My Sweet Prince [Namjin// Yoonmin// Vhope]©

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-Hyung... -Hoseok apretó los labios, cruzándose de brazos-. ¿Podemos hablar?

-¿No estábamos haciendo eso?

-Hablo en serio. ¿Podemos hablar de verdad?

-Ya, suéltalo.

-¿Por qué sigues haciéndolo? -inquirió, y Yoongi rodó los ojos mientras salía de la cocina. Sin embargo, el menor lo siguió pisándole los talones-. ¿No puedes dejarlo ya?

-¿Dejarlo?

-Conseguir un trabajo decente, Yoongi. Sabes de qué hablo.

-No, no puedo -Yoongi se sentó en el sofá y Hoseok se sentó a su lado, frunciendo el entrecejo.

-¿Por qué no?

-Porque una vez que entras no sales, Hobi -soltó con una exhalación de cansancio, viendo que el otro muchacho comenzaba a sacudir la cabeza con desesperación.

-¡Eso no es posible! Seguramente si hablas...

-Esos tipos no escuchan. Yo sólo me metí en este... mundo, y ahora simplemente deberé dedicarme a ésto por el rest...

-¡¡¡Ni siquiera te atrevas a decir semejante estupidez!!! -Hoseok lo miró serio, tan serio que el mayor apretó los dientes con fuerza-. Podemos avisar a la policía, y...

-¿Y decirles que trabajo para ellos? -se rió-. Hobi, estos tipos son la policía -Hoseok no comprendía-. Es una mafia, no hay tipos malos y buenos. Algunos de ellos tienen familia, otros son policías, otros incluso médicos; ¿estás seguro de que quieres seguir hablando de ésto?

-Quiero que salga de eso -los ojos del menor se bañaron en lágrimas y Yoongi tuvo que apartar la mirada, porque aquello... le rompía el corazón-. Quiero que vuelvas a ser el hyung genial que eras antes de toda esta mierda. Quiero que puedas tener una vida mejor que ésto, ¿sí lo entiendes?

-Lo siento, en serio. Hago lo que puedo.

-¡Sé que sí! Pero... P-pero...

-Ya no hablemos de ésto, yo...

-Ese tipo, Kan... No es... Es...

-Hoseok, ya basta.

-... He visto que...

-Hoseok -sentenció Yoongi con voz dura.

El menor agachó la mirada y asintió con la cabeza, levantando una mano para enjugarse una lágrima. Yoongi entreabrió los labios, estirando una mano para tocar su cabeza, pero inmediatamente dejó caer la mano sobre el respaldo del sillón y cerró la boca. ¿Qué iba a decir? ¿Qué iba a hacer? Era un imbécil y, aunque le doliera, sabía como terminaban las cosas.

Lo sabía y no pensaba decirlo en voz alta.

No era lo que su dongaseng quería escuchar.

-Todo va a estar bien -murmuró, más para sí mismo.

Hoseok levantó la vista y volvió a asentir, más lágrimas silenciosas cayendo de sus ojos.

-Te quiero mucho, hyung -murmuró, sonriendo con labios temblorosos.

Yoongi casi sintió que eso era una despedida, y sintió una punzada de dolor en el pecho. Sonrió y le sacudió el cabello a Hoseok, como hacía años que no hacía, logrando que el menor se riera.

-También te quiero mucho, HobiHobi.

La expresión de Hoseok se contorsionó en una muca de angustia y comenzó a llorar demasiado, poniéndose de pie rápidamente y caminando hacia la cocina para que Yoongi no pudiera verlo.