q u i n c e

941 86 9
                                    

En cualquier otra circunstancia, estoy cien por ciento segura de que Niall hubiera ido detrás de Joe y no le hubiera dejado escapar con tanta facilidad como lo ha hecho esta ocasión. Súbitamente la atmosfera en la sala es tan pesada como la combinación del sudor y el grueso humo del tabaco en una discoteca. Mi cabeza palpita por las palabras de Joe, de la misma manera que lo haría con la música en decibeles más allá de lo aceptado. Sin embargo, Niall se mantiene ahí, mirando con rabia a la puerta que ha sido cerrada con fuerza tras, notos sus músculos tensarse por debajo de la camiseta blanca que ha elegido ponerse este día, su pecho sube y baja notablemente con su pesada respiración y sobre todo, puedo notar lo difícil que está siendo para él este momento. Él no quiere mirarme, él no quiere pensar que estoy aquí, aguardando por su explicación.

—Niall. ¿Qué fue lo que quiso decir con eso? —decido que las palabras abandonen mis labios en un volumen casi imperceptible. Un susurro que espero sea suficiente, viendo la situación. —Niall- —intento de nuevo, pero me veo interrumpida.

—No, olvídalo. No tiene importancia.

¿Cómo demonios no va a tener importancia? 

¿Por qué te pondrías tan mal por algo que "no tiene importancia"?

—Sabes que no voy a dejarlo ir con facilidad, Niall. Lo mejor es que me expliques ahora qué era lo que esa caja contenía y por qué la quería. Pero no sin antes decirme qué trató de decir con "tu actuación".

Presiento que él va a salir de la casa para dejarme aquí, sola, con muchas más preguntas en mi mente que se añaden a la que parece ser una lista interminable de cuestiones que manejan mi vida a su antojo. Pero no, el rubio solo deja que sus hombros caigan, en rendición y luego va hacia las escaleras, para sentarse en las primeras y después tomar su cabeza entre sus manos, mientras que sus dedos se enredan en su cabello sedoso y tiran de las hebras con desesperación.

—Antes que comience a decirte todo, Maiah, necesito que me creas. Quiero que estés completamente segura de que lo que siento por ti en estos momentos es tan real como todos los momentos que hemos pasado como pareja, juntos. Nena, necesito que me creas cuando te digo que te amo, porque de lo contrario, me volveré loco. Necesito que estés al tanto de que cada vez que te digo que te quiero, es porque es así. ¿Estás escuchándome, Maiah? —mis ojos se fijan en él y toda mi atención le pertenece, asiento y hago mi intento por acercarme y colocarme a un lado de él, sentada en las escaleras, pero prefiero no hacerlo. Necesito ver sus facciones mientras habla, será la única manera que va a quedarme para determinar la veracidad de sus palabras.

No sé cuánto tiempo exactamente transcurre hasta que lo escucho soltar una gran bocanada de aire y comenzar a hablar:

—Joe sacó todo de contexto, Maiah. No se supone que haya "actuado" antes, pero... no mentía cuando dijo que Julia me pagó...

Creo que debí haberme sentado antes.

Doy un par de pasos hacia atrás, hasta que siento la superficie fría y lisa que es la pared estando contra mi espalda, después me dejo deslizar sobre ella hasta que mi trasero llega al suelo y puedo sentarme, llevando mis piernas contra mi pecho. Las abrazo y miro a Niall con atención, no voy a interrumpirle hasta que termine de decirme todo.

—... Julia me encontró una tarde mientras yo salía de la universidad, ella había estado buscándome por un largo tiempo. Era amiga de mis padres y estaba al tanto de todo lo que estaba sucediendo en mi enredada vida, me explicó de la situación con Joe, el hecho de que él estaba buscando vengarse y que lo más probable es que fuera contra ti.

Pequeños retrocesos en el tiempo llegan a mi mente. Trozos de escenas pasadas donde nos vemos en una situación en la cual él intenta asegurarme que sus sentimientos son verdaderos. El día que me confesó lo que era realmente; un chico que había perdido a sus padres y que había tomado una misión en su vida, cosa que había cambiado al conocerme y también por el hecho de que fue mi madre quien lo buscó para encomendarme a él.

Brave | niall horanWhere stories live. Discover now