CAPÍTULO DIECIOCHO

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Era lunes en la tarde, tres días después de lo sucedido dentro del centro comercial, y HoSeok seguía sintiéndose cabreado con cierto imbécil que lo golpeó e insultó al castaño.

Obviamente TaeHyung terminó esa "relación" -si es que se puede llamar así- por mensaje ya que no quería ver a MinJae ni en pintura, eso dejó mas tranquilo al mayor y contento al castaño.

Ese tipo nunca lo mereció.

TaeHyung pensó que tal vez el estar con HoSeok le hizo sentirse más seguro y feliz que lo que era con su antigua pareja. Eso se podía notar muy fácilmente.

Como en este instante que se encuentran en la cocina besándose, TaeHyung sentado en la encimera con HoSeok entre sus piernas, sus manos se encuentran enredadas en el cuello del más alto mientras éste las tiene recargadas sobre la piedra de mármol a cada lado del cuerpo de TaeHyung. Ambos ladean sus cabezas para hacer más cómodo y húmedo el beso, sus ojos cerrados, sus lenguas jugando entre si, produciendo sonidos que sonaban como chasquidos muy obscenos.

La falta de aire comenzaba a hacerse presente pues llevaban mucho tiempo así. Así que sin querer hacerlo, se separan.

Ambos abren sus ojos con lentitud, uno aclara su vista que se torno borrosa al mantenerlos cerrados mucho tiempo teniendo como visión y primera imagen el rostro del hombre entre sus piernas y el otro simplemente los abrió viendo únicamente oscuridad.

Sus respiraciones eran agitadas y sus labios se encontraban hinchados, sobre todo los de TaeHyung. HoSeok acaricia de arriba a abajo la cintura del otro.

— Me gustan tus labios, todo de ti me gusta.

TaeHyung muerde su labio y sonríe tímido, aún le costaba acostumbrarse a los constantes cumplidos que recibía en esa casa, sobre todo por parte de HoSeok. 

— T-Tú también me gustas mucho.

Deja un suave y casto beso en los labios del pelinegro haciendo sonreír al contrario.

— Lo sé.

TaeHyung frunce el ceño y le da un golpe en el pecho sacándole una sonrisa que muestra todos sus dientes a la vista.

— Engreído — otro golpe y HoSeok detiene el siguiente con su mano.

— Espero que sepas que aunque tus manos son más pequeñas que las mías, tus golpes son dolorosos.

— ¿Cómo sabes que son más pequeñas? — oculta sus manos por detrás de su espalda para evitar que HoSeok lo compruebe tomándolas.

— Cuando te tomo de la mano puedo sentir la diferencia — responde con simpleza.

El castaño hace un puchero que HoSeok lamenta no ver. Sonríe.

— Pero aún así pienso que tus manos son bonitas como tú.

TaeHyung se sonroja fuertemente y vuelve a sonreír agachando la cabeza.

— E-Eso es mentira — susurra inaudible pero HoSeok logró escuchar.

— ¿Me estas llamando mentiroso? — pone una fingida expresión dolida.

Rápidamente el más bajo niega con la cabeza pero al recordar que eso es absurdo, habla.

— No quise decir eso, sólo que tú no me puedes ver y yo...

— ¿Quieres decir que lo que digo no tiene sentido, por que no te puedo ver?

Emite un sonido de afirmación y vuelve a mirar hacia el suelo.

— Nunca había escuchado tal estupidez. Lo que me recuerda ... — busca la mano contraria y al encontrarla entrelaza sus manos para después halarlo fuera de la cocina.

Un Nuevo Latido |°HOPEV°|Where stories live. Discover now