Capítulo 9.

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_________ abrió los ojos, recuperando al menos un porcentaje de su sentido común. Justin la miraba, joder, ¿Cómo es que podía negarlo? …si se le notaba en todo el cuerpo que…moría por tirarse un buen polvo con ella.

- Justin…no empieces…- murmuró ella. No se perdería esa oportunidad. Sus manos acariciaron el duro miembro de Justin por sobre los bóxers, él bajó la mirada, deliciosos movimientos. Se estremeció, mucho…muchísimo, mientras involuntariamente cerraba los ojos. – sé que te gusta esto…- ____________ siguió, cada vez aquellos movimientos se volvían más penetrantes. Su mano izquierda bordeó la cintura de Justin, mientras seguía hablando. – sé que tampoco puedes aguantar tanto, me deseas… me lo has dicho…y te lo estoy pidiendo, quiero que me folles ahora… - una voz tan femenina, tan sensual. Su mano izquierda se encargó de bajar lentamente los bóxers de Justin. 

- No. – la miró a los ojos. Parecía una niña, una niña con el cuerpo más deseable que sus ojos habían podido ver. La detuvo. Si no hacía algo que lo distrajera ahora, la follaría sin compasión al primer llamado. – tú más que nadie sabes que esto está mal. – se levantó, caminando, intentando que se le bajara la erección. No podía voltearse a mirar, del tan solo hecho de imaginarse a ___________ sobre su cama, desnuda, y completamente caliente, como él. 

_________ alcanzó su camisón, hecho trizas, con las manos, lo puso sobre sus pechos, cubriéndolos, se arregló un poco el cabello. Caminó de rodillas hasta el borde de la cama, y pasó sus manos por lo abdominales de él. Justin cerró los ojos, si tan solo ella supiera cuantas ganas tenía de hacerle el amor, de tumbarla en esa jodida cama, de hacerla gemir tan fuerte, que nunca lo olvidaría. Su cuerpo ardía, una llama, no Dios, peor que eso … y… sí Dios, lo que pensaba… __________ le besaba la espalda. Sintió sus tibios labios detrás. Gimió. 

- __________, déjalo…- gimió de nuevo. Aunque no hacía nada para detenerlo. 

Y para sorpresa de él, ella se separó. 

- Bien, ya entiendo. – dijo completamente cabreada. Jodida. Se cubrió los senos y bajo apresurada de la cama. – vale, no me deseas. 

- No es eso.

- ¿Entonces qué? 

- Está mal. Esto… ___________ esto no puede pasar entre los dos.

- ¿Por qué no? ¿tienes novia? , o ya sé…claro, estás enamorado. – lo miró mal. Una gran oleada de celos invadió su corazón. ¿Otra chica? – joder Justin, me lo hubieras dicho antes. – para no hacerme ilusiones, pensó, muy dentro de ella. 
Justin la cogió de las caderas y la apretó contra su cuerpo. Teniéndola tan cerca, ambos jadeaban, _____________ le robó un beso, pequeño…Justin provocaba una y mil cosas en ella. 

- Te deseo…te deseo más que a nadie…no sabes todo lo que pienso cuando te veo, todo lo que me imagino contigo cada vez que te escucho gemir para mí… - __________ no pudo evitar gemir, las palabras de Justin no hacían más que dejarla con ganas de más. – pero tengo una regla, algo que debo cumplir…

- ¿Qué? – le preguntó ella. 

- Debo protegerte ____________. – la agarró del culo, cargándola. – esa es mi misión. – besó suavemente el hombro de ella, llegando hasta su cuello. 

- Y las estás cumpliendo. - ___________ lo besó en los labios, suave, un beso sencillo. – eres el mejor en lo que haces, y yo…

- No, no nena…no sigas. – le pidió. ___________ mordió su labio inferior. Se inclinó para besar su pecho, para subir por su cuello luego. Encontrándose con sus labios. – no puedo…
______________ lo besó de nuevo, tan tiernamente, un beso que él no dudaría en recordar. Se separó. 

- Tal vez yo pueda hacer que eso cambie. – le dijo mirándolo. Justin no puedo evitar sonreír, se despeinó el cabello, más de lo que ya lo tenía. Ella se acercó por última vez a su oído. – me debes una camisa, guapo. – Justin se estremeció, recordando… ¿Cómo mierda es que había llegado a rompérsela? , la calentura volvía, y sus ganas de tirársela también. – buenas noches. – se despidió. Y vaya que no sería una buena noche para Justin, no después de aquella visita… _________ desapareció, moviendo las caderas. Justin la miró toda, de pies a cabeza, y pensar que todo ese cuerpo femenino podía ser suyo. Ella era distinta, tanto que hasta por primera vez, una mujer, esa mujer le había robado una sonrisa…esa noche, y en ese mismo momento, él sonreía, sonreía por ella. 

Esa mañana, Justin despertó tarde. ¿Desde cuándo él lo hacía? …se restregó los ojos, mirando a ambos lados de la cama. El olor de ____________ estaba impregnado, esa fragancia que lo tenía atrapado, reposaba sobre su almohada, pero ella…no estaba ahí. 

Y le jodía…aún recordaba lo que ___________ y él habían estado a punto de hacer anoche. ¿Cómo lo iba a olvidar?...si de tan solo pensarlo, volvía excitarse tanto como ayer. Lo dejó pasar, porque era así, por que el presidente había confiado en él para esa misión, porque a ningún otro le había ordenado cuidar de su hija, solo a él…y resultaba que…terminaría siendo débil. Salió de su habitación, con el pantalón de pijama puesto. Y pensar que __________ estuvo a punto de quitárselo por completo…

Ryan y __________ conversaban amablemente en la cocina. ____________ sentada sobre la encimera de la cocina, mientras Ryan cocinaba. No se podía creer lo hermosa que se veía a plena mañana, despeinada, preciosa, nunca dejaba de serlo. ¿Cómo es que se hablarían ahora después de lo de ayer?

-Buenos días. – les dijo a los dos. Miró a __________ por el rabillo del ojo. Ella tampoco se atrevía a mirarlo, o al menos eso notaba. 

-Hola. – le dijo. Colocándose de pie, abrió la nevera. Una coca-cola helada salió de ahí. - ¿Cómo amaneciste? – y él hubiera preferido contestar otra cosa, tal vez algo mejor…tal vez un ’contigo’.

-Bien…- la miró a los ojos. ____________ sonrió, silenciosamente, Ryan los miraba desde atrás. 

-Justin, llamaron temprano.

-¿Quiénes?

-De la casa blanca. Era la secretaria, ha hablado con el presidente…

-¿Y qué te dijo? – tomó asiento en una de las sillas de la cocina. 

-Pues nada, no tiene noticias. Todo sigue igual, según el ejecito ha eliminado a todos los rusos posibles. 

___________ observaba desde atrás. Aún podía sentir las manos de esos cabrones, atar las suyas. 

-¿Le has dicho lo que paso ayer? – preguntó ______________.

-¿Para qué tu padre te asesine? No, muñeca. – Ryan sonrió, y se volteó para darle vuelta a la cacerola húmeda. 

-No volverá a suceder, lo prometo. – miró a Justin. Mientras él trataba de ser discreto con ella. _________ lo conquistaba, con cada mirada, cada palabra y…ahora podía afirmarlo, con cada beso. 

-Que mierda…- susurró Ryan, observando los cajones de la cocina. - ¿Desde cuándo no compran aquí? 

-Desde que tenía ocho. - __________ observó también los cajones. 

-¿Y qué se supone que comeremos? – la miró despectivo

-Hay una tienda cerca…- intentó recordar ___________. 
La verdad es que ni ella conocía bien el lugar. 

-¿Y quieren que yo me vaya a compra ahí?

-Siempre se te ah dado por esas mariconadas. – farfulló Justin. ____________ rió, mientras se alejaba discretamente para dejarlos solos. 

-No jodas Justin, a ti te gusta ir de compras. – Ryan lo miró, furioso. Por un momento logró entender el verdadero propósito de los dos, aunque ninguno quería reconocerlo. – ah, claro, ya entiendo…- susurró, observando que ___________ no estaba cerca. - ¿te la vas a tirar, no?

-Lárgate ya.

-¿Es eso, cierto? – sonrió. – vaya, me demoraré entonces.
Justin no pudo evitar reír. Sonreír. Estar feliz por lo que Ryan insinuaba. Lo vio salir por la puerta principal, mientras _____________ leía un no sé qué sentada en el mueble. 

-Que se diviertan. – sonrió Ryan. Y valla que lo harían.

I'll be your protector | Justin Bieber & Tú +18Where stories live. Discover now