This love ❑ Pedri González. ✓

XXIV

Capítulo veinticuatro
-Gánatelo-
Barcelona 13:00

Salgo de las instalaciones a un paso más apresurado de lo normal, con el corazón en la boca y latiendo a mil por hora. Había formado miles de teorías en Tenerife, buscando un porqué, un por qué de repente me dejó por ella, y hoy, por fin lo tengo, y no es ni de cerca a ninguno que me había imaginado.

Los primeros meses, pensé que yo era una mierda, que era tan insuficiente como para que él, a mis espaldas, buscara a otra. Luego, sobre el cuarto/quinto mes, mi mente maquinó que ellos estaban juntos en secreto y yo simplemente fui una tapadera. Por último, en los últimos meses, cuando empecé a tener una mejoría notoria en mi bienestar psicológico, simplemente acepté que él la quería a ella, y contra el querer no puede luchar nadie.

Pero no, no es ninguna de esas opciones y, sinceramente, no sé si sentirme feliz por saber la verdad de una vez y que él me quiera o, por otro lado, sentirme triste porque tuvo que abandonar su felicidad por mi.

Cuando llego al parking dejo de andar, planteándome cómo actuar. Estoy entre dos opciones, o darle una hostia por haber sido tan gilipollas de no haberme hablado en el momento para buscar una solución, o abrazarlo y llorar como una endemoniada porque, realmente, sí me quería.

Sonrío al pensar bien mis opciones y no decidir ninguna de esas dos, sino una mejor.

Camino hasta él y, cuando llego a su lado, está muy ocupado bloqueando a Andrea de todos lados como para darse cuenta de mi presencia. Como aparezco detrás de él, puedo ver exactamente como ella le envía un último mensaje "Pues vete a la mierda", a lo que él simplemente lo ignora y la termina de bloquear. No me culpen por cotillear, ustedes hubieran hecho lo mismo.

-Pepi.- lo llamo tocando con mi dedo su hombro, haciendo que se gire y guarde el móvil. Tiene muchísimas emociones en sus ojos, no sé cómo explicarlo. Me mira con amor, con nostalgia, con inseguridad.

-Lunita, ¿Bien?- me pregunta y yo me aguanto las ganas de levantar una ceja. Vamos Sara, tienes que intentar que parezca que aún no lo sabes.

Sí, quiero probarlo a ver qué hace, no puedo evitarlo.

-Sí, hablé un rato con mi familia y vine a buscarte. ¿Tú?-

-Oh, bien.- se lleva una mano a la nuca y abre la boca para decir algo, pero vuelve a cerrarla, dudando.- ¿Vamos a mi casa? Me han dicho que hay una nueva película en Netflix que está muy guapa.- oh no, estoy muy cabreada ahora mismo.

-¿Seguro? ¿No quieres hacer algo antes?- le doy una última oportunidad, pero él niega.

-¿Qué te apetece a ti?- se me ha acabado la paciencia.

Me acerco a él y le doy una cachetada bien dada que le gira la cabeza. Estoy muy enfadada, y además, ya se la debía de antes.

-Pues decidirte a contarme que nunca quisiste dejarme y que la loca te amenazó, por ejemplo.- me cruzo de brazos y levanto la cabeza. Será idiota.

Veo cómo palidece y abre los ojos. Se queda en shock y yo me cabreo más, joder Pedri, haz algo, muévete.

Parece que me ha escuchado cuando me abraza directamente, escondiendo mi cara en su cuello. Él acerca su nariz a mi pelo y besa repetidas veces mi cabeza, cerrando los ojos. Yo lo abrazo de igual manera, con fuerza y dejando que mis ojos se llenen de lágrimas.

-¿Por qué no querías decírmelo, pedazo de idiota?- lo empujo levemente para luego volverlo a acercar a mí para seguir abrazados.

-Pensaba hablarlo en mi casa, donde estuviéramos más cómodos y no tuvieras tanto espacio para matarme.- suelto una leve risa seguida de la de él y termino de relajarme completamente, separándome de él.

Baja la cabeza con intenciones de besarme y yo lo freno, poniendo mis dedos en sus labios y negando con la cabeza.

-Gánatelo.- él me mira confundido y yo sonrío tiernamente.- Que siempre me hayas querido y que te hayan amenazado no quita que no pensaste en hablar conmigo primero, mucho menos quita las lágrimas que derramé durante meses. Así que, si me quieres, vuelve a enamorarme. Solo si estás dispuesto claro, sino no pasa na…- me interrumpe.

-¿No querer? Lunita, AMOR MÍO, estuve aguantando a esa tía meses para que tú tuvieras tu sueño.- remarca ese apodo con una sonrisa triunfadora.- Volveré a enamorarte si así lo quieres.- me señala con el dedo, acusándome.- Eso sí, exclusividad en el proceso y, obviamente, después.-

Yo no puedo evitar soltar una carcajada ante sus celos. Muerdo mi labio, pensando, ¿Por qué no celarlo un poco más?

-Que pena, había quedado con Harry esta tarde.- se separa de mí con una mueca y los celos reflejados en los ojos.

Yo comienzo a reírme como un carajo y él me mira con confusión.

-¿Qué es tan gracioso?- levanta una ceja y yo pongo mis manos en su nuca, colgandome de su cuello mientras dejo mi cuerpo sujeto solo por un pie, levantando el otro.

-Tus celos, chico bueno, tus celos.- ruedo los ojos.- No seas bobo, pues claro que habrá exclusividad. Que te lo tengas que ganar no quita que seas el amor de mi vida.-

Sonríe como si se hubiera ganado una champions y el mundial al mismo tiempo. Me coge de la cintura y me empieza a dar besos repetitivos en la mejilla, causándome cosquillas bobas, como cuando tenía quince años.

Me río levemente cuando él se aparta y pega su frente a la mía. Cierra los ojos y, tras pensarlo un poco, habla.

-¿Puedo decirte algo?- asiento levemente sin despegar nuestra frentes juntas.- ¿Recuerdas…- empieza pero se frena para tragar saliva, intentando quitar el nudo de su garganta.- ¿Recuerdas el día que todo pasó?- volví a asentir.- Me dijiste que mirara la Luna cada vez que me sintiera perdido. Y así lo hice, la miré todos los días, incluso sacaba fotos de ella para cuando fuera luna nueva y no pudiera verla en el cielo.-

-¿Y ahora?-

-Ya no la miraré más, a no ser para mirarla contigo a mi lado, lunita.- me roba un pico y yo me separo totalmente, dándole una leve colleja de broma, sacando una carcajada por su parte.- Lo tenía a huevo, lo siento.-

-Idiota.-

-Pero te ha gustado, admítelo.-

-Sí, lo admito, pero que no vuelva a pasar.- lo regaño en tono de broma, jamás me incomodaría un beso suyo.

-No te prometo nada, amor.- me guiña un ojo, sonriendo de esa manera que solo él sabe hacer.

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LUNITA Y EL CHICO BUENO HAN VUELTO 😭😭😭😭😭😭😭😭😭✨✨✨✨✨✨✨.

Voten porfis.

Los cheruuu.
Se despide,
-G.