Capítulo 19

193 35 24
                                    

Poso una mano en mi boca.

—Sara, Sara, debemos reponernos.

— ¿Por qué? ¿Quién es a esta hora?

—¡Es Jared!

— ¡¿Qué?!
Ella mira por la hendija de la puerta.

— ¡Mierda, lo he olvidado! Me dijo que pasaría porque necesitaba hablar. Escóndete, no puede verte.

— No estoy muy seg...

Antes de que pueda decidir, Sara está empujándome para que me oculte detrás de una pared.

— Sara, ¿estás ahí?

— ¡Si! ¡Voy!

Mi corazón late con fuerza.
Ellos se saludan con un abrazo. Él parece muy triste.

— Necesito hablar contigo. No puedo hablar con Sofi.

— ¿Por qué?

— Por Bella.

— Ella está manipulándote.

Se sientan en el sofá, él posa sus manos en su cabeza y las mueve de un lado a otro. Esta inquieto.
Me doy cuenta de que no hemos quitado las botellas del suelo.

— ¿Estuviste bebiendo?

— Sí, tuve una visita masculina recién y nos divertimos un poco.
Jared hace una risa de ocasión. Me gustaría saber qué le pasa.

— Dime que pasa.

— Bella no quiere verme más. No se que hacer para tenerla devuelta. Hace unos minutos hablamos por teléfono y dijo que solo aceptaría verme para hablar si acordaba no volver a ver a Sofi.

Puse una mano en mi pecho mientas cerraba los ojos. ¿Qué haré si no puedo verlo más?

— ¿Cómo es eso? ¿Ahora ella tiene derecho a decirte a quién ves y a quién no?

Ahí va la Sara enojada.

— Entiéndela. Me ha visto besándome con una amiga, debe ser difícil para ella. Al mismo tiempo no puedo dejar de ver a Sofi porque ella me lo pide, no es justo. Las cosas no funcionan así.

— Si tú se lo permites siempre funcionarán así.

— Tú no entiendes. Ella esta segura de que Sofi siente cosas por mí. Teme que me escape con ella y la lastime. Yo jamás haría eso con nadie. Solo quiero verla feliz.

Mi amiga me lanza una mirada rápida. Entendí ese gesto como un "debes decirle que te gusta", pero eso nunca pasará. Ni en mis mejores sueños.

— ¿Y qué pasaría si Sofi realmente sintiera algo por ti?

Estoy a punto de saltar de mi escondite para golpear en la cabeza a Sara.

— ¿Qué estás diciendo? Ella es mi amiga. Nunca la vería como algo más.

— No seas hipócrita. Según tengo entendido, Bella era tu mejor amiga antes de que sean pareja.

— Si, pero es diferente. Además no se porqué me sales con esto. Con So nunca pasó nada.

Los dos quedan en silencio.
Jared — Además ella no siente nada realmente... ¿O sí?

— Solo preguntaba. Ni yo ni tú sabemos que pasa por la cabeza de Sofi.

— ¿Qué insinúas?

— Nada. Pero deberías tener cuidado de no lastimar a nadie, sea cual sea tu decisión.

— He venido a que me ayudes pero me has dejado más confundido.

— Vas a tener que elegir.

— No puedo hacerlo.

Cuando Sara estaba por decir algo, me moví bruscamente y una botella cayó al suelo.

— ¿Escuchaste algo?

— No, para nada.

Jared mira un segundo en mi dirección pero esta muy desganado para levantarse a revisar.

— Bien, me voy. Tengo que pensar mucho.
— No tienes que pensar mucho. No es tan difícil señor punk. Si ella realmente te ama volverá con Sofi o sin Sofi de por medio.
— Te mantendré al tanto. Gracias por todo.
— La doctora corazón a tus servicios.

Los dos se levantan. Ella cierra la puerta. Mi tortura no ha terminado, O por lo menos eso pensaba.

— No es posible que un tipo así no se dé cuenta de nada.

— Vamos a dormir. Estoy cansada.

Nos recostamos. Por fin termina esta noche.
Por la mañana, la alarma de mi móvil me saca de los dulces sueños. Sara duerme como una estatua así que me preparo sigilosamente para irme. Cuando reviso mi teléfono con detenimiento, Jared me ha escrito.

— ¡Hola linda! He estado muy ocupado para escribirte. Necesito que me hagas un favor :)

El idiota ni se imagina que se todo lo que pasa por su mente. Esto es un arma de doble filo.

—¡Hola bonito! ¿Qué tal todo? Estoy muy ocupada. Besos. Sofi.

Comienzo a extrañar la semana en la que no tuve noticias de él ni de sus dramas.
La respuesta llega enseguida.

— No acepto un no como respuesta. ¡Te necesito!
Tardo en responder intencionalmente, pero me llega otro mensaje.

— Por favor.

No pude resistir por completo a sus encantos y acepté. Acordamos vernos en su estudio fotográfico hoy por la noche.

Decidí ponerme lo más guapa que pude para la ocasión. Tengo que sorprenderlo.
Se que le gustan los vestidos, así que me puse un vestido negro con espalda abierta. Deja ver mucha pierna, pero no tiene escote. Es sofisticado. Zapatos stilettos, boca rojo carmín y ojos ahumados. Esta noche quiero verme increíble.
Antes de salir, me miro al espejo. Mi aspecto me recuerda a una vez antes de mudarme... A aquellos días... Esos días...Lágrimas caen por mis ojos. Me encuentro parada frente al espejo, con los brazos a los lados, inmóvil. Miro mi asqueroso aspecto. Soy una basura. Jamás seré feliz, jamás habrá amor para mí... Jamás podré olvidar... Al verme, cada vez me odio más. No puedo salir... No puedo... Golpeo el maldito objeto que refleja lo que no quiero ver. Se ha partido, se ha roto. Sigo mirándome. Ahora me veo realmente como soy. Estoy rota, total y completamente rota por dentro, y ahora, por fuera. Siento un dolor en la mano, estoy herida.
La sangre me regresa a la realidad. Seco mis lágrimas, tengo que salir de aquí.
Limpio la sangre que cae sin parar en el baño. Ha sido una pequeña lastimadura. Nada que el maquillaje no pueda tapar.
Cuando llego al estudio, ahí esta mi amor.

Jared me observa estupefacto.

— Estas increíble. ¿A quién verás después de mí?

— A nadie.

Mi respuesta es seca. No tengo ganas de fingir ni de ocultar. No debería haber venido así.
Él se aclara la garganta. Abre la boca para hablar, pero lo interrumpo.

— ¿Qué favor necesitabas?
Él sonríe.

— Debo entregar mañana mismo unas fotografías a la agencia, y la chica que había contratado para el trabajo no ha podido venir. ¿Te molestaría ser mi modelo por hoy?

Amor DescartableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora