tiempo pasado -estaba siendo un poco cruel con ella- antes, es decir hace unos meses me gustabas, y mucho, pero ya no...

-Si lo escuché, no hace falta que me lo repliques -dijo un tanto derrotada- pero solo quiero saber por qué te gustaba si yo era tan fría, seria y calculadora.

-Sí, y esas son las razones por las cuales dejaste de gustarme, pero, ahora que estamos tan sinceros, tienes muchas otras cualidades Reg, tu inteligencia, tu capacidad de resolver problemas, el que seas tan segura de ti misma, independiente, y por su puesto tu belleza exterior... Creo que ha ningún hombre se le escapa lo guapa que eres -me sinceré y puse una expresión suave.

-¿En serio te parezco guapa? -no respondí nada, la dejé continuar- yo nunca me he considerado guapa, tampoco femenina, ni tampoco creo tener algo que le guste a los hombres...

-Tampoco te autojusguez tan fuerte, si eres guapa Reg, y como te dije hace un rato, tienes muchas cualidades buenas... Aún así es difícil llegar a ti, o mejor dicho lo era... Ya no te preocupes en vano. Haz cambiado mucho, y para bien. Ahora, a cualquier chico le vas a gustar, así que tranquila -lo dije con una mirada suave y honesta, pues todo era cierto.

-Gracias John, lo que me dices me anima mucho, pero lo único que quiero es gustarle a un solo chico...

-¿Y quién es ese chico, si se puede saber?

-Pues tú -sus ojos se fijaron en los míos, una chispa entre nosotros surgió.

-¿Qué?... Me estás hablando en serio Reg, pero si hace unos meses ni la hora me dabas, ¿ahora me dices que te gusto? -la verdad quedé impresionado, era muchas cosas para pensar, jamás pensé que ella me dijera que le gusto, nunca... Pero sucedió, no lo puedo creer, estaba diciendo muchas cosas, no era ella, o al menos la Regina que dejé.

-Es verdad, no puedo mentir, en estos meses que no supe nada de ti, me prometí a mi misma que cuando te volviera a ver, te diría lo mucho que me gustas, y aunque no creas, todo esto es muy difícil para mi, es la primera vez que le digo a un hombre que me gusta, es la primera vez que me atrevo a decir todas estas cosas...

-No sé que decirte Reg, tengo mucho en qué pensar y no podría decirte nada ahora -por un lado era verdad, tenía mucho qué pensar, por otro mi cuerpo casi me ganaba para acercarme a ella y darle un beso, y decirle que también me gustaba...

¿Qué debía hacer?

(Continúa en el siguiente capítulo)

Nota del autor: Gracias a los fieles seguidores de la historia, de todo corazón gracias.





La Paradoja de los Viajes en el Tiempo (Completa)Where stories live. Discover now