Capítulo 12: "La payasa"

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El fin de semana se pasó volando, pero me lo pasé bien, solo el viernes y el sábado y domingo no, porque estuve castigo por las riñas de mis padres y tíos, mi hermano y primo también me han reñido pero todavía no se por qué, solo porque no les dije que que pasaba me debían reñir. Valla hermano y primo que tengo.

Ahora mismo estaba delante de mi armario mirando la ropa que me llevo hoy al instituto y solo me quedan 15 minutos, debía darme prisa. Pero lo único que quería, era que mi madre se calle por una vez por todas. Siempre está 'Jaz, vas a llegar tarde' 'Jaz, date prisa' 'Jaz, ven a desayunar' 'Jaz, todavía no te has puesto la ropa' 'Jaz, levántate' 'Jaz, que solo quedan 5 minutos'. Lo último siempre me lo creo, pero cuando me levanto solo veo que me quedan casi una maldita hora. En serio no se como hacen las madres eso, siempre las creemos. Mamá no paraba de entrar y salir de mi habitación, era muy pesada a veces y yo siempre la tenía que aguantar, podía ir a la habitación de mi hermano.

Te lo voy a decir aunque suene muy raro, tu hermano se levanta más temprano que tú, y cuando tu ya estas despierta lo encontrarás a él esperándote en la puerta.

Es cierto, se me olvidó, y suena muy raro que mi hermano se levante tan temprano, siempre escuché que los chicos son los que más se quedan dormidos, pues mi hermano, no.

Y yo seguía aquí buscando que ropa ponerme, así que cogí unos jeans negros, un camisón color blanco y en el medio pone, I hate the boys en color negro y mis Vans negras. Se que voy vestida muy de negro, pero lo amo, a él y el color blanco, pero a veces también me pongo ropa de otro color.

Cuando salí de mi habitación encontré a mi madre al lado de la puerta de mi habitación.

—Menos mal que saliste. –Dijo ya cansada, yo solo reí y luego bajamos las escaleras para ir a la cocina pero mamá me cogió del brazo, me voltee para verla y ahí estaba ella negando con la cabeza, la miré confundida. —No vas a desayunar.

—¿Por qué? –Pregunté aún más confundida que antes.

—Porque sólo te quedan 8 minutos. –Dijo y yo abrí los ojos como platos.

—¿Y cómo voy a comer? Tengo hambre. –Dije mientras tocaba mi vientre y dibujaba pequeños circulitos.

—Toma, te llevas esto y te lo comes en el camino. –Me dió una manzana y la cogí. Hice una cara de en serio. —Lo siento, pero no hay tiempo y ahora ve, que tu hermano te espera afuera. –Dijo mientras se iba a no se dónde. Gruñí mentalmente y fui de nuevo a mi habitación para coger mis cosas y bajar de nuevo, salí de casa y llegué en el auto de mi hermano.

—¿Por qué tardaste tanto? –Dijo cuando le di mi primer mordisco a mi manzana. Me encogí de hombros y él arrancó su auto. Mientras íbamos de camino al instituto puse música en el auto de mi hermano, elegí una y puse la de Selena Gomez llamada Hit The Lights, se que esa canción es vieja pero me encanta, y amo todas las canción de mi favorita cantante Selena Gomez. Mi hermano me miró con cara de ¿en serio?

—¿Qué? ¿Pasa algo si pongo una canción de Selena Gomez? –Dije inclinando mi cabeza. Me miró por unos segundos y volvió a poner su vista en la carretera.

—No pasa nada... –Dejó la frase al aire y yo entrecerré los ojos. Lo dejé pasar y me encogí de hombros preparándome para cantar.

Hit the lights, let the music move you!
Lose yourself tonight, come alive
Let the moment take you, lose control tonight... –Seguí cantando pero mi hermano me interrumpió.

Idiota.

—Callate, desafinas mucho. –Lo fulminé con la mirada y le sonreí con malicia. —Mierda. –Dijo y empecé a cantar más alto.

She Is ImpossibleTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon