EL REGRESO A ITALIA

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NOAH WATSON

1 mes después.

Tengo que regresar a mi país la próxima semana, así que debo de aprovechar muy bien el tiempo que me queda aquí, durante no esté en el país vendrá mi primo Carlos Lombardi a hacerse cargo de mi trabajo junto con Pietro.

Voy a extrañar a algunas personas de la empresa, también a mi nana que se quedará aquí porque en un mes regresaré, y no es necesario que ande conmigo para todos lados, lo bueno es que veré a Paola para aclarar mis sentimientos hacia ella, cada día me siento más inseguro con respecto a nuestra relación.

En este tiempo que he estado lejos de ella me doy cuenta de que no le he extrañado tanto, sí como amiga, pero como mi novia... la verdad no estoy seguro.

Hoy iré al templo a hablar con los jóvenes de la iglesia y decirles que me iré pronto, he hecho muy buenos amigos ahí, incluso con Wendy, con  Abraham y Luis tengo más conversaciones, con Ruby me siento bien el único problema es que ella es más callada.

Ya es hora de marcharme, como siempre voy con mi traje, está vez voy con una camisa manga larga de color blanca, un pantalón azul y el saco del mismo color, mis zapatillas de cuero, mi corbata y reloj.

Ya en la iglesia, el grupo de alabanza empezó a cantar, las alabanzas eran  hermosas, después el líder de los jóvenes comenzó a hablar hacerca de el verdadero amor en el evangelio de Juan 3:16. Para ser sincero, me gustó el mensaje y estoy dispuesto a dar todo por Jesucristo, en este tiempo es muy difícil ver a un joven que pronto será dueño de varias empresas sirviéndole a Dios, sé que es difícil y requiere sacrificio pero yo quiero asumir el reto.

En este momento me dirijo al grupo de jóvenes para darles la noticia de mi partida y aprovechar de decirle a Ruby, ya que aún no lo sabe, en realidad nadie lo sabe a excepción de Pietro.

—Dios les bendiga chicos... quiero decirles que la próxima semana me iré del país por un mes, la verdad es que me he sentido muy bien aquí y espero verlos cuando regrese.

—nosotros te vamos a extrañar también —dijo el líder de los jóvenes.

—está bien, pero no dejaremos que te vayas así nada más, tenemos que ir a almorzar todos juntos, ¿no es así chicos? —dijo Abraham a todo el grupo.

—¡si! —dijeron todos al unísono.

—¿Vendrás Ruby? —interrogó Abraham.

—no sé si podré.

—¡vamos, no seas aburrida!— exclamó Abraham con una sonrisa burlona.

—está bien, sólo si va Stef.

—si claro que voy, jamás me lo perdería —dijo la aludida.

—ok chicos, mañana todos después de la dominical, ,nos vamos a almorzar.

Todos asentimos y cada quien se marchó a sus casas.

...

Hoy es domingo, me estoy terminando de vestir para ir al templo y aprender mucho más de la palabra de Dios.

La dominical estuvo muy interesante, ni hablar de la enseñanza, todo lo que Dios hace es perfecto, ahora estamos esperando a algunos chicos para irnos al restaurante en el que almorzaremos.

El restaurante es bonito, tiene mesas y sillas de madera, hay muchas plantas.

Hacemos nuestros pedidos y a los minutos nos traen nuestra comida, cabe recalcar que es típica de Nicaragua.

Hablamos de temas triviales y de nuestras experiencias en la iglesia, les agradecí a cada uno por recibirme en este país y también le agradecí a Abraham por convertirse en mi amigo, también le agradecí a Ruby porque a demás de ser de gran ayuda en la empresa es una persona admirable.

Sentí un vacío al dejar a todas estas personas, de alguna manera se volvieron importantes para mí y una parte de mí quisiera quedarse, pero tengo que cumplir con mi trabajo, ojalá este mes que estaré ausente pase muy rápido.

...

Llegó el viernes y es hora de partir, mañana vendrá mi primo a hacerse cargo de la empresa mientras yo no esté, voy a extrañar mucho a todos, sé que no le agradecí a nadie en la empresa pero la verdad es que todos han sido muy eficientes, voy a echar de menos a Ruby, al principio no hablábamos mucho, pero en esta última semana he descubierto una parte de ella que no conocía, es muy divertida cuando ella toma confianza, no tanto conmigo, la he observado, la invité a almorzar ayer para despedirme. Le he tomado un cariño especial.

FLASHBACK

señorita Ruby, ¿le gustaría almorzar conmigo?inquirí, nervioso.

¡Por qué estoy haciendo esto, Dios mío!

si, si es algo de trabajo.

no, no tiene nada que ver con el trabajo, es sólo para agradecer su desempeño laboral al encargarse de mi agenda.

—está bien — dijo, confusa.

A la hora del almuerzo salimos al restaurante, ordenamos lo que comeríamos y aproveché para comentarle algunas cosas.

—Muchas gracias Ruby por ser mi asistente durante la ausencia de Silvia, ¿No te molesta que te llame por tu nombre? ¿Verdad?— le pregunté nervioso, ya se lo he preguntado muchas veces porque me preocupa que no le guste la confianza que le tengo— Después de todo no te considero solo mi empleada, si no también una amiga.

—no se preocupe, puede llamarme como guste.

—me podrías llamar por mi nombre también, cuando me dicen usted me siento mayor y no me gusta.

—sería algo raro, pero lo intentaré.

FIN DEL FLASHBACK

Aprovechamos de hablar de algunos temas, desde que tuvimos ese almuerzo con el grupo de jóvenes de la iglesia, nos hicimos amigos, no taaaan amigos, pero si había más confianza entre nosotros y aproveché para comentarle que Silvia regresará a su puesto el lunes y que ella regresará a sus actividades normales, aceptó y me despedí de ella, ya que se negó a que la llevara a su casa.

...

Justo ahora estoy en mi país, llegué ayer por la noche, estoy con mi familia. Mi papá valorará lo que he hecho en Nicaragua y posteriormente me dirá que hacer.

RUBY GÓMEZ

Hoy son dos días desde que se fué mi jefe, es extraño regresar a las mismas actividades que hacía cuando inicié, ya me había acostumbrado a ser la asistente de mi jefe.

Para ser sincera, al principio me resultaba difícil estar todo el tiempo junto a él, cuando lo ví en la iglesia fué una gran sorpresa para mí igual para los chicos, incluso Luis y Wendy no se esperaban que el dueño de la empresa tecnogeneración fuera cristiano, pero sí era verdad, nadie se lo imaginó, puesto que no es muy abierto con nadie, sólo con su mejor amigo, después de unos días de estar visitando la iglesia me sentía en más confianza y hablaba un poco más con él.

El domingo antes de la última semana que estaría en el país salimos a almorzar con todos los jóvenes de la iglesia, después de ese almuerzo, nuestra relación de jefe a empleada mejoró y me sentía mucho mejor y con más confianza al realizar mi trabajo.

Días después, antes de irse, me invitó a almorzar para agradecer mi trabajo, yo acepté, y me preguntó si me podía llamar por mi nombre, le dije que sí y me pidió que también le llamara por el suyo, para mí es raro, pero dije que lo intentaría, a demás, me dijo que me considera una amiga, es raro viniendo de alguien como él, pero creo está bien, lo de ser amigos. Si es posible que un jefe y su empleada lo sean.

¡¿Esposa de mi jefe?! © #1  [Amores Inesperados]                *REESCRIBIENDO* Where stories live. Discover now