Quédate Con Nosotros

Capítulo 61

Romina Hoffman
26 de noviembre de 2023

Mi pequeño se retuerce en mis brazos, pidiendo que lo baje, lo dejo en el suelo, el va hacia la cama de su hermana y se sube, la pequeña al sentir el movimiento de la cama, quita sus manitas de sus ojos y lo mira.

-Malco.

Konrad y yo reimos al escucharla, vemos como va hacia su hermano y lo abraza fuertemente.

-Helmanito te agualde una galleta que tome de la cocina, pelo no ligas nada.

Tapo mi boca para no soltar una risita, Konrad me susurra al oido.

-Si es igualita a ti, robandose las galletas de los demas.

Lo fulmino con la mirada, lo dice solo porque le robe una pequeña galleta que le hizo nana Erika.

Te comiste todo el tazon de galletas, puerca.
Conciencia metiche.

Salgo de mis pensamiento cuando escucho a mi hijo.

-Tengo una sorpresa para ti.

Los ojos de mi hija brillan con felicidad.

-Que es?

-Voltea hacia la puerta.

Mi pequeña frunce el ceño sin entender, pero voltea hacia donde estoy, abre mucho sus ojos y su boca con asombro, suelta un chillido y baja rapido de su cama, me agacho cuando viene corriendo hacia mi, cuando al fin siento su cuerpo junto al mio, lloro sin poder evitarlo. Tanta noches pensando en como hubiera sido mi bebita, en como seria tenerla entre mis brazos, al fin puedo sentirla.

-Mami, al fin veniste por nosotros.

-Si mi pequeña Luna, al fin.

-Me llamó Luisa, no Luna.

Me río ante su voz indignada.

-Lo se, pero a tu hermano lo llamo mi pequeño sol y tú eres mi pequeña luna, porque ambos iluminan siempre mi vida.

Se separa de mi para poder verme, con sus dedos limpia mis lagrimas.

-No lloles, no guta que lloles.

-Es que te extrañe mucho mi bebita.

-No te volvelas a il veldad?

-Nunca más.

Ella ve detrás mia, se esconde en mi pecho al ver a Konrad.

-El es Konrad, el tenia muchas ganas de conocerte.

Ella le da un pequeño saludo con su manita, llamo a Marco para poder ir hablar con la directora y poder irnos.

-Mi pequeño sol, dejas que Konrad te cargue, en lo que yo llevo a tu hermanita?

El mira a Konrad con desconfianza.

-Quieres ir en mis hombros, pequeño?

Tal parece que esa idea le gusta, asiente efusivamente y Konrad lo sube a sus hombros, agarro a mi hija y nos vamos hacia la oficina, veo como Luisa juega con mi pelo maravillada.

Llegamos a la oficina y firmo todos los papeles necesarios, ya esta la cita programada para irnos hacer la prueba de ADN hoy mismo, la señora que mas cuido de mis hijos, nos ve con una sonrisa cariñosa. Ya en el carro llevo a los dos sobre mis piernas, ellos van jugando con mis dedos.

-Ellos nos querran?

Frunzo el ceño ante la pregunta de Marco.

-Quienes mi amor?