18

4.1K 706 91
                                    

Billie tocó varias veces la puerta, una señora alta salió por ella, la miró extrañada

—Hola, ¿qué deseas? —preguntó, Billie pasó sus manos por sus jeans.

—Estoy buscando a Alan—la señora la miró con una sonrisa.

— ¿Eres su novia?

—No, no, sólo somos amigos—respondió, la señora asintió.

—Claro—respondió—. Pasa, yo lo llamo.

Billie pasó y se sentó en el sofá esperando a Alan quién bajó las escaleras y llegó a la sala un tanto dudoso, no se espera a Billie ahí.

— ¿Billie? —preguntó—.Esto es raro, ¿qué haces aquí? ¿Cómo sabes en dónde vivo?

—Bruno me acompañó y me dejó aquí—respondió—. Necesito tu ayuda, cupido.

Alan sonrió y caminó hacia ella.

—Así que necesitas mi ayuda. Mmm...—dijo—. ¿Sucedió algo con el señor escritor?

— ¿Cómo sabes que es algo con Adam?

—No me llaman cupido por nada—sonrió orgulloso—. Dime, cuéntale a Cupido lo que sucede en tu corazón.

—En mí existía la posibilidad de que podía llegarle a gustar, pero hoy ni quiera me saludó. Pasó por un lado y sólo me miró para luego irse—dijo—. La última vez que hablamos me contó que iría a la casa de Dione y eso fue hace como una semana, creo que algo sucedió ese día.

—Se besaron.

— ¿Él te contó? —el rubio negó

—No, pero es algo que es muy obvio—le dijo, estaba huyendo de algo, aunque no sé por qué de ti exactamente.

— ¿Eso es malo?

—No—dijo—. O bueno, posiblemente sí lo sea.

—Alan...

—O sea, si la chica que me gusta se besa con alguien, yo lo consideraría malo; así que imagino que sí lo es—continuó hablando—, es más por celos pero sí—mantuvo silencio por un momento y luego habló—. Tengo un plan, ven—la tomó de la mano y subieron hasta su habitación.

Soltó a Billie y caminó hacia la estantería para sacar una libreta azul y buscar algo en ella. Le entregó la libreta abierta en una página específica.

— ¿Cómo hacer que un hombre se fije en ti? —leyó—. Sólo hay un paso—dijo y frunció el ceño.

—Sí, bueno, no lo he terminado todavía porque pensé en sólo cosas que podrían funcionar conmigo pero debo generalizarlo.

— ¿Debo mirarlo a los ojos?

—Los ojos son las ventanas al alma, así que con solo mirar los ojos de una persona puedes quedar enamorada de ella.

—Eso es lo más cursi y falso que he escuchado.

—Lo digo en serio, ¿por qué crees que a la gente le incomoda cuando las ves a los ojos? Al hacerlo estás viendo lo más profundo de su realidad.

Billie bufó pero luego pensó bien lo que le había dicho, eso era algo que podría ser cierto. Pero era algo arriesgado, si lo miraba a los ojos se enamoraría más de lo que está y el dolor al ser rechazada iba a ser más fuerte.

----------------------------

1/3

Fuera De TextoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora