Un Nuevo Latido |°HOPEV°|

CAPITULO DOS

HOSEOK.

Siento y escucho a papá moverse de un lado a otro por todo su despacho y por sus movimientos algo rápidos pero a la vez pausados sé que esta preocupado.

Sin embargo no digo nada, nunca lo hago, sólo espero. Sus pasos se detienen.

- Hoseok - su voz sonaba insegura, como si tuviera miedo de equivocarse con sus palabras - me iré por unos meses del país... y estaba pensando en dejarte a cargo de alg...

- No hace falta - interrumpí - si tu problema es no poder ir de un lado a otro por mi culpa, puedes dejar de preocuparte puedo cuidarme solo.

- Hijo no me refería a eso, sabes perfectamente que mi mayor prioridad eres tú.

Reí con sorna. - ¿De verdad? - me levanto de la cómoda silla de cuero en la que me hayaba sentado - ¡Sabes perfectamente que por culpa de esta maldita ceguera soy una carga para ti!

Mi padre suspira exasperado. -Hoseok, sabes muy bien que eso no es así, y no me importa cuanto te resistas a seguir adelante, ten por seguro que aún en tu estado puedes hacer muchas cosas, hijo tu vida no ha terminado.

Coloco mis manos al borde de el escritorio para apoyarme y luego inclino el rostro a donde creo se encuentra el de mi padre.

- Para mi... terminó.

Doy media vuelta para poder retirarme, pero la voz de mi padre se hace oír nuevamente y detengo mis pasos.

- Mi vuelo es mañana a primera hora, alguien vendrá a cuidar de ti.

No puedo ver nada pero sé por el tono de su voz que habla enserio y nada lo hará cambiar de idea.

- ¿Así que ahora necesito una niñera?

- Mañana se presentará a primera hora, tenía planeado hablar con él personalmente, pero debido a mi agenda, me temo que no será posible. Así que le pedí a Chao que se hiciera cargo, el decidirá si quien llamó es apto para cuidar de ti - Respondió ignorando totalmente mi pregunta.

- Bien - respondí rendido y con los dientes apretados. Todo esto será un fracaso, y no es necesario que vea para saber eso.

Estoy seguro que mi respuesta no lo deja del todo satisfecho, aún así decido irme a mi habitación.

Me pongo en marcha hacia la puerta con un poco de dificultad, mis manos se elevan un poco, por si choco con algo y salí dando un fuerte portazo.

Avanzo con cuidado hacia mi habitación que esta situada al lado de la de mi padre. Hace algunos años estaba en otro lugar de la casa, pero por mi estado, mi padre quiso tenerme cerca por si necesitaba algo.

Entré e inmediatamente voy hacia mi cama. Me recuesto y cierro los ojos, aunque bueno no le veo el caso ya que no puedo ver nada, aún así mi cuerpo reacciona conforme funciona.

Pensaba en dormir unas horas, pero todo eso se va a la mierda cuando escucho mi puerta ser abierta y posteriormente ser cerrada, escucho unos pasos avanzando sigilosamente hacia mi, al igual que una risilla traviesa.

No era necesario preguntar quién era, pues sabía perfectamente a quien pertenecían esas risas.

- ¿Qué sucede Jimin?

Los pasos cesan. - ¿Cómo lo haces hyung? - Pregunta con su típica voz aguda.

- No respondas con otra pregunta - lo regaño y me acomodo mejor en mi cama, quedando sentado - pude reconocer tus pequeñas pisadas enano, además de que no eres nada silencioso, puedo escuchar tu risa chillona.

Estoy seguro que en este instante esta haciendo un puchero.

- Hyung usted es realmente sorprendente, aunque no tanto como YoonGi hyung, él es igual de inteligente y guapo que usted.

Comencé a reír por las cosas que decía el pequeño ChimChim, él a estado enamorado de mi primo YoonGi desde que era apenas un niño, siempre se aseguraba de decírselo a todo mundo.
Él sólo tiene dieciocho años y está totalmente loco por mi primo, el cual estoy seguro se encuentra igual. Aún no entiendo como es que no son pareja, cuando se nota a kilómetros que se gustan.

- Por cierto - digo después de unos segundos - ¿Cómo demonios entraste?

- Chao me dejo pasar.

- Debí suponerlo.

- Si. Escuché que el señor Jung sale mañana a un viaje de negocios, me lo dijo Chao cuando pregunte por él y dijo que se encontraba empacando.

- Así es - inspiro - y lo peor es que tengo que estar al cuidado de alguien durante su estancia.

- ¿De verdad? ¿Y eso no es bueno?

- No.

- ¿Por qué?.

- No me gusta depender de las personas. Sólo eso.

Sonrío y niego con la cabeza.

- No creo que sólo vengas a preguntar por mi padre, ¿A qué has venido realmente?

Su silencio me dice que es algo "Serio" para él, aunque bueno... Es Jimin.

- YoonGi Hyung me invitó a salir - su voz sonaba nerviosa, pero con un toque de felicidad a la vez - Y por supuesto que acepte.

- Y ¿cuál es el problema?

- Nunca e ido a una cita y no se que hacer, estoy seguro que lo voy a arruinar, tal vez Hyung sólo me ve como un niño encaprichado con su primer amor.

Sonrío por sus preocupaciones tan absurdas y tiernas.

- Estoy seguro que para él eres más que eso. Lo conozco desde que tengo memoria y creeme cuando te digo que él no es de los que invita a salir a cualquiera, además sólo hay una persona que llama su atención.

Escucho como su respiración se vuelve pesada y sus pisadas de chucky acercarse a mi, me toma por hombros y me sacude mientras habla-grita. Lo celos nunca son buenos.

- ¡Hoseok Hyung diga quien es y lo matare con mis propias manos!

- Tus manos jamás servirían para estrangular a alguien y no creo que puedas matarte Jimin.

Se calla al instante y en menos de un segundo lo tengo abrazado a mi.

- ¡Le gusto a YoonGi Hyung! - Grita en mi oído dando brinquitos.

- ¡No grites! - lo regaño haciendo una mueca.

- Lo siento - Se quita de encima y escucho sus pasos alejarse.

- ¡Nos vemos Hyung! ¡gracias! - dice rápidamente - y por cierto suerte mañana con tu niñera.

- Es chico.

- Como sea. Adiós Hyung.

- ¡Espera!

No escucho la puerta cerrarse por lo que supongo que sigue ahí.

- No le digas a YoonGi. - no quiero morir por sus manos.

- No lo haré.

Ahora si la puerta se cierra. Esos dos realmente son unos idiotas al no declarar sus sentimientos, un empujón no les caería nada mal.

- Bien sólo serán unos cuantos meses - me frotó la cara frustrado - Nada cambiará -. Siento los párpados pesados y al final el sueño me vence.