Mi mundo💹[T.1]

Capitulo 67.

¿Por qué sueño esas cosas?.

Me levanto con rapidez de la cama para salir de la cama y voy con miedo a la habitación de Ethan. Entró con cautela y le veo durmiendo con tranquilidad. Suspiro quitando todas mis preocupaciones, me siento a su lado mientras le acaricio el pelo. El sueño me ronda en la cabeza, espero que mi sueño no se haga realidad y que no seas tú...

Será mejor dejarlo descansar, dejó de tocarle el pelo y me levanto de la cama, pero su mano me coge la muñeca haciendo que me vuelva a sentar.

¿Estás aquí o es un sueño? —pregunto un poco adormilado y abre los ojos levemente, me hace sonríe, qué lindo.

Descansa —digo con una voz suave para que se duerma y se acomoda mientras bosteza y sus ojos grises se abren del todo.

Luna me alegra que estés aquí conmigo —dice con menos preocupación.

Ethan, yo...-digo cabizbaja pero me interrumpe.

No hace falta que digas nada, fui un egoísta conmigo, pero no quiero perderte, haberme avisa y te ayudaba —dice mirándome fijamente.

Perdona —digo con culpa mientras bajo la cabeza.

Lo que importa es que estás bien, eso es lo importante —dice una pequeña sonrisa y asiente un poco cabizbaja— Hay algo que me preocupa, no te lo guardas.

Mis sueños Ethan —digo levantando la cabeza con una mueca de preocupación.

¿Qué soñaste? —pregunta mirándome fijamente.

Vi como estaba arrodillada con un cuerpo encima lleno de sangre y no sé cómo explicarle, pero sintió su dolor y una figura blanca, es la que me da fuerzas en no rendirme en su momento —hago una pausa y me da ánimos con la mirada— Me dijo "el sentimiento te hace suicidarte por lo que más quieres, no te pongamos en peligro si no el desastre hará el caos en el mundo"

Luna, pequeña— dice abrazándome— Solo es un sueño, no te preocupes.

No, Ethan, cuando sale de aquel hospital, ese sueño se repetía en mi cabeza, vi el momento de que me cansé por el acantilado, no tan cuál, pero vi un cuerpo encima de una piedra y la pesadilla del lobo era el acto de tanto miedo fui corriendo sin mirar y caí en su oscuridad —digo asustada y se separa para mirarme con seriedad.

Casualidad, no te preocupes —dice quitándole importancia mientras suaviza su gravedad y me coge de la mano.

¿Seguro? —pregunto buscando un agujero por donde escapar de mi preocupación.

Si luna, llevas una época muy loca, es normal que tengas pesadillas, por eso no te quería decir nada de los peligros que tenemos encima —dice dándome tranquilidad y asiento un poco más tranquila.

No me oculta nada, por favor —digo susurrando un poco y asiente mientras pone su frente contra la mía. Sus dedos me tocan por encima del raspón con suavidad.

No volverán a ponerte un dedo encima —dice dejando de tocarlo y me da un beso en la frente— Te amo mi luna.

Exagerado —digo riendo provocándolo un poco y levanta una ceja, le saco la lengua y se tira encima de mí haciéndome costillas— ¡Para, para!

No, hasta que me digas algo —dice burlón y niego mientras me río. El dolor de tripa de tanto reírme hace que deje de hacerlo y estoy muy agitada y me da un beso en la mejilla— Que linda verte agitada.

Ethan —digo mirándole con algo de seriedad y me pellizca la mejilla.

No te sale la seriedad, nena —dice burlón con mucha diversión.

No soy un ogro como tú —digo picándole un poco.

¿Así? —pregunta con ironía mientras le enfrentaba— Y este ogro te tiene como una reina.

Si sí —digo con diversión mientras le suena y me da un beso en la mejilla.

A entonces no te digo una cosa —dice haciéndose el interesante.

¿El qué? —pregunto con curiosidad y levanta una ceja.

Ahora sí, no —dice con picardía.

Anda dímelo —digo poniéndole pucheros y rueda los ojos con un poco de gesto de derrota, se acerca a mis labios pegándolos con suavidad y se separa a los segundos a milímetros y sonríe.

Mi luna, ¿quieres ser mi novia? —pregunta sonriendo y abro los ojos de sorpresa, no me lo esperaba, se separa para mirarme a los ojos y sonríe muy divertido— Te comido la lengua el gato, nena.

Mmm —digo un poco colapsada, me incorpora un poco sentándome a su lado y me coge las manos dándoselas un beso— Sí —digo sonriendo, le doy un abrazo, cogiéndome de la cintura y me sienta en su regazo. Me apoyo en su hombro mientras la felicidad me invade todo el cuerpo.

En un rato viene Lila con los peques —dice con alegría y me separo para mirarlo.

¿Así?, ¿y eso? —pregunto extrañada.

Tenemos que hablar de la situación, actuar para tener más opiniones —dice con sinceridad.

Vale —digo sin mucho más y le doy un beso en la mejilla, confió mucho en él.

No te puedo mentir, estoy ampliando la seguridad —dice informándome con algo de seriedad— todo por ti y por Kaia.

¿Qué pasa con Kaia? —pregunto con curiosidad.

Mi hermana tuvo muchas complicaciones con ella en su embarazo y cuando nació, algo paso, no sabemos como paso, pero es muy especial la pequeña. Cuando nació su aura no era de loba, era de humana, pero es imposible por los genes de los dos. A los dos años cambio sin tener mucho sentido y surgieron las pesadillas que la atormentan todas las noches, pero llegaste tú y se las calmaste de un momento al otro.

Ethan no será que sus pesadillas son como las mías —digo sospechando y su mirada me mira con seriedad— Y si su don es ver el futuro o algo así.

Puede, pero la duda de todo es el porqué lo sueñas tú —dice mientras mira a un lado con duda.

Esos tipos de sueños son desde que vine aquí, antes eran sueños sin más, pero desde que vine aquí se enlazan con los sucesos —digo muy pensativa.

Voy a llamar a la bruja, pero primero vamos a ver a mi hermana que está abajo —dice con seriedad y asiento, antes de bajarme de encima de él, le doy un pequeño beso.

No será nada —digo quitándole importancia y asiente.

Espero que mi teoría no sea cierta —dice susurrando con los ojos oscurecidos.

No pienses tanto, vamos —digo quitándole importancia y me levanto encima de mí y después levantarnos de la cama.

Nos dirigimos a la puerta de la habitación y antes de abrir la puerta me coge la mano y después abre la puerta y nos vamos en dirección a las escaleras, las bajamos y me dirige al salón. Vamos a Lila con Kaia en su regazo mientras le pone dibujos en el móvil.

Hola, melli —dice el pelinegro haciendo que levante la mirada del móvil.

Hola, chicos —dice sonriendo mientras nos miramos a los dos.

Titos —dice al escuchar la voz de su tito y levanta la mirada del móvil. Se baja del regazo de la madre acercándose mientras corre a nuestra dirección. Abre los brazos, el pelinegro se adelante y la coge en brazos.

Mi nena —dice Demon con una sonrisa y le abraza el cuello con emoción.

Vamos a hablar —dice Lila levantándose del sofá con un poco de seriedad, como no, la familia de la seriedad.

Me voy con la nena al jardín, hablar aquí tranquilos —digo cogiendo a Kaia de sus brazos y me abraza del cuello.

Ten cuidado, estará atento —dice mentalmente con preocupación, sé que no le gusta verme fuera.

Que si alpha, solo estará en la hamaca —digo en mi mente conectando mi mirada con la suya, quitando la oscuridad de sus hermosos ojos amarillos...

Continuará.