La Chica Invisible©

Capítulo 19

Narra Danielle:

-Iras.

-No iré.

-Si iras.

-No iré.

-He dicho que si iras.

-Y yo he dicho que no.

-Danielle, si iras- Diego y yo llevábamos un buen rato discutiendo si asistiría o no a la hoguera. El no aceptaría un no por respuesta, pero yo no me rendiré tan fácil.

-Diego ya he dicho que no.

- ¿Qué no qué? -dijo Summer sentándose con Ethan frente a nosotros.

-Se niega a asistir a la hoguera- dijo Diego.

-Oh sí que irás- dijo Summer. Diego elevo su mano para chocar los cinco con Summer.

- ¿Mi opinión no cuenta? - me queje.

-Vas a ir, porque si no te prometo que iré a tu casa a secuestrarte y llevarte a las malas- dijo Summer con tono amenazante.

-Danielle, te recomiendo que asistas, tanto tu como yo sabemos que es capaz de eso y más- dijo Ethan, desvié mi mirada hacia Summer y esta estaba asintiendo y sonriendo como una psicópata. - Además no quiero ser su cómplice, tengo una vida por delante y no quiero pasarla en la cárcel- dijo susurrando para que solo yo pudiera escucharlo.

-Entonces vas a asistir a la hoguera- dijo Diego.

-Mi respuesta sigue siendo no- dije- Y si me secuestras voy a decirle a tu madre que fuiste tú quien rompió su jarrón italiano de colección- dije cuando noté que Summer iba a protestar.

-Touché- dijo Ethan, quien recibió una mirada asesina de Summer.

***

Hoy el café había estado repleto hasta hace rato, mi turno había terminado hace más de media hora, pero había decidido quedarme hasta que el ritmo bajara un poco para ayudar a Elise y al Señor C. Recibí un mensaje de Alex, el cual decía: "Mira quien te está esperando", abrí el archivo adjunto y era una foto de Diego apoyado en un árbol fumando.

Marque el número de Summer, quien respondió luego de cuatro tonos.

-Hola Danielle- escuche la voz de mi amiga.

- ¿Ya saliste hacia la hoguera?

-No, ¿Por qué? - preguntó algo confundida.

- ¿Puedes recogerme en el café? - pregunté.

- ¿Asistirás? - pregunto, puedo imaginarme la sonrisa que tiene en estos momentos en su rostro.

-Si- dije.

-Estoy allá en cinco minutos- dijo- Te llevaré a tu casa para que te cambies y luego vamos a la hoguera.

-De acuerdo, te espero- dije para luego colgar.

No sé porque rayos asistiré, pero aun así no me caería mal salir un rato con mis amigos luego de un día tan pesado. Me lo merecía, por una noche seré una adolescente normal. Además, en casa solo me espera un maratón de Grey's Anatomy

Después de un rato Summer llegó. Luego de llevarme a casa para poder cambiarme, fuimos rumbo a la hoguera.

- ¿Qué te ha hecho cambiar de opinión? - dijo sin despegar la mirada de la carretera.

-En realidad, no se- admití.

-Me agrada que vayas- dijo Summer con una ligera sonrisa en su rostro.

Luego de quince minutos y un recorrido por el bosque, Summer aparco en lo que era un estacionamiento improvisado junto al sendero. Cuando bajé del auto sentí el aire frío golpear mi rostro. Summer hizo un ademán para que la siguiera. La música de la hoguera era audible desde donde estábamos y a medida que nos acercábamos el olor a quemado y a alcohol se hacía más fuerte. Me pregunto si esto es legal.

Visualizamos a Ethan y Alex que estaban sentados en el tronco de un árbol caído. Summer salió corriendo hacia donde su novio la esperaba. Alex se dirigía hacia mi sonriente.

-Él está allí, no se ha movido- dijo susurrando y señalando detrás de mí. Volteé y vi a Diego recostado en un árbol con un cigarro entre los labios, tal y como en la foto que me había enviado Alex.

-No estoy aquí por el- dije indiferente.

-Danielle, será nuestro secreto- dijo Alex riendo.

Me dirigí hacia donde estaba Diego. Me detuve cuando estaba detrás del y le quité el cigarro de entre los labios para dejarlo caer y pisarlo para apagarlo.

- ¿Qué mierd...- dijo volteándose, pero al verme se detuvo- Danielle, viniste- dijo cambiando de expresión y levantándome para dar vueltas conmigo. Luego de unos segundos me dejó en el suelo.

- ¿Tan feliz estás de que allá venido? - dije riendo.

-Como no estarlo-dijo pasando su brazo por mis hombros y comenzando a caminar hacia donde estaban Ethan, Summer, Alex y Jake reunidos. Podía sentir mis mejillas arder, su comentario y su cercanía me pusieron nerviosa. ¿Qué me está pasando?

En este momento nos estábamos riendo de Jake al cual el alcohol le había afectado. Todos estaban tomando, pero solo él estaba algo borracho.

-Esa es una de las razones por las que casi no tomo- dijo Diego riendo.

- ¿Casi no tomas? - pregunte mirando el vaso de plástico rojo que tenía en la mano.

-Es soda- dijo- casi no tomo en este tipo de ocasiones porque siempre me toca a mí conducir y no hago el ridículo- dijo riendo.

-De lo que te estás perdiendo- dijo Jake arrastrando un poco las palabras.

-No me pierdo de nada, al contrario, así puedo disfrutar de las estupideces que hacen los pasados de copa- dijo pasando su brazo por mis hombros.

Mire la hora en mi celular, era la 1:30 a.m.

-Rayos, mi madre me va a matar- dije retirando el brazo de Diego de mis hombros.

-Vamos, te llevo- dijo Diego dejando su vaso en el tronco en el que estábamos sentados.

Comenzamos a caminar entre los árboles, hacia demasiado frío y a medida que nos alejábamos de la hoguera la temperatura disminuía. Sentí como Diego colocaba su chaqueta sobre mis hombros y yo me la coloqué. Esta estaba impregnada con su colonia.

-Estabas tiritando- dijo caminando junto a mí.

-Hace demasiado frío- dije abrazándome a mí misma.

-Te queda bien la chaqueta de cuero- dije riendo.

-Luzco como una chica mala- dije también riendo. Sentí el flash de una cámara. - ¿Me has tomado una foto? - dije mientras Diego reía observando la pantalla de su celular.

-Absolutamente- dijo y siguió caminando así que lo seguí.

Diego me llevo a casa y cuando me despedí del este me dio un beso en la mejilla, y como era habitual últimamente me sonrojé. Salí del auto y fui a la puerta de mi hogar. Cuando ya estuve dentro vi como el auto de Diego se alejaba.

¿Qué había cambiado hoy? ¿Por qué me pongo nerviosa con su cercanía? Al parecer los comentarios de Elise y Alex me han afectado o quizás sacaron a la luz los sentimientos que había querido ignorar desde el principio.