El abogado turbio (R#5)

59. Adulto estafador

Carter

Adultez...

Miro la copia del documento, el original está llegando a destino, voy a estafar a mi padres, los voy a dejar sin un peso.

El final de mi venganza estará completo.

Llego a casa, Crista me sonríe y me acerco hasta ella. Le toco el vientre y la sensación de paternidad se apodera de mí. Una alegría inimaginable.

Nuestra relación es algo extraña. Ella sigue con su obsesión, las infidelidades por parte de ambos continúan, aunque desde la llegada del embarazo, nos hemos calmado un poco.

―Marian Katerina Elek ¿Cómo suena? ―dice la rubia feliz.

―Creí que le pondrías Katerina primero. Digo, tú elegiste ese nombre ―opino.

―Lo que tú elijas siempre será lo mejor ―acota enamorada.

Bienvenida obsesión. Creo que me titila el ojo. Retrocedo.

―Por favor, solo un día, no puedes olvidarte que quieres expresarme tu amor ―ruego, suplico, ya no sé.

Frunce el ceño.

―Amargado ―Se va enojada caminando a la cocina.

Al menos no me tiró algo en la cabeza.

Recibo un mensaje en mi celular y sonrío cuando me confirman, que mi padre ha firmado el documento. Lo he estafado, adiós dinero de mis progenitores, ahora pobretones. Sufran las consecuencias de sus actos.

―¡¡Carter!! ―oigo el grito de Crista, se nota asustada, así que voy a su encuentro rápidamente.

Al correr a la cocina, veo mucha sangre, la cual mancha sus piernas hasta llegar al suelo. Actúo rápido, llamo a la ambulancia, pero no fue suficiente para salvar la vida de mi hija.

Fue demasiado tarde.

Actualidad...

Abro los ojos, despierto agitado. Toco mi cara rápido, saco las lágrimas que se habían escapado mientras estaba dormido. Me levanto de la cama y voy hasta la cajita. La abro, observo detenidamente los mocasines y suspiro.

―Los sueños son aterradores.