Shikamaru entró en esos momentos seguido del cientifico y de Boruto. Ya tenían la información completa de Amado. Ahora restaba que Konoha empiece a desgranar mas aún esa ciencia.
Shikamaru le ordenó a Sai llevar a Amado a la prisión de máxima seguridad de Konoha, mientras Sasuke se llevaba a Boruto para empezar a trabajar en su Karma.
- Boruto, estoy seguro que podrás deshacerte de Momoshiki convirtiendo tu Karma negro en blanco.
Boruto escuchaba a Momoshiki burlandose de su persona y de los demás. Le decía continuamente que lo perdería todo y que ya había empezado.
Por tal razón las palabras de aliento de su maestro eran muy importantes para él.
- Maestro, ayúdeme por favor. Ayúde a mi mamá a no deprimirse ni a hacer locuras, ahora que mi papá desapareció. Yo...no soportaría perder a nadie más. Además Momoshiki....él...él me...
- Te tortura continuamente ¿verdad? - dijo Sasuke hecho que asombró a Boruto quien lo miró a los ojos - No le prestes atención Boruto, se que es una difícil labor para tí debido a que lo llevas dentro, pero piensa en tus padres, en tus amigos, en la aldea. Todos contamos contigo.
Boruto corrió a sus brazos ya que se sentía desolado luego de la traición de aquel que había llegado a querer como un hermano. Y de la desaparición de su papá. En verdad temía no volver a verlo nunca más.
Sasuke lo abrazó fuertemente intentando reconfortarlo. No dejaría que se deprima ni le permitiría al maldito de Momoshiki ganar. Boruto era demasiado importante para él.
- Necesitas ese Karma blanco Boruto, y te ayudaré a conseguirlo. - Gracias maestro. Muchas gracias.
El rubio volvía a recuperar el optimismo y la alegría de siempre. - Tú sigue con ese espíritu que tienes lleno de luz y verás que la victoria estará de tu lado.
- Si - contestó felíz Boruto haciendo que Sasuke recuerde a Naruto. Ambos eran idénticos, ésto lo hizo sonreír.
Eres un ingenuo muchacho, todos lo son en realidad. Jamás conseguirás cambiar mi karma. Así que todos tus esfuerzos serán inútiles.
Sigue ladrando maldito parásito. Tus días en este mundo están contados. Pronto te sacaré de mi cuerpo a la fuerza.
Lo perderás todo muchacho, sigo viendo tu destino claramente.
Recuerdo que antes de meterte en mi cuerpo me dijiste que era inmaduro ya que no podía ver mi destino. Al decir destino hablas del futuro. Significa que con mi Jogan podré ver el futuro como lo haces tú.
Momoshiki enmudeció ocultandose en un rincón de su conciencia, debido a que Boruto dió en la tecla y al Ootsutsuki no le convenía que el rubio pueda ver su futuro, ya que si lo lograba todos sus planes acerca de revivir estarían arruinados.
Boruto sonrió complacido al ver aquella actitud de Momoshiki.
Con que el Jogan tiene esa peculiaridad también ¿eh? Interesante. Pronto descubriré cuál es la imagen del futuro que viste en mí. Y te aseguro que lo cambiaré maldito parásito infernal.
Muy optimista viniendo de quien tan solo es un cascarón vacío, debido a que yo tengo el control sobre tí.
Ya quisieras maldito enfermo que se niega a dejar este mundo. Tu poder me será muy útil sin tu maldita presencia. Así como Isshiki tuvo que resignarse e irse, a tí te pasará lo mismo.
No muchacho, estás recibiendo tu castigo por haber osado enfrentar y matar a un dios. Estas son las consecuencias.
Ustedes jamás fueron ni serán dioses malditos aliens dementes. Ahora cierra el pico.
Boruto utilizó su fuerza mental y espiritual para fortalecer su propio chakra y encapsular a Momoshiki dentro suyo amordazandolo.
Elegiste mi cuerpo y fue tu perdición. Te mantendré a raya dentro de mí donde no podrás seguir lastimando a nadie más y tampoco podrás controlarme.
Deseas saber cómo llegar a tu...padre ¿verdad?
Nada tienes que ver con eso, ya buscaré la forma de ir por él sin tu interferencia. Ya no funcionan tus jueguitos conmigos Momoshiki.
Sasuke era testigo de este emfrentamientos entre Boruto y Momoshiki en su propia mente y cuerpo.
Vió como repentinamente el rubio envolvió a Momoshiki con las doradas cadenas de los Uzumakis que en esos instantes pudo sacar de su propia luz interior.
El Ootsutsuki por más que intentó evitarlo nada logró. Fue envuelto irreversiblemente por esas poderosas cadenas y enviado a un rincón de su mente donde lo aprisionó.
Ahora Boruto se encontraba de pie frente a Momoshiki quien permanecía en el suelo sin poder moverse ni mucho menos soltarse. El cansancio se fue apoderandose del Ootsutsuki hasta caer en la inconsciencia.
Boruto abrió los ojos en esos momentos. Estaba agitado, respiraba entrecortado debido a la intensa batalla mental que acababa de sostener.
Sasuke lo contemplaba asombrado, debido a que jamás se habría imaginado que su discípulo fuese tan poderoso.
Ambos miraron la palma derecha del rubio comprobando que el Karma había dejado de ser negro para volverse gris plateado. Lo había logrado. Al fin pudo conseguirlo.
- Pero es momentáneo maestro ya que Momoshiki aún sigue dentro de mí. Además aún no es blanco.
- Sin embargo es un gran logro de tu parte Boruto. Tú puedes.
- Mientras te tenga a tí, a mi mamá y a mis amigos siento que podré lograrlo. Podré salvar a papá y destruir a Code definitivamente.
- Así es, vayamos con tu madre que debe estar muy preocupada. - Sí - la alegría de Boruto era su secreto para poder mantener a Momoshiki encerrado en su propio cuerpo totalmente inmovilizado.
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