Capítulo 22

242 37 35
                                    

  Quedo paralizada. Llegué a un punto de cinismo en el que ni yo me reconozco.

-Yo..

Ciro coloca el dedo pulgar en sus labios, me observa de lado. Luego se cruza de manos, como esperando a ver que excusa tengo para decirle.
-Lo he olvidado.

Susurré triste.
Él frunce el ceño. Ha cambiado enormemente de aquella vez en el acuario. Antes ocultaba muchas cosas de mi que le molestaban, ahora lo sigue haciendo pero pareciera que ya no puede consigo mismo. O conmigo.
Su actitud se ha vuelto menos tolerante, mas pensante, mas paciente. ¿Porqué estoy haciéndole esto?

Ciro-¿Siempre eres así?

Cierro los ojos, esperando que me diga lo peor. Sería genial si pudiera hacerlo alguna vez.
-Así ¿Cómo?

Ciro-Así.
Acaricia mi mejilla.

-No entiendo lo que dices. Me siento de lo peor.

Ciro-Lo eres.

Por fin lanzó hacia mi algo de dolor. Cuando al fin estaba por contentarme, noto que comienza a formarse una sonrisa en su rostro.

Ciro-Estoy jugando. Nunca podría enojarme contigo.

-Por favor, tienes que enfadarte. He olvidado tu cumpleaños. Yo me enojaría contigo si lo hicieras.
Niega con la cabeza sin perder la sonrisa.
Ciro-No mientas.
-No lo hago. Extraño tu presencia cuando no estás.
Espero que pueda entender que dije "su presencia" y no que lo extraño a él.
Se para de repente.

Ciro-Vámonos.

Cuando caminamos, no se si tomarlo de la mano. Mientras pensaba, noté que estoy un poco más atrás de él. Aprovecho la ocasión para tomar impulso y me cuelgo de su espalda con un abrazo.
Parece que es la primera vez que una mujer se comporta así con el, porque parece atónito.
Ciro-¿Qué haces?

-Estoy jugando. Súbeme.
Él empieza a reír como nunca lo había visto.
- ¡¿Qué es lo que te hace tanta gracia?!
Ciro-Eres tu. Eres impredecible.

Deposita un beso en mi frente, y me abraza con sus enormes brazos.
Se le ha alborotado un poco el cabello.

-Quédate quieto.
Ciro-Lo que quieras.

Cuando comienzo a acomodárselo, percibo su mirada de frente. Siento esa mirada como aquella vez. Me gustaría repetirla.
-Listo.
Ciro- Oh, quédate así un poco más.
Este gesto me llena de dulzura. Podría acomodarle lo que quiera todo el día.
Tomo su nuca y le doy un beso lento. Cuanto extrañaba esta boca. Estos labios que son míos, sin serlo.
Me acerco a su oído, alejando su boca rápidamente de la mía.

-Feliz cumpleaños Ciro.
Ciro-Tu eres el mejor regalo atrasado que alguien pudo haberme dado jamás.
-No digas eso.
Ciro-¿Porqué?
-Tu sabes porqué.

Lo noto reflexionar un segundo.
-¿Quieres venir a mi casa?
Sonríe, pero esta vez no es una sonrisa de las suyas. Es de resignación.
Ciro-Seguro.
Llegamos.Sexo.Me levanto antes que él. Desayuno.
Como siempre, esto se está transformando en una costumbre. Mientras lo observo dormir, miro en Internet que puedo comprarle de regalo. Presiento que le gustan los relojes.
Todavía es temprano, él no parece querer despertar, así que tomo mi bolso y me dirijo rápidamente hacia el centro comercial. Compro el reloj más bonito que vi. Camino a casa reconozco una cabellera familiar.
Sara- ¡Hey!

-Hola amiga.
Sara-Y eso, ¿Para quién es?
Levanta una ceja divertida. Yo por mi parte opto por esquivar la pregunta.
-La pregunta es ¿Qué haces tu aquí?

-Estaba aburrida. Pensé en invitarte a venir de compras pero tu última conexión me dio indicios de que no darías señales de vida hasta más tarde así que opté por venir sola.
Yo quedo en silencio. Algún día tendré que decirle lo de Ciro.

Sara-¿Sabes algo de Jared? Se esta comportando extraño.

-Dímelo a mi.
Ella abre la boca.

Sara- ¡¿Qué pasó?!
-No lo se Sara, no se que mierda quiere.

Ella posa una mano en mi hombro.
Sara- ¡Me harté! Voy a tomar cartas en el asunto.
-¿Qué vas a hacer?

Sara-Alguien tiene que decirle lo que debe oír.
No estoy muy segura de lo que Sara intentará hacer, pero no pierdo nada con intentar.
-Debo irme.
Sara-Yo también. Te mantengo al tanto.
Al llegar al departamento, el portero viene corriendo en mi dirección. Parece agitado.
Max- ¡Sofi! ¡Sofi!
- ¡¿Qué sucede Max?!
Max-Un hombre quiso hacerte la entrega de un paquete personalmente. Le dije que no podía pasar sin autorización. En realidad podría haberlo dejado pasar, pero él parecía realmente sospechoso.
-¿Qué quieres decir?
Max-No lo se, me dio un mal presentimiento. Estaba nervioso. No quiso decir su nombre. Quería pasar como sea a tu apartamento.
-Me da miedo. Por favor si vuelve a pasar llámame.
Max- ¡A tus órdenes!

Estas noticias me dejan asustada. Por suerte tengo a un guapo hombre esperándome para consolarme. Cuando abro la puerta él ya está despierto en ropa interior. Está concentrado viendo una serie en la tv, casi no nota mi presencia.
- ¡Sorpresa!
Se exalta con tanta gracia que no puedo evitar reír.

Ciro-Eres una niña.
-Déja de quejarte. Ábrelo.
Cuando le acerco el regalo, su rostro se ilumina tremendamente.
Ciro-Me encantas, ¿Lo sabes, no?

Inmediatamente me siento en su regazo. Coloco mis piernas, una a cada lado de las suyas. Lo devoro con la mirada. El acaricia mis pechos, yo me dejo llevar. De repente siento que se aleja.
Ciro-Tengo que irme.

-¿Y me dejas así?

El sonríe.
Ciro-Me has dejado de peores maneras.
Se vistió y se fue. Así sin más. Me decido a enviarle un mensaje a Sara.
-¿Hablaste con Jared?
Mientras me preparo para ir a trabajar, llega un mail.

"Ayer te me escapaste de las manos, pero pronto dejarás todo listo para mi.
Mires por donde mires, nunca estás sola. Siempre estoy observándote.
Se todo de ti. Tu pasado, tu presente, tu futuro.
Gracias por seguir haciendo de tu vida un reality show. Estoy divirtiéndome mucho contigo. Sigue así. Sigue errando. Hazlo, es lo mejor que sabes hacer.

Mira detrás de ti."

Antes de que pueda reflexionar, llamada de Sara.

Sara-Lo hice. Te gusta un hombre demasiado complicado amiga. Llámalo si él no lo hace. Toma las riendas por él.
-No puedo hacerlo.
Sara-Entonces nunca lo tendrás.
-Pero..¿Y Bella?

Sara-No ha querido hablar de ella.
Mi corazón se llena de alegría y de preguntas a la vez.
-Me gustaría saber en que piensa.
Sara-Enamóralo.
-Lo dices como si fuera sencillo.
Sara-Lo es. Si no te arriesgas no lo lograrás.
- ¡Sara, el amor no es tan sencillo!
Sara- ¡Lo es! ¡Son las personas lo que las complican todo! ¿Quieres amar? Pues ¡Ama! ¿Quieres llorar? ¡Pues bebe! Pero nunca, ¡Nunca! Impidas que nada te deje hacer lo que sientes.
Sonrío detrás de la línea.
-Te adoro.
Sara-Y yo a ti.

Amor DescartableUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum