Justin entró a la habitación, aún iluminada por los pequeños rayos de sol que podían deslumbrarse y poco a poco desaparecían.
- ¿Cómo estás? – le preguntó. ___________ se sentó sobre el borde de la cama, sobándose los ojos.
- Mejor…supongo…
- ¿Te duele algo? – insistió. Y se acercó más a ella, hasta sentarse a su lado, intentando consolarla de alguna forma. ___________ se puso de pié, al mismo tiempo que Justin subía la mirada para observar qué haría ahora. Se posicionó sobre sus piernas.
- Solo…solo tengo miedo. – murmuró encima de las piernas de Justin, este se las acarició.
- Lo sé, ___________… - ella le estrujó el cuello. – se que no he cumplido mi promesa.
- No es tu culpa Justin. Ellos… son muchos…
- Pero yo prometí que no te pasaría nada.
- Y estoy bien. – se inclinó para besarlo en los labios, un beso pequeño, parecido a un roce de labios, un roce del cielo. – estoy bien mi amor…- le acarició la mejilla. – no me ha pasado nada, ¿sabes por qué? – él negó con la cabeza, instintivamente. – por qué mi padre no se equivocó al escogerte a ti como mi protector. – observó sus ojos almendrados, y que a la misma vez reflejaban los suyos. – porque se lo debo todo…y algún día le pagaré el gran favor que me hizo al conocerte.
Sus labios volvieron a juntarse, ___________ rodeó el cuello de Justin, al mismo tiempo que intentaba no llorar, el miedo yacía en ella…mucho, pero sentía que a la vez no había nada mejor que estar entre los brazos de Justin, protegida, aliviada, una mezcla de sentimientos. Justin la cargó entre sus brazos, colocándola livianamente sobre la cama, tendida y sin desarreglarse. Se abrió paso en la boca de ___________, humedeciéndola más con el sabor de su lengua, pudo escuchar un ‘te amo’ saliendo de sus pequeños labios, él…sin dejar de besarla, se posicionó sobre su cuerpo, besando el pequeño espacio entre sus senos, subiendo por su cuello, hasta llegar a la punta de su barbilla, se la besó.
- Hoy…- murmuró él. – olvídate de todo. – se inclinó para besarle el pecho, subiendo peligrosamente por su tibia piel, la fina blusa de seda quedó más arriba de sus pechos, dejándolos libres. – hoy no hay guerras, mi amor…- __________ arqueó la espalda, ayudándole a Justin a deshacerse de aquella blusa. Este percibió su cuerpo, que maravillosa sensación, esa…de poder tenerla en sus brazos. – solos somos tú y yo…dos personas normales…haciendo el amor…- ____________ cerró los ojos, un gemido escapó de sus dulces labios, el primero de la noche. Sus manos se pasearon libertinas por el remarcado torso de Justin, llegando hasta el broche de su pantalón, se lo bajó por completo, ayudándose con los pies…observando aquella ya conocida erección, definitivamente olvidándose de todo, esa noche no sería la hija del presidente, esa noche él no sería el militar protector, si no…dos humanos, amándose.
- Voy a hacerte sentir todo lo que tú me haces sentir a mí… cada día… - susurró Justin, en su oído. ___________ arqueó la espalda volviendo a cerrar los ojos. Relamió los labios, y sintió las manos de Justin quitarle los shorts y al mismo tiempo sus pequeñas braguitas. Mojadas, empapadas por él, por sus palabras, por sus besos. – me encantas…- bajó deliciosamente por su estómago, besándole el abdomen. Su lengua, humedecida por las palabras mismas, acarició el monte de Venus de su preciosa chica, juntó sus labios y se lo besó. – me fascinas…- subió la mirada, observándola completamente excitada, completamente salvaje, completamente suya. - ___________…
- …¿Mnh? – respondió ella, debilitada.
- Te amo. – le separó la piernas, y hundió su lengua completa en ella. En su interior, alrededor de su clítoris, saboreando hasta el último sabor de su dulce sexo. La escuchó gritar su nombre, y respirar hondo, respirar tranquila, sin fatigaciones, para luego…percatarse de lo real, de lo que pasaba, de cuanto estaba llorando ____________ en ese momento.
- ¿Por qué lloras? – levantó la mirada, aún concentrado en su faena.
- Déjame…
- Dime…- subió hasta ella, hasta la altura de sus labios, su erección se topó intensamente con la feminidad de _________. Le besó las mejillas, el mentón, la frente, los labios. - ¿Qué pasa mi vida?
_________ cerró los ojos, dejando escapar las lágrimas restantes que sus ojos acumulaban. Respiró hondo, y volvió a abrirlos.
- Tengo miedo, por ti…por que no quiero que nada te pase por mí culpa…Justin. – sus miradas se juntaron, alumbradas por el amor mismo. – por que se que yo no podría protegerte…si algo malo te pasara.
- Nada va a pasarme.
- ¿Cómo lo sabes?
- Estamos juntos…
- Pero…
- Nada. – besó sus labios. Callándola.
- Eres tan terco.
- Y tú tan hermosa. – __________ no pudo evitar reír, al igual que él. – mañana…nos iremos…- intentó explicarle. – Kapaa ya no es seguro para ti. Será difícil pero…
- ¿Qué pasara?
- Todo saldrá bien. Yo sé.
- Confió en ti – ahora fue ella quién lo besó en los labios, apretando el cuerpo de Justin sobre el suyo. - Tú lo sabes todo.
- No, no lo sé todo princesa…lo único que sé es que sea lo que sea que pase mañana, siempre voy a estar ahí contigo. – besó su cuello, haciendo que __________ soltara una carcajada silenciosa. Él le sonrió. – arriba o abajo…- ahora besó sus labios, mezclándolos con el sabor de su propio cuerpo. – siempre, voy a ser tu protector.
