capitulo 36

66 3 0
                                    

No quería causarle problemas a Oscar, casi muere protegiéndome, pero ahora tenía que protegerlo incluso de mí.

Trate de no llorar, pero me era imposible y las lagrimas de caían por mi pelaje manchado de sangre.

Paso un tiempo hasta que por fin llegue al lugar, había un pequeño estanque, que reflejaba la luz de la luna me derrumbe en el césped que estaba junto a la laguna y me enrosque como un gato mientras temblaba.

Quería volver y abrazar a Oscar, pero eso lo pondría en peligro, trate de no llorar, pero me era imposible.

La sangre impregnada en mi pelaje había manchado el césped donde estaba, la vista probablemente era muy desagradable, permanecí ahí por un largo rato pensando en que debería hacer.

Estaba considerando en rechazar a Oscar para que tenga una vida tranquila, después de eso yo desaparecería de su vida y trataría de vivir escondido.

Pero la simple idea de la separación definitiva era muy dolorosa, cuando estaba inmerso en mis pensamientos de pronto se escuchó un pequeño crujido de la hierba.

Fue entonces que sentí un ligero aroma a menta y lo supe era él..., no tenía ganas de mirarlo a los ojos, en realidad no tenía cara para hacerlo.

Trate de hacerme el dormido, cuando de pronto sentí que se iba acercando cada vez más, instintivamente trate de serrarlos con más fuerza, cuando de pronto me percate que había algo suave tocándome.

Abrí los ojos y noté que Oscar se había acostado a mi lado mientras me miraba con unos ojos llenos de ternura.

Viéndolo así tuve el valor de levantar la cabeza cuando de pronto Oscar acerco su cabeza hacia mí, tuve una la sensación de que quizás me mordería, pero aun así no me retire

Si quería hacerme daño lo dejaría hacer lo que quiera, solo serré los ojos esperando el dolor, pero no hubo nada de dolor y en su lugar había algo suave tocándome la mejilla.

Abrí los ojos y Oscar estaba lamiéndome, aunque este cubierto de sangre no parecía disgustado.

Permaneció así por un largo rato, luego me acaricio la cabeza con su barbilla como si me estuviera consolando, inmediatamente le correspondí las caricias, hasta que sin darme cuenta me quede dormido.

Durante mi sueño volvió al lugar donde estaba mi madre, pero esta vez estaba en mi forma de lobo, la diosa luna estiro su mano para acariciarme la cabeza mientras volvía a decir:

"Mi niño, no tengas miedo"

Estaba templado pues tenia miedo de que me regañara, pero al ver que no estaba molesta me relaje un poco, entonces que note que no había sangre en mi pelaje.

"Él debe odiarme"

Dije deprimido, mientras bajaba la mirada, no sabia si ella me entendería porque lo único que salía de mi boca era sonidos parecidos a los de un perro

Sin embargo ella solo me sonrió mientras volvía a decir: -"Si fuera así porque volvió por ti a pesar de estar tan débil... "

"Pero... "

"Hace mucho yo tampoco confiaba en que su cariño fuera genuino, pero tuve que retractarme..."

"..."

"No te escondas, enfréntalo ya has podido ver todo lo que ha hecho por ti..."

"Él ya tiene a alguien más, lo vi antes de ser atrapado"

"No, no era él, cuando fuiste atrapado ese joven estaba luchando desesperadamente para no ser sellado"

Creí que me rechazaríasWhere stories live. Discover now