Sakura no se quedaría de brazos cruzados sabiendo que su esposo había desaparecido y su hijo corría peligro debido a la locura de Kawaki, ese mal agradecido.
Por tal razón optó enfrentarlo en un determinado momento, aprovechando que su hijo estaba junto a Sasuke entrenando.
Kawaki estaba frustrado debido a que no le resultaba posible matar a su hermano, así podría traer de regreso a su padre sin problema alguno.
Cuando se disponía a atacarlo otra vez, Sakura apareció arruinandole los planes. Ella usó su fuerza bruta para atacarlo, pero Kawaki pudo esquivarla justo a tiempo viendo cómo despedazaba el suelo.
En verdad ella es poderosa, si me dá me mata.
—¡¿Qué hiciste con mi esposo?! ¡Responde maldito desagradecido! ¡¿Dónde está Naruto?!
— A salvo de Boruto, ya lo dije antes. En cuanto logre matar a mi hermano traeré al Septimo. En tanto se encuentra protegido en una dimensión que solo yo tengo acceso.
—¡No dejaré que dañes a Boruto! ¡Trae de regreso a mi esposo! — ella se lanzó a Kawaki otra vez — ¡Maldita sea!
Pero Kawaki volvía a esquivarla, al comprobar que Sakura no hacía el intento de entenderlo siquiera, tomo la decisión de acabar con ella de una vez por todas.
— Lo lamento Sakura, en verdad siento tener que hacerte esto pero...todo sea por el Séptimo y su seguridad.
Diciendo aquello le disparó una gigantesca bola de energía roja que despedazó a Sakura en un solo instante, cayendo al suelo sin vida alguna.
En ese mismo instante la aldea se sacudió padeciendo los efectos de dicho ataque a su vez. Repentinamente el chakra de Sakura dejaba de existir en éste mundo e Ino fue quien dió la alerta.
No solo fue Naruto sino que ahora también se trataba de Sakura, su esposa. Shikamaru ordenó a los Anbus y demás ninjas ir por Kawaki de forma inmediata.
No entendía cómo es que tras la desaparición de Naruto, él seguía libre.
— ¿Cómo pudo escapar Kawaki siendo que lo teníamos sedado y maniatado? — decía Shikamaru — De seguro hay un espía entre nosotros.
Decía Shikamaru a Sai para que lo investigue más adelante, ahora quedaba atrapar a Kawaki y averiguar qué fue de Sakura. Pero la noticia de su muerte pronto llegó a ellos, asombrándolos a todos.
Sakura había sido asesinada por Kawaki, aquel que hasta no hace mucho solía llamarla madre.
—Boruto, encuentren a Boruto antes de que se entere de todo por el propio Kawaki — ordenó Shikamaru a Sai y a Konohamaru.
En esos segundos el rubio se encontraba junto a su maestro Sasuke entrenando para seguir con la transformación del Karma en blanco, cuando sintieron una explosión que los alertó.
Kawaki apareció en esos momentos usando el poder de Isshiki en Boruto y Sasuke. El rubio alejó a su maestro de un empujón de dicho ataque justo a tiempo.
—Dejate matar hermano, solo así podré traer de regreso a nuestro padre — decía un Kawaki loco.
— Creí que estabas encerrado y sedado — exclamó Boruto — ¿Cómo demonios escapaste?
Sasuke lo atacó otra vez pero Kawaki lo esquivaba con fascilidad. — Tuve que matar a tu madre Boruto, por el simple hecho de no entenderme.
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