Probando habilidades: Rinnegan

Comenzar desde el principio
                                    

Akeno:eres un tonto, Naru. Si yo quisiera que te marcharas, te habría lanzado algún kunai. Ya te he visto aquí los otros dos días, desde que comenzaste con tu entrenamiento en el manejo de las cadenas.

El joven se quedó quieto, sin hacer ningún tipo de movimiento. Un latigazo había recorrido su columna vertebral, dejándolo estático cuando la azabache toco su piel.

Naruto sentía la cálida, suave y mojada piel de su amiga sobre la suya, y no entendía por qué no podía moverse, cuando lo que quería en esos momentos es irse de ahí para dejar a la Uchiha con su entrenamiento individual.

Akeno:ya se. Entrenemos tú y yo. Sé que no debería ser así, pero ya que sensei no nos quiere entrenar y nos deja hacerlo a nuestro gusto, pues aprovechemos y entrenemos los dos. Que dices Naru, ¿entrenaras conmigo?

La joven ladea la cabeza y esboza una sonrisa que parece alumbrar. El chico no sabe por qué, pero siente que con esa pose, es la chica más linda que ha visto nunca.

Suspira derrotado y deja sus cosas en el suelo.

Naruto:vale, Akeno-chan. Pero ponte tú ropa, que me da vergüenza verte así vestida.

La azabache solo ríe.

Akeno:eso quiere decir, ¿que no te gusta lo que ves?

Con Hiruzen

Sarutobi se encontraba en la sala del consejo, expulsando humo por su boca como si de una locomotora se tratase.

Frente a él, se encontraban todos y cada uno de los miembros del consejo. Los del lado shinobi, mantenían su rostro impasible, sin demostrar temor ni ninguna emoción de algún tipo. Por otro lado, los del lado civil, mostraban sonrisas arrogantes, de superioridad, como si fueran los reyes del mundo, o al menos de esa aldea.

El Kage suspiro. Ya era muy viejo para tanta discusión con esos hombres del lado civil. Alguna vez en su vida, llego a pensar que eran peores que el papeleo que le tocaba realizar todos los días.

Hiruzen:bien, ¿a que viene esta reunión? Yo no la he organizado.

???:he sido yo, Hiruzen.

Un hombre vendado, de pelo negro y apoyado en un bastón de madera, entro en la sala seguido de dos ANBUS con máscaras blancas con las siglas NE en estas.

Hiruzen:Danzou–susurra el Sandaime con molestia–. ¿Y que es tan importante para llamarnos a todos?

El ahora conocido como Danzou, se sienta en su lugar en el consejo, flanqueado por sus dos ANBUS más leales.

Danzou:estamos reunidos aquí, por qué tú, Sarutobi Hiruzen, nos has ocultado información–le reprocha el líder de Raíz, molesto–. En primera, nos ocultaste que había un Uzumaki puro en esta aldea. No había registros de el, hasta que firmaste ese equipo 11 para colocar al Jinchuriki–todos en la sala, miran con detenimiento al viejo Kage mientras escuchaba las palabras de Shimura–. Y en segunda, ¿de donde te has sacado a esa Uchiha? Si es una sobreviviente de la masacre y al ser una Uchiha mujer, debería estar junto a Uchiha Sasuke, el líder del clan.

Sarutobi suelta una bocanada de humo que inunda la sala. Para el gusto del viejo Sandaime Hokage, habían tardado en hacer la reunión. Sabía que cuando formará ese nuevo equipo con esas dos personas, armaría un gran revuelo, sobre todo por haberlo ocultado al consejo, aunque no tenis alternativa. Si quería mantenerlos a salvo, debería ocultarlos.

Danzou:además, has puesto a esa joven inútil, Mitarashi Anko, como su sensei. ¿Como esperas que el Jinchuriki se convierta en un arma, si está en manos de gente inepta? Ese chico, tras los exámenes chuunin, deberá pasar a formar parte de Raíz, así como el otro Uzumaki y la Uchiha será una de las prometidas del último Uchiha varón.

Todos y cada uno de los civiles asintió. Hiruzen sabía que estaba de manos atadas y, ¿que era lo que podía hacer? Si se sometía a votación, el lado civil contaba con más poder y podía hacer cambiar de idea a alguien de un clan menor y así ganar la votación. Solo le quedaba una salida, pero solo dos personas podrían ayudarlo, además de que para poder llevarse acabo su gran plan, necesitaba que Naruto hiciera una buena actuación en las finales junto a su compañero.

Debía reunir todo rápidamente.

Con Naruto

A pesar de poseer una gran cantidad de chakra; de haber desbloqueado sus genes Uzumaki y de tener un Kekkei Genkai, su pelea con Uchiha Akeno, la genin más fuerte de la generación, le estaba resultando larga y entretenida.

Los dos se lanzaban jutsus, usaban su taijutsu y kenjutsu, pero el Sharingan de tres tomoes, era lo que le daba la diferencia a Akeno, que podía ver cada uno de los movimientos de su amigo, compañero y...chico soñado.

Si, Uchiha Akeno sentía algo por el Uzumaki y cada vez le costaba más mantenerse indiferente ante el chico que estaba frente a ella.

Los dos se separan, jadeando. A pesar de que la chica no poseía la misma resistencia que el Uzumaki, le había estado siguiendo el ritmo en todo el tiempo, aunque ahora los dos estaban agotados.

Akeno hace una serie de sellos, y lanza una llamarada que se convierte en un fénix y va directo hacia el chico.

El semi pelirrojo, cierra los ojos presa de un dolor en estos y los vuelve a abrir. No sabe como, pero el jutsu se desvanece y la chica sale disparada hacia atrás, cayendo al suelo.

Naruto sale corriendo y se pone de rodillas a su lado, preocupado.

Naruto:Akeno-chan, ¿estas bien?

La chica abre los ojos, y se queda de piedra al ver los ojo del joven.

Akeno:Rinnegan–susurra, antes de caer en el mundo de la inconsciencia.

☠️☠️☠️☠️☠️☠️☠️☠️☠️☠️☠️☠️☠️☠️
Hasta aquí este hermoso capítulo. Hay LOVE en el aire mis amigos. A saber que tramara el Sandaime. ¿Vosotros que creéis que hará?

Nos vemos en el próximo capítulo 😊 ttebayo 😄

Uzumaki Naruto: El Jinchuriki PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora