Secrets in the night

2.4K 283 222
                                    


Días del presente pasado.

—¿Qué información me tienes? —No dejaba de teclear un par de cosas en mi computadora, la mayoría de unos datos y boletos de avión para Tawan cuando saliéramos del país si todo funcionaba (o eso le haría creer) le di una calada más a mi cigarro, el común dominante en mi oficina, mi refugio, que para muchos, el cigarro le daba un sentido más oscuro a este lugar oficina llena de fetiches, correas, látigos, bozales colgados en combinación al cuadro a mis espaldas. Ahí solo había un toque de oscuridad e intimidación pero para mí, era mi espacio donde podía ser yo mismo. Abrazar mi oscuridad sin culpas.

Pero Ken sin embargo frente a mi, se notaba acostumbrado a ese panorama, como muchos otros guardaespaldas de confianza que sabían de este lugar. Este me extendió unas fotografías de Tawan en la primera familia, hablando con Kinn sin esposas ni nada que lo tuviera sujeto. Sonreí, el muy cabron lo había logrado, al menos no lo mataron a la primera, porque si algo Tawan tenía era que contaba con una astucia y conocía a Kinn como a nadie.

—Khun Kinn ha comenzado a ser superado por la nostalgia del pasado, inclusive Tawan ya pasea por el piso donde está recluido y tiene largas charlas con Khun Kinn, Porsche está más paranoico que nunca y eso ha ayudado mucho porque podemos plantar la evidencia de que "el es el traidor" —explicó tranquilamente sin moverse de su lugar.

—¿Tawan ha sacado algo de información ya? —Ken se encogió de hombros y negó un poco con la cabeza. Rodé los ojos, tampoco podíamos hacer demasiado tiempo, necesitábamos una sola cosa para poder vender datos a los Yakuzas y poder deshacerme de la primera familia de una vez por todas, si hacía que todos tuvieran información del primer clan, los debilitaría y podría buscar la manera de destruirlos desde adentro.

—Sin embargo cayeron en la trampa de que Tawan puede encontrar información de los italianos, Khun Kinn está enfocado en ello, yo estoy siendo cauteloso porque Big no quita los ojos de Tawan dia y noche. —

—Todos sabemos que Big siempre ha querido el culo de Kinn, es obvio que estará en alerta, hay que buscar la forma de mantenerlo a raya, ¿entendido? —Ken asintió.

—Yo puedo encargarme de eso sin problema. Big estará a la defensiva sin duda, pero ha sido relegado mucho a un lado desde que Porsche está con Khun Kinn, pero esto es de ayuda porque ahora por más que sospeche de Tawan, no lo escuchan del todo. —

Era obvio, Kinn solía cegarse demasiado, ser un imbécil cuando se trataba de Tawan. A veces el amor del pasado pesaba, ¿Sería capaz de poner por encima su amor a Porsche por Tawan? Me divertía tan solo de pensarlo.

—esperemos al siguiente movimiento de Kinn. —



2022

El aire en el bar estaba lleno de energía. Las luces de neón bailaban a lo largo de las paredes, proyectando tonos vibrantes sobre la multitud de personas que se balanceaban en la pista de baile. La música pulsaba a través de los parlantes, sus ritmos vibraban en cada rincón de la habitación. En un extremo de la barra, las mesas estaban repletas de botellas de whisky, ron y vodka, cuyo contenido iba disminuyendo a medida que avanzaba la noche.

En una de las mesas más apartadas del ruido -dentro de lo que un bar podía ofrecer- estaba el grupo de siempre, platicando y bebiendo entre vasos vacíos y carcajadas.

—¡Les juro que es cierto! ¡Estoy seguro que tengo un don! Voy a ir con un chamán en estos días a que me haga una limpieza de espíritu! —repitió Porsche irritando por la situación en la que él sentía que se encontraba.

My Second ChanceWhere stories live. Discover now