—¡No! S-Si lo hace parecerá demasiado viejo.

Arthur frunció el ceño mientras su mente viajaba a su lugar seguro. Ambas mujeres comenzaron a discutir sobre como se vería mejor Arthur mientras se frotaban a él.

—Imagina un prado verde lleno de mariposas y tulipanes... —Arthur suspiró internamente—. Oh, que linda piedra...

De repente el mundo imaginario de Arthur comenzó a temblar y estremecerse. Cuando volvió al mundo real, estaba presionado contra la pared de roca mientras Liliana y Adela estaban sobre él mirándolo con firmeza.

—¿Qué? —Preguntó Arthur, estaba seguro de que le habían dicho algo.

—¿Cuál de nosotras crees que es más bonita? —Pregunto Liliana, casi como si fuera una queja.

Adela miró a Arthur con el ceño fruncido, Arthur solo pudo pensar que ambas habían comenzado a pelearse de repente y eso lo llevó a esto.

—Haa... —Arthur suspiró pesadamente y pensó en lo que debería hacer.

Miró a Liliana, ella sonrió un poco cuando esté la miró pero se tensó cuando Arthur se giró hacia Adela. Arthur decidió no preocuparse demasiado por qué decir, simplemente tomó a ambas damas por la cintura y las acercó a él.

Ambas se quedaron perplejas por tan repentino movimiento.

—Por supuesto que ambas son hermosas, cada una tiene algo que las hace bonitas a su manera, por ejemplo... —Arthur miró a Liliana—. Me gusta tu cabello, pero más tu forma de andar decidida y con la frente en alto, tal vez no lo sepas pero para el resto te como alguien que inspira valor con su andar, justicia con su actitud y paz con su sonrisa... Aunque también pienso que te ves atractiva. —Arthur soltó una suave risa.

Arthur se giró hacia Adela.

—Tú por otro lado, tus ojos verdes cuál esmeraldas dejan a uno hipnotizado. Pero más allá de eso, me gusta tu forma de ser, segura, elegante, refinada. Tu inteligencia hace que sea divertido ver cómo otros se interponen a ti pero al mismo tiempo hace que sea agradable olvidarse del tiempo al hablar contigo.

Después de decir todo eso, Arthur asintió con la cabeza.

—Si, definitivamente ambas son muy hermosas para mí.

Mientras Arthur se sentía relajado luego de expresarse, los rostros de Liliana y Adela estaban como remolachas. Arthur abrió los ojos cuando sintió que ambas le besaban las mejillas y le agradecían por sus palabras.

Se recostaron junto a él mientras se relajaban, hablaban de cosas sin importancia pero al menos Liliana y Adela ya no intentaron pelear por ver quien era mejor. Al menos en este momento tenían una tregua.

Liliana miraba con adoración a Arthur mientras la palabra "Atractiva" resonaba en su mente.

—¡Arthur cree que soy atractiva! —Gritó emocionada en su mente.

Adela por otro lado estaba bastante feliz. Sintiendo la suave y casi indetectable caricia de su amado en su cintura, Adela se sintió en paz.

Pero aunque ambas mujeres estaban contentas, el único que estaba intranquilo era Arthur. Maldiciendose así mismo por estar con 2 mujeres junto a él y no poder hacer nada.

Rey De Reyes - Volumen 1Where stories live. Discover now