Pendingrin

Capítulo 30: Segunda Parte.

De la propia historia...

Nadmi llegó al Centro de gobierno acompañada por Nikolái, juntos se dirigieron a la oficina de Sam, pero no lo encontraron, por lo que buscaron a Gaspard quien siguió fungiendo como alcalde interino.

—Tenemos cubierto todo el centro, los únicos puntos débiles son el bosque cerca del Castillo Armagnac y el Puerto —le explicó Nikolái a Gaspard.

—Los soldados del Hexin se apostaron en el camino de Peyton, no son tantos como creemos, así que podemos hacer guardias para que den rondines en el bosque y Puerto —propuso Gaspard.

—Es una buena idea, incluso pensé lo mismo, iré a la Academia para organizarlo todo —indicó Nikolái que salió a prisa de la oficina.

—Nadmi, ¿podemos hablar? —dijo Gaspard antes de que ella saliera detrás de Nikolái.

—Dime —habló Nadmi viéndolo a los ojos.

—Sé qué has pasado más tiempo con Chloe, pero quiero que tengas en claro que eso no significa nada, pronto se convertirá en mi esposa, no lo olvides —advirtió Gaspard.

Nadmi sonrió —Esperó entonces la invitación a la boda —.

—La tendrás, debes estar en primera fila para verlo a todo color —aseguró Gaspard.

—Qué amable —finalizó Nadmi para salir de la oficina.

Aunque trató de ignorar las palabras de Gaspard, al final la tristeza la invadió.

Pensamientos de Katherine:

La celebración terminó hasta pasada la noche, fue tan divertido y esos jóvenes tan agradables, para cuando salí de la Academia me encontré a Nina rodeada de un grupo de niños.

—Ellos son los que te conté —me dijo Alice que me llevaba del brazo.

—Pasarán la noche aquí y mañana se les asignará sus actividades —agregó Alice.

Pasé junto a ellos y no pude evitar poner mi cara de desagrado, los niños siempre me resultaron ruidosos, aunque no tenía inconvenientes con brindarles protección.

—El único que te agradó fue el Conde —expresó Nina cuando llegó donde estábamos.

—¿Quién es él? —averiguó Alice.

—¿No te contó? Es un niño que era su objetivo, pero termino encariñada —reveló Nina con una sonrisa.

—¡Dios! Tengo que conocerlo —afirmó Alice.

Mientras las tres caminábamos directo a los caballos, el carruaje de mi tonto cuñado arribó.

—Buenas noches, querida hermana ¿Pensaste en lo que te dije? —le preguntó Gaspard a Alice cuando se acercó.

—Tal vez asista ¿Irás acompañado? —indagó Alice.

—Sí, llevaré a Chloe, quiero que la conozcan —aseguró Gaspard.

—¿Qué sucede? —averiguó Nina en voz baja.

—Una reunión familiar —respondí.

Cuando llegamos a mi Castillo, Darlene y Lisa nos esperaban con una suculenta cena. Las cinco conversamos del día tan divertido e inesperado que tuvimos.

—Yo digo que Katherine debería ir a la comida familiar —opinó Nina.

—Concuerdo, después de todo eres la novia de Alice —agregó Lisa.

—Y tienes un hermoso vestido que aún no has estrenado de París —aconsejó Darlene cómplice.

La mirada de Alice se situó sobre mí, quise escapar, pero no pude hacerlo.