La Princesita de Papá.

Epílogo

Soy Liam Johnson, y ya no tengo diecisiete años, tengo veintiséis.

No soy ningún deportista famoso y tampoco ningún genio de los videojuegos. Más bien, estoy trabajando muy duro para montar mi propia empresa de publicidad.

Brenda...despertó del coma hace algunos meses, pero sufrió muy serias consecuencias en su cuerpo, con decir que su cuerpo se volvió su propia cárcel. Perdió casi por completo la movilidad de su cuerpo.

Sigo al lado de una mujer maravillosa, mi amada esposa Julia, la madre de mis hijos y la mujer de mi vida.

Mis hijos, mis tesoros. Abby ya cumplió diez, Louis y Leo ya tienen ocho. Abby ya superó todo lo ocurrido, es muy fuerte y ella y Julia son muy unidas. Los gemelos se parecen mucho a July, pero mi familia dice que van teniendo mi carácter.

Jason y Vanessa ya se casaron y tienen un bebé hermoso de seis meses, su nombre es Kevin Bridges Williams. Se les ve realmente felices a ellos juntos.

Mi hermana y Gonzalo se volvieron a estrenar como padres, tengo una sobrinita preciosa de sólo tres meses de edad, Hillary Mendoza Johnson. Y mi sobrino, Thomas o Tommy, como le llamamos de cariño, está cumpliendo cuatro añitos el día de hoy.

Estamos festejando su cumpleaños en casa de mis padres y todos estamos aquí, hasta mi suegro se unió a la fiesta.

Ver está casa llena de risas y alegría, es lo mejor que pueda ver.

-¿Eres feliz, hermano?- Me pregunta mi amigo. Se acerca a mi lado y observa a mi hermana, la forma en qué abraza a Tommy.

-Mucho.- Le respondo sincero.

-¿Te arrepientes de algo?- Analizo por unos minutos su pregunta y me doy cuenta de que cada suceso en mi vida me ha traído hasta donde estoy hoy.

-No, todo lo que he vivído y pasado, me han hecho el hombre que soy hoy.

-¡Qué profundo, cuñado! Pero tienes razón, aunque el mayor sigo siendo yo.- Bromea y me palmea en la espalda. -¡Vamos, yo quiero pastel!

-¡Hola, guapo!- Se me acerca July y me besa en la mejilla.

-¿¡Quién eres tú, chica hermosa?!- La beso en los labios.

-Tú esposa, bombón.- Los dos reímos y algo llama mi atención. Abby está hablando por celular y parece muy contenta, ríe y se enriza sus colochos con sus dedos. Mi instinto de padre empieza a sospechar.

-¿Con quién habla?- Le pregunto a July.

-Con un amigo de la escuela, un tal Henry.

-¿Henry? ¿Acaso conocemos a ese Henry?

-Va en su mismo grupo, se llevan bien.- Supongo que mi cara debe estar hablando por mí y Julia ríe. -Quita esa cara, cariño. Abby está creciendo y no puedes evitar que tenga amigos.- July me besa y Abby nos ve, ella nos sonríe y se va al trampolín con sus hermanos.

-Abby se convertirá en preadolescente pronto.- Me toma Julia de la mano. -¿Estás listo para eso, amor?

-¡Sí!

-¿Porqué tan seguro?- Me mira sonriente.

-¡Por que te tengo a ti, y ahora, vamos por pastel antes de que Gonzalo se lo acabe!

Fin