Amelia
Admito que a veces tengo uno de esos impulsos de confianza, que me llevan a situaciones interesantes. Mi padre siempre dice que cuando hay que lanzarse, no hay que perder el tiempo y solo hacerlo.
Ese es mi voto de confianza.
Empujo a Carter contra la pared y lo provoco. Él se muerde el labio inferior cuando le digo.
―Admítelo Carter, te mueres por besarme.
―No me tientes ―Se relame los labios.
Pestañeo de forma coqueta.
―No lo hago... ―expreso de manera seductora y me acerco a sus labios ―digo la verdad ¿No lo crees?
Me gira y ahora soy yo la que está contra la pared.
―Sí, me muero por besarte ―susurra en mi oído ―y hacerte un montón de cosas pervertidas.
Creo que se me subieron los calores, siento mis mejillas arder y comienzo a pensar que la seducida fui yo.
―Carter...
Sonríe con tristeza.
―Pero no tienes mi voto de confianza ―Se aleja y suspiro.
―¿Acaso tengo alguna posibilidad de oportunidad? ―le pregunto al mirar su espalda mientras se retira y se detiene.
Se gira a observarme, abre la boca para responder, pero es interrumpido. Una enfermera viene corriendo.
―¡Rápido, es una emergencia! ―grita la mujer y quedamos confundidos.
¿Qué sucede? ¿Quién nos busca? No somos médicos ¿Qué podríamos hacer nosotros?
CZYTASZ
El abogado turbio (R#5)
RomansCarter Elek, mujeriego, mala persona, sin corazón, no cree en el amor y su única virtud, ser el mejor abogado del país. Mi abogado. [Por culpa de un Ricoy #5] *Por Viviana Valeria V.
