Capítulo 8

1.2K 131 0
                                    

...Ambos viajaron a otro lugar, por medio del poder de teleportarse. Damian quedó asombrado por dicho acto y retrocedió un poco. Observó a Lyceth, quien le sonreía diciéndole
" de nada". El chico apuntó con sus armas a su salvadora y ella lo miró con una de expresión de "¿enserio?". Lyceth sacó su cuchillo y lo pasaba entre sus dedos, como un tipo de juguete.

-¿Quieres pelear, niño bonito? Y después que salvé tu vida, ¿me pagas así?

-Tonta.-dice bajando sus armas y caminando dando la espalda.

-¿A dónde vas?-pregunta molesta.

-No quiero quedarme con una psicópata.

-Idiota.-susurra.-Sé lo que te sucede.

-Me alegro por ti ¿Puedes adivinar el número para ganar la lotería?-pregunta burlón.

-Ahora si acabaste con mi paciencia. -corre donde Damian y salta sobre él. Ella montaba su espalda mientras le colocaba el cuchillo en el cuello.

-¿Vas a matarme? No valió la pena salvarme.-dice sonriendo.

Él tomó un impulso y empujó a la chica. Ella se golpeó la cabeza con una roca. Observó su mano la cual tenía sangre al tocar la herida. Hizo un movimiento con el cuello y miró amenazante a Damian. El chico le sonrió mientras giraba sus armas en su dedo índice, de cada mano. La chica desapareció y estaba detrás del chico. Le tocó el hombro y con una patada, Damian se golpeó la espalda con un árbol. La chica le lanzó el cuchillo y éste penetró la mano de él. Damian maldecía por el dolor.

-Escucharme primero y maldecir al final.-dijo Lyceth tocando el cabello de él.

-¿Ahora qué?-le hala el cabello a Lyceth para preguntarle en su oído. -¿Ganaste, niña bonita?

-¿Qué?-una flecha atraviesa su corazón.

Zack había llegado y tenía altas esperanzas de ver a Lyceth. Katya y él habían mejorado en su relación como hermanos. Después de todo admitieron que nadie tuvo culpa de la muerte de sus padres. Fueron al bosque ya que tenían contactos, los cuales sabían la ubicación actual de Christian. Encontraron la manada y ambos pasaron a hablar con el alpha.

-Alpha.-dijo Zack y aquel hombre asintió.-Necesito una ubicación.

-¿De quién?

-Christian Blood.

-Necesito saber, ¿para qué desea encontrarlo?

-Mi chica, está con el maldito. Él se la llevó y necesito su compañía. Tengo un mal presentimiento.

-Los antiguos ancestros me piden leer su futuro, por advertencia. Luego le pasaré la información.-dice el anciano.

-Bien, haga lo necesario.

-Traigan un venado.-en minutos lo colocaron.-Tu corazón.-dice sacando el corazón del venado.-Revela dolor, amor y felicidad. Tus sentimientos te llevaran a una relación fuerte.-Tu sabiduría, salvará a otros. Tendrás descendencia y una de ellas terminará como todos nosotros. Morirás en una guerra salvando la vida de otro. Debes tener cuidado Zack.

-¿Si?-dice dudoso.

-No dudes del futuro, las cosas pueden cambiar. Ahora, aquí tienes la dirección.

-Gracias.

-Y Katya...-se dirigió a la castaña.-Las sorpresas son parte de la vida, gracias a ello tendrás un buen futuro.

-Tendré sus palabras en cuenta. -responde con una media sonrisa.

Ambos hermanos se fueron de la manada y se transformaron en su forma lobuna. Los dos llevaban en sus hocicos las mochilas con alimento y ropa. Corrían sin parar, además, pensaban en lo que les había dicho el anciano. Katya había olfateado un vampiro, lo cual indicaba que estaban cerca de su destino. La criatura fría se tropezó con una rama y cayó en frente de los lobos.

Mi ProtectorWhere stories live. Discover now