Quédate Con Nosotros

Capitulo 40

Konrad Hoffman
27 de septiembre de 2023

-Ah Konrad...

Solo ese pequeño gemido bastó para seguir, vuelvo a besar sus labios y tomo sus piernas para que las enrolle en mi cintura, ella deja mis labios para besar y chupar mi cuello sacandome un leve gruñido de placer.

Me separo para poder verla solo con unas bragas de color celeste, color que se ve perfecto en su piel.

-Aun estás a tiempo para detenerme Ángel.

-No quiero detenerte.

Ella se hinca en mi cama y quita mi camisa, sus dedos acarician mis torso, baja lentamente hasta la cinturilla de mi pantalón de pijama y lo baja junto con mi bóxer, se queda maravillada viendo mi polla.

La recuesto en la cama para quitar sus bragas, abro sus piernas para acomodarme, soltamos un gemido cuando nuestros sexos se tocan sin ninguna barrera de por medio, la beso mientras una de mis mano caricia su pezon, bajo lentamente por su vientre hasta llegar a su vagina, ella rompe nuestro beso para poder gemir cuando acaricio su clitoris, meto dos dedos en su vagina.

-Oh...si por favor no te detengas.

-No lo haría ni aunque me lo pidieras.

Aumentó mis movimientos haciendo que arquee su espalda, meto uno de sus pecho a mi boca, detengo el movimiento de mis dedos haciendo que ella se queje.

-Mírate, eres un ángel y ahora estás aquí, en mi cama, bajo mi cuerpo, me gusta corromperte angelito.

Sus ojos se dilatan más por la excitación, entierro mi cara entre sus piernas, lamo y succióno su clitoris haciendo que gima más fuerte, su mano sostiene mi pelo como si quisiera evitar que me separe de ella, logro hacer que se corra en mi boca. Meto mis dedos una vez más en su vagina para luego acercarlos a su boca.

-Sabes delicioso, chúpalos.

Pongo los dedos que estuvieron en su vagina en su boca, ella los chupa con deleite, mierda es la mejor vista que e tenido en toda mi vida. Ahí es donde me doy cuenta de algo, no tengo condones, no tengo aquí ya que no traigo a ninguna mujer a la casa donde viven mis hijos.

-Joder no tengo condones.

Estoy por separarme de ella pero sus piernas en mi cintura lo evitan.

-No lo haré sin protección angelito.

-Tengo la inyección, aún no quiero quedar embarazada tampoco, pero soy muy activa en el sexo y los condones nunca son 100% seguros.

En parte me alivia eso y por otra parte detesto saber que le encanta el sexo, significa que se acosto con varios.

"Y tú qué te quejas, si cogias con una diferente cada día"

Maldita conciencia.

Me acerco a besarla, con paciencia y amor, la beso lentamente disfritando de tenerla asi, que me acarcie con tanto cariño. Ninguna mujer me habia acaricidado con tanta lentitud y demostrando su amor a traves de unas simples caricias.

-Te hare el amor primero, luego te follare como un loco obsesionado por ti, toda la noche.

Colocó mi polla en la entrada de su vagina y me voy metiendo lentamente, los dos gemimos fuerte ante la sensación de estar unidos.