- ¡Aaaah!- volvió a gritar Susana una vez que recuperó la conciencia
- Jesús con los gritos, señora- dijo Manuela
- ¡Manuela! ¿Qué haces aquí? No... No digas nada, te has escapado a esta casa a ver a susana.- dijo Germán en modo regaño
- 🤨
- Baja eso- dijo Germán viendo alzarse poco a poco la ceja izquierda en Manuela
- ¿? Manuela, ¿He muerto?
- ¿Que va a morir? Si estamos vivas y yo más que nunca que heche 13 con él a piñón.- dijo Manuela con descaro mientras Germán se ponía rojo
- ¡Josu! ¿Con este calor? Si hace tanta calor que no puede uno hacer nada. Vamos es como hacerlo bajo un plástico.- dijo Susana
- Señora... Que yo soy fuego y el fuego no le teme a nada.- dijo Manuela
- Anda vamos a casa. No has debido decirle eso, que no echamos tantos mujer.
- ¿Viste su cara? Se moría de envidia, ¡Ja!- dijo Manuela divertida
- Se acabó mi paz- pensó Susana
- ¡¿Dónde estabas, revoltosa?!- exclamó Ponce
- ¿Yo? Hijo, dando un paseo por este edificio taaaan bonito que tenemos, haber si le dan una mano de pintura- dijo Manuela cogiendo en brazos a esperanza que sonrió al verla
- Si paseando... Te colaste donde Susana y le diste un susto enorme a la pobre que casi se mata.- dijo Germán
- Definitivamente mi suegra regreso del más allá a bombo y platillo- dijo Maruxiña
- Abuelo Germán que la moñas está me quiere dar fruta... ¿Me la das tú?
- Si, ven osito- dijo Germán
- Y está paciente cuyo nombre se desconoce se escapó en el día de hoy del hospital Gregorio Marañón en Madrid. Es morena, pelo negro y de un metro sesenta.- decia la periodista
- ¡Mamá!- bramó Ponce boquiabierto al verlo
- ¿He sido yo?- soltó Manuela inocentemente
- Jajaja- se reía Germán
Días después de la vuelta de Manuela, todo el barrio se recuperó del regreso de Manuela en especial la propia Manuela que parecía estar encendía y tenía ganas de jugar a todas horas.
Germán que se sentía culpable por haber estado como ido esos 5 meses ignorando a sus pequeños y sus nietos se volcó en ellos.
Y Ponce por un motivo que solo él sabe empezó a actuar de forma misteriosa y a estar más serio y callado de lo habitual. Solo su madre se lo notó:
- Hijo, ¿Que tienes? Desde hace días te veo más callado de lo normal y tu que siempre fuiste muy activo es raro.- dijo Manuela
- No es malo, mamá enserio. Solo mucho jaleo en el hospital, no sé cómo pueden haber estos días tanto niño ingresado.
- ¿Seguro? Mira que yo tengo un radar...- dijo su madre
- Todo bien, enserio- dijo Ponce- ¿Hacemos palomitas?
- Vale
Tras las palomitas:
- ¡Germán! ¿Por qué lloras?
- Nada mi Manuela
- Confiesa o te doy colleja 🤣- dijo Manuela riéndose
- Es que aún me parece extraordinario que estés aquí... Un sueño. Y es que yo sin ti no puedo vivir.- dijo Germán
*Continuará*
YOU ARE READING
Esperanzas
FanfictionEn esta historia inventada sobre Germán y Manuela nada de lo que sucede podría ser como parece, ¿O sí? ¿Quieres descubrir que pasará? Adelante