Perfect Match ∞ Wigetta & Staxxby. {Editando.}

Capitulo 40.

SalseoLand is coming mah fellahs! xD
Disfruten el capítulo :3

Alejandro entendía el dolor de Frank, lo entendía mejor que nadie, incluso mejor que el mismísimo pelinegro.
El había perdido a sus padres cuando era joven, recordaba a su madre muriendo y a su padre destrozado.

{....}

16 Años atrás.

La tarde había pasado tranquila, Leticia, la madre de Alex, recogía la basura que habían hecho.

Tenía el cabello dorado, del mismo color del sol, una piel blanquecina y una sonrisa reconfortante. Cualquiera diría que amaba a su familia, pero en realidad es que moriría por ellos.
Levantó a su hijo, pues el pequeño se había quedado dormido en la hierba.

- Tenemos que irnos, pronto se hará de noche. - pronuncio, con una voz melodiosa, como si los mismos dioses la hubieran tejido con sus sedosas y cariñosas manos.

Alejandro obediente, se levantó y se puso la chamarra que su madre le ofrecía. El pequeño amaba a su madre más que a nadie.

Su padre los esperaba en el auto. Aquel hombre era de las mejores personas con la cual podrías cruzarte en la vida.

Sus ojos tenían una chispa que, al mirarlos, te hacia sentir mejor. Su sonrisa era reconfortante y te tranquilizaba, así estuvieras viviendo el peor día de tu vida.

Alejandro era el niño más feliz del mundo. A veces por las noches lloraba, agradecido de tener la vida que tenía y de haber obtenido unos padres tan maravillosos como lo eran los suyos.

El carro avanzaba lentamente, la carretera que llevaba de regreso a la ciudad estaba vacía, sólo algunos coches que avanzaban con máxima velocidad y otros que iban de lo más tranquilo.

Alejandro pensaba volver a dormir, pero no pudo hacerlo.

Un camión que transportaba maderas iba dando vuelta en la misma curva en la que ellos iban, pero algo malo pasó. Alejandro sintió el choque. Intentó protegerse con lo que pudo.

Sus ojos se cerraron suavemente, ajenos a todo el desastre que había pasado.

{.....}

Cuando Alex había despertado, ya no tenía a nadie.
Años después de eso, había conocido a Guillermo en la escuela y desde entonces se habían hecho inseparables. El recuerdo de sus padres siempre lo ponía mal.

- Todo estará bien mi amor - susurro en el oído de Frank, sorbiendo las lágrimas que salían sin control de sus ojos hinchados. - Estaré contigo en las buenas y en las malas. Te lo prometo.

(....)

Después de que ambos chicos se fueran, Guillermo había ayudado a sus padres a recoger un poco la sala y había subido al cuarto de su hermana.

Carol estaba recostada en su cama cuando Willy entro. Tenía entre sus manos un libro y llevaba los auriculares conectados, intentando concentrarse.

Willy camino hasta situarse a su lado y se sentó en la cama de la pequeña. Guillermo observo que de los ojos de su hermana menor caían pequeñas lágrimas que, mezcladas con el maquillaje, parecían gotas de sangre oscura.

Sin resistirse, la envolvió con sus brazos, negado a preguntarse el porque de las lágrimas de la pequeña.

Después de algunos minutos, se aventuró a preguntar.

- ¿Que pasa pequeña? - pregunto, acariciando los suaves cabellos morados de su hermana.

La muchacha se quedo unos segundos pensativa, sin saber que responder. Guillermo esperaba paciente la respuesta, acariciando su cabeza suavemente.