21 LÍNEAS DE SANGRE

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"Hay un incendio empezando en mi corazón

Llegando a un nivel febril,

Y me está sacando de la oscuridad

Finalmente te puedo ver como a un cristal limpio (...)

No subestimes las cosas que haré (...)

Lanza tu alma atreves de cada puerta abierta

Cuenta tus bendiciones hasta que encuentres lo que buscas,

A la vez conviertes mi dolor en oro atesorado..."

Fragmento del tema; 'ROLLING IN THE DEEP'  

De Adele (en español.)


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LÍNEAS DE SANGRE



"No, no..." Murmuro mientras caía al suelo, sin sorpresa. Intento mantenerme fuerte, pero la fatiga me vence. Al abrir los ojos, veo tenues destellos dorados brillando sobre mí. Observo tres marcos circulares que reflejan mi agotado ser.

Examinando mi entorno, reconozco una habitación similar a una escena de suspenso, pero no presto atención a los objetos. Decido dirigirme hacia una roca en el centro de la cueva y al sentarme, froto mi frente. Al instante, un olor a tierra húmeda llega a mí. Es una fragancia rica, cosquilleando mi sentido.

La inquietud me lleva a preguntar si Iona ha entendido algo. Su respuesta es "Nada". Escucho un silbido que se acerca rápidamente, pero no reacciono a tiempo. Un enjambre de plumas cae sobre mi cabeza y un espejo comienza a burbujear. Un ave de plumaje negro aparece, lanzándome graznidos. Me cubro la cabeza, temerosa de su pico afilado. Finalmente, el ave se detiene y emite un suave silbido.

Respiro agitadamente y observo al ave por encima del codo. El mirlo, reconocible por su especie, salta con tranquilidad dejando huellas sobre la blanca sal. Luego, se escucha un crujido en el techo. Pequeñas partículas blancas caen en mis ojos. El aleteo del mirlo se vuelve frenético. Saboreo el polvo que entra en mi boca al abrirla. Es sal. Están lloviendo granos de sal... sal, reflexiono.

—¡Rayos, ¿por qué a mí?! ¡Y tú, tú qué?! —exclamo con rudeza y cierto borde mientras dirijo mi mirada hacia el pájaro que no deja de observarme. Mi palma arde y el dolor se intensifica. Señalo al pájaro y avanzo sacudiendo los brazos. Me acerco a uno de los espejos, el del centro.

—Ah, sí. Veamos qué es todo esto, compañerito —me burlo—. Vaya vestido bonito que tengo, me siento desnuda y huelo a pescado, seguro... o a rocío. ¿A qué huele el rocío? —comento mientras giro para observar al ave, que salta con tranquilidad dejando sus huellas sobre la blanca sal.

Mi vestido brilla en un tono verde musgo. Sus irregulares terminaciones cubren mis rodillas, dejando al descubierto una parte de mis piernas. Acaricio la tela suavemente, sin saber muy bien de qué material está hecho. Es luminoso y metálico. Froto mi ojo, muerdo mi labio al observar los espejos. Nunca volveré a ser normal, pienso con una sonrisa insatisfecha.

Los símbolos reflejados en los espejos capturan mi atención. El espejo de enfrente tiene grabado un símbolo idéntico a la marca en mi palma. El siguiente, a mi derecha, muestra otras líneas enigmáticas, con una media luna por encima del círculo y una cruz por debajo. Giro para detenerme frente al último espejo, el cristal a mi izquierda. Su figura grabada a fuego es un triángulo que apunta hacia arriba, junto a una cruz delineada por debajo.

Magnet in Dark© Parte I "EL ÓNIX" NUEVA VERSIÓN -#PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora