Creí que me rechazarías

capitulo 15

Sabia que no tenia mucho musculo, pero me podría considerar hermoso en muchos sentidos, ya que mi piel realmente era agradable tanto para la vista como para el tacto.

Pero cuando menos lo espere Oscar se había quitado la ropa que cubría su pecho, mientras seguía asiendo de las suyas con mi cuerpo, ya lo había visto antes pero siempre me parecía asombroso la perfección en cada proporción de su figura.

Comenzó a lamer cierta parte de mi pecho, mordisqueaba ligeramente y lamiendo las cosas que ya están muy sensibles en mi pecho.

Había veces en las que Oscar prefería jugar con mis labios y me besaba sin restricciones en lo que hacía.

Ya había pasado un tiempo hasta que se quitó la ropa que cubría la parte inferior de su cuerpo, quedando totalmente desnudo en la cama.

Era asombroso el tamaño de esa cosa, ya lo había notado antes pero aún me dejaba sin palabras, continuo besando todo mi cuerpo, pero esta vez una de sus mano se dirigió a mi entrada, y así fue metiendo un dedo a la vez para no lastimarme.

Supuse que esto era lo que llamaban preparar a tu pareja para tener sexo, sin embargo, la sensación se sentía un poco extraña no sabia si me gustaba o no, aunque mis ojos estaban lagrimeando por el exceso de placer.

Ya había metido tres dedos en mi entrada, haciéndome jadear muy fuerte, hubo un momento en que me pregunte si realmente esa cosa entraría en mi.

Pero mientras estaba en mi mundo sentí que Oscar separo mis piernas, empezando a acercar su miembro en mi entrada, y de un momento a otro su parte inferior empezó a ingresar dentro de mí, por suerte la entrada estaba bien lubricada o realmente hubiera dolido más.

El dolor era inmenso, podía sentir que mi entrada estaba sangrando, la primera vez era muy dolorosa, trate de aguantar el dolor, hasta que Oscar lo metió todo, provocándome un dolor r extremo, se sentía como si desgarrara el interior de mi vientre, no podía aguantar las lágrimas, me mordí tratando de no hacer ruido.

Cuando empezó a moverse dentro de mí, cada vez que empujaba, era un infierno, desee parar pero Oscar había perdido razón de si, le di más prioridad a ayudar a Oscar así que debía aguantar por su bien.

Mi cuerpo se estaba calentando cada vez más, aunque era doloroso, sentí que no quería parar, creí que me había vuelto loco, estaba confundido si era dolor o placer, ¡Mi celo había llegado!, supe que mi celo se pudo haber adelantado por las feromonas de Oscar.

Cuando de pronto sentí un dolor en el cuello, y cuando me di cuenta, ¡Oscar me estaba marcando!, me estaba aceptando como su pareja, me resistí a pesar del dolor, pero aunque era un poco masoquista el hecho de que me marcara me hiso feliz, aunque después de marcarme comenzó a moverse otra vez, provocando un terrible dolor como si mi mis órganos fueran a salir de mi cuerpo.

Mis lagrimas no paraban de fluir, mi celo había llegado pero aun podía sentir que dolía mucho, trate de soportarlo, hasta que de pronto Oscar se detuvo un momento y comenzó a besarme los labios, este comportamiento me palacio extraño para alguien segado por su celo.

Con voz quebrada pregunte: -"¿Oscar...?"

"Lo siento, ...no quería lastimarte"-Dijo limpiando mis lágrimas.

"¿Por qué no me lo dijiste?"

"No quería lastimarte ...pero ahora"-Miro la lamentable escena, y sus ojos empezaron a llorar..

Me pareció un poco injusto que los dos estuviéramos llorando, si era yo quien sufría, pero aun así no quería que él se sintiera culpable: -"Yo soy tuyo, así que úsame cuando quieras"