capitulo 17

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Mis ojos volvieron a lagrimear, pero esta vez no era de tristeza si no de alivio, y a si poco a poco levante mi mano para tomar la mano de Daniel quien después de tocarnos me ayudo a levantarme.

Aunque al verme llorar otra vez trato de limpiar mis lagrimas con su mano mientras decía:-"Ya no llores"-Pero al ver que provocaba que llore más decidio levantar mis mejillas tratando de asarme sonreír a la fuerza mientras me decía:-"Sonríe así".

La escena era un poco graciosa que no pude evitar reírme:-"Jajaja..ja...pff"-aunque intente contenerme, por miedo a molestar a Daniel quien al verme sonrió ligeramente.

"Si, serié, pero no llores"-Parecía decirlo como un sermón mientras levantaba una mano para avariciar mi cabello, me parecía increíble que un niño un poco menor que yo sea más maduro de lo que aparenta.

Después de eso comencé a seguir a Daniel, según me conto ahora vive en un orfanato, pero no le gusta quedarse ahí así que suele escaparse al bosque la mayor parte del tiempo, aunque siempre vuelve cuando anochece para evitar muchos problemas.

Caminamos por casi una hora, para llegar a una gran casa con un enorme patio que estaba rodeado por un muro y solo había una puerta delantera, Daniel dijo que haga lo que él diga para poder quedarme, así que lo primero que hicimos fue escabullirnos detrás de una pared donde detrás de un arbusto había un agujero donde parecía apto para que un niño pueda entrar y salir cuando quiera.

Supuse que era la salida secreta de Daniel y efectivamente si lo era porque ingresamos por ese lugar, después de eso nos dirigimos a la oficina donde Daniel ingreso sin tocar la puerta, había una señora sentada en un escritorio, que parecía ser bastante estricta.

Daniel se acercó sin miedo a esa mujer y dijo: -"Necesito un favor"-Mas que una petición su tono parecía como si fuera una orden.

A la señora no parecía importarle el tono y pregunto: -¿Ahora que quieres?

"Mi amigo no tiene a donde ir así que se inscríbelo en este orfanato"-Volvió a decir Daniel sin miedo mientras me miraba.

"¿Acaso crees que este lugar es un refugio para vagabundos? -Pregunto la señora mientras me miraba, aunque por mi estado era evidente que la había pasado mal, mi ropa era un desastre.

"Si"-Dijo Daniel sonriendo.

Al ver su valentía llegue a admirarlo, ningún niño en su sano juicio se atrevería a enfrentar a una señora así, era muy alta, sin mencionar que su peso podríamos decir que era excesivo.

"No es posible, llévate a tu amigo de aquí"-Dijo la mujer de manera fría.

"Jajaja, creo que no me estas entendiendo es una orden no una petición"-Dijo Daniel mirando a esa mujer, devolviéndole la mirada fría.

"¡Tu...!"

"Me pregunto que dirá su esposo de Víctor, quien la visita a media noche cuando él no está"-Dijo Daniel mientras la miraba con una sonrisa.

"..."

"O sin mencionar la malversación de fondos del orfanato, la adicción a los juegos con otros maestros, me pregunto qué más puedo averiguar de usted".

"Yo..."-La mujer parecía un poco nerviosa mientras volvía a hablar: -"No tienes pruebas"

"Jajaja. ¿Eso es lo que crees? Me pregunto si debería publicar algunas de las pruebas para que me creas."-Daniel la amenazaba abiertamente sin tener miedo de nada, realmente se veía increíble.

"Es suficiente, lo hare solo dime el nombre de tu pequeño amigo"-dijo mirándome con odio.

Su mirada me puso nervioso pero cuando estaba hablando: -"Me llamo O-"

Creí que me rechazaríasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora