Esperanzas

Capitulo 121: El regreso

- Yo espero que seaís decentes y celebreís a solas cuando todos duerman- Dijo Ponce mirando la carta- hijo sientaté.

- No

- ¿Cómo que no? 

- Si no me asiento con el abuelo Germán, no me asiento- Dijo Ángel Germán- ea

- ¿Y si tu abuelo no quiere que te sientes con él que?- Le retó su madre

- Pos me enfado- Dijo Ángel

- Mira que os gusta chinchar al pobre niño... anda mi osito comestible asientate a mi lado

- Ja ja ja os gané- Dijo Ángel

- Quiero hacer otra petición

- ¿Otra? Tío no seas pesado que quiero comer- Dijo Mari Carmen

- Mari Carmen- Le regañó Germán intentando continuar

- ¡¡Queremos comer, queremos comer!!- Estalló Germancito cantando y dando con los cubiertos en la mesa.

- ¡Basta! Sino interrumpís de nuevo quiero contar otra cosa. Mi Manuela se que ya estamos casados pero a la porra... ¿Te quieres casar de nuevo con tu médico?

- ¡Sí, por supuesto que sí!- Chilló ella besandolé con pasión

- Haber es un restaurante así que control mamá, control- Regañó Ponce

- Yo tengo una idea

- Tú das más miedo que mi madre besando con pasión... habla

- ¿Y si os casaís al mismo tiempo nuestro?- Soltó Maruxiña con los ojos brillantes- Haber me explico... os casaís el mismo día nuestro. Y Manuela entraría a la iglesia vestida de novia acompañando al animal de su hijo que también iría de novio... Por los pajes ni os preocupeís que ya tengo yo aquí voluntarios de sobra.

- Como me hagas vestir de florecilla, te enteras- Dijo Mari Carmen molesta

- Pues irás- Dijo Maruxiña ignorando por completo la cara de muy pocos amigos de Mari Carmen

- Es una idea fantástica, Maruxiña yo jamás imaginé casar el mismo día que mi chiquito

- Papá yo ya no soy chiquito

- ¿Y? Siempre lo serás para servidor- Dijo Germán callando la boca a su hijo

- Yo opino como mi médico favorito, es una idea maravillosa. Deseando estoy contarselo a todos

- Verás tú la Susana...- Dijo Ángel Germán

- Mira este... ven que te doy tu potito- Dijo Maruxiña

- Sino me lo da el abuelo no como- Dijo Ángel

- Jajaja anda trae, truhán

En la noche y mientras Germán y Manuela están en la habitación cambiandosé:

- Papá

- Dime Ángel

- ¿Y esa medalla tan bonita que siempre tienes tú y no te la quitas nunca ni para bañarte donde la has comprado?, ¿Te la compró mamá?

- No... esta medalla es un regalo muy, muy especial. ¿Sabes que pone? Pone "papá y mamá te aman" y la mando hacer el abuelo cuando yo tenía 5 años para mí. A esta medalla le debo todo... me ayudo a volver a casa...- Dijo Ponce

- ¿Y a mí no me regala una medalla así el abuelo?- Preguntó Ángel rompiendo a llorar

- Calma, calma bebé... Mañana por la mañana en el desayuno papá le dice al abuelo Germán que mande hacer una medalla súper especial para ti, ¿de acuerdo?

- De acuerdo, papi

- Uy papi... A la camita, tesoro. Buenas noches

- Buenas noches, papá- Dijo Ángel Germán

Rato después:

- Puede que Ponce ya no quiera o le guste que yo le diga chiquito- Dijo Germán cogiendo una foto de un pequeño Ponce con 3 añitos- y no importa... él siempre será mi chiquito... así tenga Ponce 100 años...

"- ¿Dónde está el niño más precioso del mundo?

- Auí- Dijo Ponce con 2 años señalandosé así mismo 

- Ven con papá. Si tu supieras cuanto te quiero...

- Yo más"

"- Papi

- Dime Ponce

- ¿Puedo dormir está noche contigo también? Dormí muy agustito y tu también- Dijo Ponce

- Por supuesto, mi chiquito. Siempre que tu quieras"

"- Germán amigo mío lo siento mucho pero todas las pruebas parecen indicar que Ponce murió el mismo día del secuestro- Dijo Méndez

- Dios mío que desgracia...- Dijo Víctor

- Germán amigo, reacciona- Dijo Leandro

- No, no, no..- lloraba Juliana

- Ponce no... tanto tiempo... mi chiquito no... ¡No! Ay dios mío no, ¡¿Por qué?! Ponce solo tenía 5 años, ¡solo tenía 5 años! Nooooooo. Me quedé solo... Ponce mi vida... Mi chiquito noooo. ¡¡Mi chiquitoooooo!!- Chillaba Germán llorando 

Y con Germán llorando por los recuerdos y quedandosé dormido en el sillón llegó el día siguiente, día en el que tocaba regresar a Acacias y a la rutina del día a día dejando atrás días de descanso, aventuras y anécdotas... Y junto a eso también se terminaba la paz para Rosina y Susana.