Between betrayals and time travel

6.7K 512 442
                                    

2022

—¿Estás seguro que no será nada grave? Hia no quiero que te pase nada. —Macao no se encontraba nada tranquilo, pero eso siempre pasaba cuando teníamos algún operativo que llevar a cabo. El se quedaba y esperaba, siempre intranquilo de que algo me pasara algo.

—No me va a pasar nada, además yo solo seré el mediador en esta situación, la gente de la primera familia será quien se encargue de todo lo demás. —trate de calmarlo sentándome a su lado, en su habitación. Pude ver todo a su alrededor, ¿que había sido de ese chico que por un tiempo tenía una afición con coleccionar tarjetas de cómics y juegos de video? Ahora todo era estudios y seriedad. De verdad esa habitación parecía inclusive más madura que la mia. Mi padre siempre nos decía que teníamos que esforzarnos al triple, ni Macao ni yo nos dabamos días libres, supongo que cuando entro a la preparatoria se tomó en serio aquello. Y era muy doloroso. Nunca fuimos niños en realidad.

—Pero, pero Hia los italianos no son personas civilizadas. Tu mismo lo has dicho, han tenido problemas con ellos desde siempre. Khun Don y P'Kinn han tenido hasta donde sé, muchos roces. ¿No te parece raro que te manden a ti ahora que P'Kinn está en el hospital?—

Por supuesto. Claro que lo sabía, el tío Korn no nos pasó toda la información solo para nada, era obvio que si nos aceptó la ayuda es porque sabría que yo tendría que ir en lugar de Kinn, que aunque a mi padre eso le pareciera "una forma de demostrar que la segunda familia podía ganar" también la primera familia ganaba. Una pequeña victoria si, pero si no se lograba, sería una victoria como quiera para ellos si yo me moría.

—Todo va a estar bien Macao, además Porsche viene conmigo, es mi amigo, y es duro de roer, ya veras que estaremos aquí para la hora de la cena. —

—¿Me lo prometes? —Le revolví el cabello pegando mi frente con la suya dándole un ligero golpecito.

—Siempre regreso a tu lado nong, ¿Cuándo he roto una promesa? —

Nunca... Excepto aquella noche en la primera familia, esa noche no regresé a mi hermano. Y eso era lo que más me pesaba pensar.

Si tan solo pudiera tener idea de lo mucho que él me necesitaba habría sido mas cauteloso. Porque la cautela era algo que siempre llevaba conmigo. Un ejemplo era como al salir de la habitación de mi hermano y caminar hacia la mía pude ver una sombra moverse suavemente por los pasillos, le seguí su trayectoria, después de todo; nadie mas conocía esa casa al derecho y al revés que yo.

Supe quien era aun usando esa pijama tan pobre, una camisa holgada y un pants cómodo, su cabello revuelto. Paseaba despacio mirando a todos lados, así que aproveche y cruce por otro lado de los pasillos que daba justamente frente suyo, pero para mi sorpresa se había detenido encendiendo su celular, leyendo algún mensaje así que me tomé el tiempo para recargarme a mirarlo.

Nunca le presté realmente atención más allá de su amabilidad y cortesía al tratarnos, una que a diferencia de los otros guardaespaldas, él parecía hacerlo con más tacto, pero ahora con la luz del celular sobre su rostro podía ver un poco más sus rasgos.

Era lindo. Un hombre apuesto. Aun con esa ropa de segunda mano y su cabello desordenado, su perfil era atractivo.

Looking for something? —pregunté inconscientemente en inglés haciendolo brincar del susto. Pete me miró por un instante guardando su celular.

—looking... hum... —repitió como si tratara de entender mis palabras, ¿que estaba haciendo ahí? Si mucha gracia no me hubiera causado que el imbécil de mi primo hubiera mandado a Pete y Arm a esa misión junto a Porsche, con todas las intenciones de no dejarnos solos. Le miré fijamente y después a su celular.

My Second ChanceWhere stories live. Discover now