Duelo de dioses

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Narrador yo

Uchiha Akeno miraba la batalla desde donde tenían que esperar los participantes. Estaba temblando de la emoción. No es que no estuviera preocupada, que si lo estaba, pero era una Uchiha y las batallas emocionantes la hacían hervir la sangre como a todo miembro de su clan.

Había estado observando el enfrentamiento entre su ahora esposo, algo que tanto ella como Naruto se sentían raros al referirse a si mismos como marido y mujer, por lo que quedaron de ser novios o algo más acorde a su edad hasta que fueran más mayores, y el otro miembro del equipo 11, Uzumaki Ryū, el último Uzumaki puro.

Akeno apretaba las manos en el varandal que había para no caer a la arena, pudiendo casi dejar la marca en este.

Tenia el Sharingan activado y no se perdía ninguno de los movimientos de los dos, pero sobre todo de Naruto, por el cual estaba preocupada aunque ella no fuera a decirlo abiertamente.

Se sorprendió cuando Ryū se destapó el ojo, dejando a la vista el Rinnegan que poseía en este, lo que según ella complicaría aún más la batalla, o más bien la subiría de nivel.

Akeno (pensando):Naruto....dalo todo en este combate, por favor. Ryū y tú sois los mejores, pero por respeto a ambos, cada uno debe dar todo lo que pueda de si mismo.

En las gradas.

Mikoto estaba con una ligera sonrisa en su rostro. No sabía al por qué, pero no se sorprendió cuando ese joven se destapó el ojo derecho mostrando el Rinnegan. Se había esperado algo así, ya que no creía que el joven intentará copiar a Hatake Kakashi.

Mikoto (pensando):está batalla se te está complicando, Naruto. Deberás usar tu doujutsu si quieres subir de rango.

En el palco

Tanto Hiruzen como el Kazakage estaban​ muy sorprendidos, sobre todo este último, ya que empezó a idear algo para atraer a ese chico a su bando.

Kazakage (pensando):ese chico sería un cuerpo perfecto para mi. Tal vez durante la invasión, lo tome al igual que a Sasuke-kun. No puedo desperdiciar la ocasión para obtener el Sharingan y el legendario Rinnegan.

En la arena

Naruto sonrió al ver el ojo que poseía su rival.

Naruto:así que tienes el Rinnegan, eh. Esto sube de intensidad.

Ryū suspira.

Ryū:este ojo no es de Ryū, Naruto-sempai, si no de su padre. Es implantado, por lo que no es obtenido del Kekkei Genkai de nuestro clan, al menos, aún no.

Naruto:ya veo....así que ese ojo es de tu difunto padre–el pelirrojo asiente antes de ponerse en pose de pelea–. Je, vamos a continuar.

La batalla entre los dos Uzumaki, volvió a estallar, pero esta vez a mucha más velocidad. Gracias al Rinnegan, Ryū conseguía asestar más golpes con su taijutsu, cosa que molestaba de cierta manera al semi pelirrojo, que recibía diez golpes por cada tres que el daba.

Se separó, e hizo una secuencia de sellos para luego lanzar una gran cantidad de senbon eléctricos contra el Uzumaki pelirrojo, que de su boca solo salieron dos palabras.

Ryū:Shinra Tensei.

El ataque se repelió, y el chico de mechas rojas se estrello contra la pared gracias a una fuerza invisible.

Naruto (pensando):rayos. Ryū sabe usar el Shinra Tensei. Si sabe algún otro de los poderes del Rinnegan, estoy perdido.

Se levanta con un dolor en todo el cuerpo tras haber chocado contra la pared.

Uzumaki Naruto: El Jinchuriki PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora