Capítulo 21

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Narra Danielle:

-De la que me has salvado- dije cuando ya había cerrado la puerta.

- ¿Qué sucedió con Diego? - preguntó Summer.

-Se ha ido- dije, ella hizo silencio como señal para que continuara- Casi nos besamos- dije dejándome caer en el sofá.

- ¡¿Qué?!- exclamó sorprendida.

-Summer, yo iba a permitir que sucediera, quería besarlo- dije desesperada.

-Danielle, tranquila- dijo tratando de calmarme.

- ¡Somos amigos! - dije.

- ¿Qué tiene eso? - dijo restándole importancia.

-Seria incomodo- ya era incomodo, pero es más fácil como si nada ocurrió cuando realmente nada ocurrió.

-Y si sientes algo por él, algo más que amistad- añadió.

-Summer...- me interrumpió.

-Solo digo- dijo, podía imaginarme la sonrisa que seguro tenía pintada en el rostro. Quizás mis sentimientos hacia Diego han cambiado, tanto como él ha cambiado su actitud conmigo.

Él también quería besarme, o al menos eso creo. El espero a que le diera el permiso de besarme, él fue respetuoso.

- ¿Danielle? - la voz de Summer me sacó de mis pensamientos.

-No sé qué me sucede- dije rindiéndome.

-Danielle, cálmate. Tienes que pensar, buscar la forma de aclarar tus sentimientos, descubrir lo que en realidad sientes por él.

***

Domingo, domingo; como amo los domingos. Iba conduciendo el auto de mi madre, o pensaba caminar hasta el café con el frío que hace y eso que todavía no llegaba invierno.

Hoy me encontraba de muy buen humor, a pesar de que no pude dormir anoche pensando en lo que pasó con Diego. Entre tanto pensar y pensar en mis sentimientos por él, llegue a la conclusión de que la mejor forma para saber si en realidad siento algo más que amistad hacia él es besándolo. Si, besándolo. Si en realidad me gusta sé que habrá una sensación extraña en mí, algo diferente; y si no, solo será un beso, solo eso.

Creo que debo alejarme de la sección de romance de la biblioteca por un tiempo.

El sonido de mi celular me saco de mis pensamientos. Hablando del rey de Roma. El nombre de Diego brillaba en la pantalla. Conteste la llamada aprovechando le luz roja del semáforo.

-Hola, Axel- dije riendo.

-Hola- dijo con falta de aire, podía oír la voz cantarina de Cassie en el fondo. –Voy a ser breve ya que Cassie está demasiado inquieta.

-Ya dile- oí la voz de Cassie.

-Cassie quiere saber si te gustaría venir con nosotros al parque de atracciones esta tarde- dijo Diego de forma rápida.

-Claro- dije.

-Gracias- dijo aliviado- Ha aceptado, ¿puedes calmarte? - Dijo hablando con Cassie. Luego de eso escuche unos cuantos murmullos de parte de Cassie y algo romperse.

- ¿Está todo bien? - pregunte.

-Algo así, ¿entonces a las 3? - dijo con tono cansado, al parecer Cassie estaba realmente inquieta.

-Si- dicho esto nos despedimos y colgué. Justo en ese momento el semáforo dio luz verde.

***

La tarde ha pasado extremadamente rápido. Con Cassie y Diego, subimos a cada una de las atracciones del parque dos veces. La estaba pasando genial, la estábamos pasando genial. Pero todo tiene un fin, ya se estaba haciendo tarde.

El silencio inundaba el auto, ya que Cassie dormía en el asiento trasero; pero no era un silencio incómodo.

Sin darme cuenta, Diego ya había aparcado frente a mi casa. Nos quedamos mirándonos un momento, Diego empezó a reír de la nada, su risa era contagiosa ya que yo también empecé a reír, pero al sentir como Cassie se removía tratamos de aguantar las ganas de reír. Nuestras miradas estaban enganchadas, no podía apartar mis ojos de los suyos. Es ahora o nunca, este era el momento, iba a besarlo. Tengo que aclarar mis sentimientos ahora.

Me acerque a su rostro hasta el punto de que podía sentir su respiración, él no se apartó. Al ver mis intenciones se acercó aún más, dejando solo milímetros entre nuestros labios. Entonces fui yo quien unió nuestros labios, y me aparté de inmediato. Salí del auto lo más rápido que pude, quería evitar un momento incómodo.

Cuando entré a mi casa, sentí un revoltijo en el estómago y una chispa en mi interior. Una sonrisa se formó en rostro. Ese simple roce, ese inocente y rápido beso ha aclarado todo. ¿Eso que sentía eran las "mariposas en el estómago"? Diego me gusta. Ahora el problema es quizás el no siente lo mismo por mí.

Narra Diego:

- ¿Entonces ella te beso? - pregunto Ethan sorprendido.

-Si- dije con una sonrisa pícara en mi rostro- No fue un "beso", pero sí.

-Wao, parece que ya se ha enamorado de ti- agregó Ethan sentándose a mi lado.

-Eso parece- dije aun sonriendo- Fue tan tierno, como si ella no supiera qué rayos estaba haciendo- reí. Ella es tan dulce, tan diferente y yo...

-Le vas a romper el corazón- dijo Ethan sacándome de mis pensamientos. A veces me asusta, es como si pudiera leer la mente.

La Chica Invisible©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora