Mentiras de cristal

27.- La pantera rosa

ADVERTENCIA: Como ya se menciono anteriormente NO haré mención de nombres de medicamentos o píldoras, aquí las llamaremos por color o un nombre inventado para si proteger a posibles lectorxs curiosos que quieran intentar "probar" "experimentar" aunque algunxs se sorprendan, si hay lectorxs que lo hacen, así como hay lectorxs que se auto-diagnostican al leer síntomas o problemas. Por favor si necesitan ayuda ACUDAN A UN PROFESIONAL.

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La pantera rosa

Kaemon

Mantengo mi cuerpo rígido en una de las paredes de nuestros vestidores, nuestro entrenador se mantiene con sus puños en el escritorio, Dareen continua hablando mientras Nicklas frunce su ceño sentado frente al escritorio.

Pero mi mente viaja a los acontecimientos de hace dos días, muerdo mi labio aun pudiendo saborear su jodido y dulce sabor, jamás pensé que me dejaría probar su suave y cálida piel.

La maldita sorpresa que me lleve cuando ella acepto mi reto de tocarse frente a mí me llevo a la locura, escuchar sus suaves gemidos, ver como sus pequeños dedos se perdían en su interior, el aroma de ella inundando toda mi habitación.

Y ni hablar de la jodida manera en la que me permitió tocarme mientras ella lo hacía.

Si pensaba que no había un Dios, hoy le agradezco demasiado por ello.

No hay mañana, tarde o noche que evite pensar en ella desnuda de rodillas en mi cama, incluso esta mañana en mi examen de práctica en traumatología hizo que casi perdiera a un jodido paciente, no es que me importara pero maldición no puedo evitar cerrar mis ojos y verla tocándose.

Pensar en ella manteniendo los ojos cerrados con su respiración entrecortada mientras montaba mi almohada gimiendo mi nombre una y otra vez ejerciendo más fuerza entre su punto palpitante cada vez más duro y rápido.

—Lo confirmamos, el equipo de béisbol liderado por Liam ha estado consumiendo esta mierda—termina Dareen tirando todas las bolsas de pastillas rojas en el escritorio.

La pantera rosa.

Y es cuando me desconecto de mis pensamientos viendo con atención todo, esas pastillas las suministraba Dareen pero alguien comenzó a distribuirlas de manera anónima y por eso estamos aquí estamos, porque no sabemos quiénes están consumiéndolas, no llevamos el control de ello.

—Se supone que lo aceptaron de nuevo a Nesry Hill porque sus padres lo sacaron del pueblo para mandarlo a rehabilitación hace meses—carraspea el entrenador.

—Regreso con más mierda—bufa Nicklas dejándose caer en su asiento.

Los cuatro nos volteamos a ver pero el entrenador decide hablar.

—Si les soy sincero me vale mierda Liam y su equipo pero si alguien del jurado se entera y deciden hacer exámenes de sangre a cada uno de los participantes todos estaremos jodidos por su culpa—se coloca de pie—si me entero que alguien de mi propio equipo de natación está consumiendo droga para atletas yo mismo lo matare.

—Yo me encargaré de esta pequeña mierda—me separo de la pared pero el entrenador niega.

—Si Liam está en el hospital, la directora Cromwell debe de estar al tanto de esto, solo tenemos horas para que realicen esos exámenes y si alguien de nuestro equipo está consumiendo, no hay nada que podamos hacer por él salvo ahorrarse la humillación pública y entregarme su renuncia al equipo a más tardar mañana por la mañana.