Samuel.
• Debería dejar de mandarte mensajes, comienzo a sentir que sólo te distraigo del trabajo •
Y ese había sido el último mensaje que Guillermo había decidido enviarme. Desde qué había salido de casa y había tomado el metro, había estado texteando con él y cuando llegue al trabajo fue lo mismo.
Deje el móvil en la mesa, iba a salir a dejarle unos papeles a mi jefe cuando el móvil volvió a sonar.
• Te quiero, gracias por existir •
Y entonces, con solo esas cinco palabras, Guillermo me había hecho sonreír realmente por primera vez.Subo en el elevador. Iba tan apretujado que al salir mis papeles se cayeron al piso y todos pasaron por encima de él.
- Me cago en la puta! - solté la palabrota sin importarme el lugar en el que me encontraba.
De repente, cuando estaba a punto de agacharme y recoger el desastre vi unas piernas blancas pararse frente a mí.
- Permíteme ayudarte - me dijo una rubia.
Le sonreí por pura cortesía. Conocía a casi todos los miembros de la empresa, pero esta chica al parecer era nueva. Cuando ambos terminamos nos levantamos y caminamos juntos hasta una mesa.
- Soy Rebeca - se presentó la chica.
- Samuel, soy de finanzas.
- Del mismo departamento.
Y entonces me mostró la sonrisa más extraña del mundo. Se inclinó un poco dejando ver su escote pronunciado, lo cual aborrecí totalmente.
- ¿Salimos a comer luego, Samu?
¿Me había llamado Samu? A nadie le permitía que me llamara así, a nadie solo a Guille.
Me negué rotundamente, en la tarde hablaría con Guillermo hasta que nos aburriéramos de los dos.Termine el trabajo, salí de mi oficina y de la empresa evitando olímpicamente a mi jefe. Como no circulaba el auto hoy tenía que tomar el metro, por lo cual camine unas cuadras adelante para poder llegar a él. Sólo esperaba que Frank ya tuviese la comida lista, pues no había podido salir a comer y me moría del hambre.
• Tendrás que esperar, tengo que terminar un trabajo •
Recibí el mensaje de Guillermo. Le conteste que sí y seguí mirando a todos los que compartían el cubículo conmigo.
Cuando por fin llegue a casa me decepcione al no ver a mi compañero. Camine hasta la cocina solo para darme cuenta que la comida no estaba preparada y que además me había entrado un cabreo impresionante.
• Tenemos un trato, yo trabajo y tu cocinas!!! •
Envíe el mensaje a Frank rápidamente y subí a mi habitación para cambiarme el traje.
¿Acaso un ladrón se ha metido en casa? ¿Por qué cojones mi cuarto está patas para arriba?
Busque un pantalón de chándal y una camiseta. Me los puse y empecé a arreglar aquel desastre. Fran me iba a escuchar muy bien cuando llegará de dónde quiera que esté.Pasaron dos horas hasta que Guillermo me llamó para hablar. Había cenado pizza y además había empezado a leer un libro sobre las finanzas americanas que controlaban el mercado estos tiempos.
• Estoy hasta la bendita polla de Frank, es un vagabundo el tío, chiqui ¿Qué debería hacer? •
• Deberías darle un escarmiento, y 1: Porque mi amigo lo está flipando con él y 2: Porque no puede tratarte como lo hace•
Me reí al leer el mensaje. Desde qué habíamos conocido a ambos chicos aquella mañana en la cafetería Frank y Alex habían estado saliendo. Podía notar en la mirada del pringado de mi compañero que Alejandro comenzaba a ser especial para él.
Y también había notado que yo pasaba más tiempo pegado al móvil. Que Guillermo me tenía vuelto loco con sus sonrisas a través de los audios que me mandaba.
Me estaba enamorando yo también, y cuando lo hacía, las cosas nunca acababan bien.
•••••
Agradecería que compartieran la historia con sus amigos, sus vecinos, el perro, su gato y la familia del gato, y con un marciano ahre xD
All the love :*
• Abbey Parnell •
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Perfect Match ∞ Wigetta & Staxxby. {Editando.}
Romance➳ Perfect Match. © Su pasado los atormenta. Guillermo Diaz tuvo que mudarse a Los Ángeles un año atrás, despues de superar su adicción a las drogas; abandono todo, su vida en Madrid y a su unico mejor amigo. Alejandro a sobrevivido a pesar de la p...