Él me mira con compasión por un momento.
-No me mires así, es una posibilidad. Quiero saber en que posición me encuentro o encontraré en tu vida.
Jared-No lo se.
Suspiro cansada. Es increíble como las cosas pasan de 10 a 1 en cuestión de segundos.
-¿Me quieres?
Él abre para responder, pero lo interrumpo.
-Déjame adivinar. No lo sabes.
Jared-Sofi, mírame.
-No puedo.
Jared-Sí puedes. Te lo estoy pidiendo.
Mis ojos se cruzan con los suyos directamente. Se me erizan los bellos de todo el cuerpo.
Jared-Hay muchas preguntas que no puedo responderte aun. Entiende que todo esto pasó muy rápido. Tu hasta ayer eras mi amiga, ahora no se que eres.
-¿Y porqué debe depender de ti?
Comienza a gestarse en mi ser un resentimiento hacia la idea de que tenga que ser él el que decida que debemos ser de ahora en más. Siempre fui yo la que puso los rótulos.
-Porque la que dio el primer paso fuiste tu.
Muerdo mis uñas, nerviosa. Él toma mis manos con un gesto enormemente tierno. Las besa.
Jared-Se que ahora te cuesta entenderlo, pero también se que sabes que tengo razón. Tu viniste aquí decidida en lo que sentías y lo que ibas a hacer.
Sonrío cuando me doy cuenta lo loca que estoy.
Jared-Mientras yo, estaba en mi casa tranquilo, viniste tu y diste vuelta mi vida. Ahora debes entender si tengo que tomarme un tiempo para pensar.
-No te esperaré si te tardas mucho.
Él sopla mi nariz, lo que me hace cerrar los ojos.
-¿Qué haces?
Jared-Esto es para que no me olvides.
-¿Puedo hacer lo mismo?
Jared-Tu ya has hecho bastante.
Nos abrazamos, y quedamos así un rato hasta que llegó la hora de despedirnos.
El me besó como ayer, y salí levitando sobre nubes hacia mi casa.
Tengo que contarle todo a Sara. Le envío un mensaje.
-Eres lo mejor que me pasó! Luego te cuento. Te adoro te adoro. Sofi
Su respuesta fue inmediata.
Sara-Pasa por mi casa luego del trabajo. Me contarás TODO. Ah, y de nada :)
Por la tarde paso directamente a la casa de mi amiga. Ella todavía no ha llegado pero ha dejado la puerta abierta para que entre.
Al pasar, su enorme pitbull casi me tira al suelo. Esta vez no ensucia mi ropa.
-Tu sí que eres terrible.
Él se contenta con mis caricias y se marcha luego de un rato.
Comienzo a husmear para pasar el tiempo. Sara tiene fotografías muy bonitas, dignas de una modelo. Hay más fotos de ella con sus amigos, su familia.
Me acerco hacia su computador para pasar el rato, cuando oigo el sonido de la puerta.
Sara me atropella antes de que pueda decir "hola".
Sara-No hay tiempo que perder. CUENTA.
Comencé a contarle todo lo ocurrido, desde que llegué hasta que me fui.
Sara-No pensé que tomarías mi consejo tan a pecho, pero te ha ido bien con el.
-Eso no tiene discusión.
Sara- ¿Y ahora qué?
-Tendré que esperar.
Ella parece preocupada de repente.
-¿Qué pasa?
Sara-Nada... Solo que...
Ella toma mi mano.
Sara-No quiero que te lastime. No quiero que te haya hecho sentir que te quería para luego arrepentirse y dejarte así.
-Él no es así.
Sara-No sabes, no lo conoces.
-¿Qué pasa contigo?
Se aleja un poco de mi.
Sara-Tu te has enamorado de el, eso no es un juego. Si el decide que quiere seguir esperando a Bella ¿Tu qué harás?.
- ¡¿Y porqué no me dijiste todo esto ayer?!
Sara-¡No fue mi culpa! ¡Qué iba a saber yo que te aparecerías en su casa y harían el amor!
Hace un gesto para calmarse.
Sara-Calma. No pasa nada. Él decidirá bien. Ignórame.
-Siempre lo hago.
Comenzamos a reir. Cuando estábamos por comer, llega un mensaje de Jared.
Jared-Nos vemos el sábado. Ya te extraño.J
Doy un pequeño salto mientras le muestro el mensaje a Sara.
Sara-Supongo que no quiere verte para hablar.
Comenzamos a reír nuevamente.
Terminamos de comer, abrazo a mi amiga y me voy a casa. De camino, me pareció ver a Ciro de lejos.
Este desencuentro me hace pensar que todavía no se que haré con el. Si voy a empezar una relación seria ya no puedo verlo. ¿Cómo haré para ignorarlo? Caigo que el mismo día que tengo la cita con Jared, es la obra de teatro con Ciro. Definitivamente ya se a cual iré, pero no se como se lo diré a él.
Escapé triunfal de tener que verlo. Si tengo la suerte suficiente, el quizás no me haya visto.
Me pasé la semana pensando en que ponerme para la gran cita, y en como decirle a Ciro que lo nuestro ya no puede ser. Lo mejor será llamarlo, cuanto antes posible.
Es sábado y todavía no le he dicho nada. No tuve coraje, pero debo hacerlo.
Tomo mi móvil con miedo.
-Hola Ciro, no podré ir hoy. Lo lamento. Surgió trabajo y no puedo dejarlo sin hacer. Besos.
No ha respondido aun. Es mejor si se enfada y ya no quiere verme más. Será mejor para él y para mi.
Tiro todo mi guardarropas al suelo, buscando algo que pueda ponerme. No se como ir vestida, Jared no me dijo a donde iríamos. En mi desesperación por encontrar algo adecuado, aparece aquel vestido negro de mi noche fallida con él. Quizás pueda darle revancha. Voy a ducharme mientras escucho las noticias.
Para mi sorpresa, está dando mi serie favorita. Es una buena señal.
Comienzo a pintar mis uñas de un rojo vino. Esto me recuerda que debo preguntarle a Jared cuál es su color favorito.
Me siento como una adolescente. Hace mucho no tengo una cita con alguien que me importe realmente.
Comienzo a generar una serie de preguntas que puedo hacerle para conocerlo mejor. Me gustaría saber más sobre su familia. Tiene el aspecto de ser de esos chicos que aman las familias grandes. Aunque si nos guiamos por su aspecto, lo que sucedió hace un par de días en su casa debió haber pasado hace mucho.
Cuando estoy a punto de salir, olvido que no me perfumé. Lo hago, le doy un beso a Mike, y cuando estoy por salir alguien toca la puerta.
Es Ciro.
